16: Alejate de mi familia

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Olía a moho, ropa sucia, sudor y a algo más apestoso que se mezclaba con todos los demás olores. Fruncí la nariz y me limité a tratar de no respirar demasiado.

Gabs estaba vistiendo a Heather, literalmente. Parecía una muñeca sin vida mientras Gabs soltaba palabrotas a su amiga. Decidí darme media vuelta regresando a la sala donde Anna se tapaba la nariz como si el olor le llegaran hasta acá. Me senté a su lado escuchando el ruido que hacían las chicas.

-Sería más fácil para Heather si supiera lo que le pasó a su hermana.- Hable pensando en lo que había prometido. Con Allen era muy difícil hablar, sobre todo porque lo único que quería hacer cuando estaba cerca de él era besarlo hasta que se me derritieran las neuronas.

-No sabes lo que dices. Si ella se entera probablemente causaría la tercera guerra mundial.- Cuando la mire me di cuenta de que no hablaba conmigo. O bueno, quizá si, pero estaba como ida.

-¿Como te sentirías tú si alguno de tus hermanos muriera...-

-Ella no está muerta.- Me corto rápidamente sonando furiosa. Me lancé hacia atrás asustada por su potente mirada.

-¿Que le paso, entonces?- Anna nego con la cabeza y apoyo sus codos en las rodillas tomando su cabeza como si no soportara algo.

-Es tan dificil.-

-¿Que es dificil? ¿Te has puesto a pesar en como se siente Heather en estos momentos? ¡Mirala! ¡Esta destrozada!- Señale a la puerta abierta de la habitacion de la castaña creando enfasis en mis palabras. Esta era la conversacion que se acercaba mas a descubrir lo que verdaderamente paso con Monick que habia tenido desde que conoci a los Collingwoood y a pesra de que probablemente esto lastimaria a Anna, no podia parar.

-Los humanos son tan fragiles, hay cosas que debemos mantener oculto por su propio bien.- Sus palabras crearon eco en mi cabeza y me desconecte de nuevo. Parpadee una sola vez y mi mente me llevo a otra parte. Ya no estaba en la casa de Heather, estaba en una calle que daba a una enorme casa, llovia pero mi piel no se mojaba, como si en realidad no estuviese ahi. Tal y como paso en el baño de la escuela.

Una pareja paso delante de mi con la mirada tan triste, como si llevaran el mundo en sus hombros, era un dolor tan profundo que lo senti. Por una razon desconocida no podia apartar los ojos de ellos, ni del bulto que parecia un bebe que estaba en los brazos de la mujer. Eran como un hoyo negro que se tragaban todas las miradas.

-¡Oye! ¿Estas bien?- Senti sus frias manos en mi mejilla que me sacaron de mi ensoñacion. Respire profundamente y me incline hacia mi mochila sacando mis pastillas, me tome una en seco y trate de seguir respirando con normalidad.

-Estoy bien, estoy bien.- Quito sus manos de mi y me siguio viendo con preocupacion. Trate de recordar de que estabamos hablando antes de mi colapso mental.

-No te ves muy bien.- Negue con la cabeza y pense en las preguntas correctas.

-¿Por que hablas de los humanos como si tu no lo fueras? ¿Y de que hablas? ¿Que estas manteniendo oculto?- Anna se enderezo como si le hubiesen aventado agua helada, aunque ni eso pondria su piel mas fria.

-Hablas puras incoherencias.- Quise replicarle pero Gabs salio arrastrando a Heather de la habiyacion.

-Ya estamos presentables. Que bueno que vinieron, me estaba volviendo loca encerrada ahi.- Avento a Heather al sillon y ella cayo de espaldas entre Anna y yo.

-¿Te quedas a dormir aqui?- Pregunte quitando el pelo de la cara a Heather, que parecia que lo unico que podia mover eran los parpados.

-Si, mi abuela encontro a un anciano y los dos se pasan bebiendo hasta que se olvidan de la edad que tienen y se ponen a hacer cosas asquerosas que...-

Alas y sangre (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora