Alas y sangre (Editando)

20: Se fué.

Estábamos las tres en la cafetería en otra mesa que estaba pegada a los ventanales que había a los laterales de la cafetería.

En la mesa de centro, donde antes nos sentamos estaban los Collingwood haciendo como si no existieran nuestras presencias, lo cual me dejaba herida.

Me sentía mal, muy mal por lo que les había echó.

Tenía una manzana en mis manos recordando la vez en que Allen me dió una. ¿Por que lo había echó? ¿Por que si había aceptado la manzana de Allen cuando no había aceptado las donas de Dereck? ¡Eran donas!

Y yo había aceptado como una loca la manzana de Allen, porque a pesar de estar intentando matarme, el me atraía de una forma no sana. Que estúpida era.

Esta bien, esos pensamientos solo me iban a dañar. Sólo debía de ignorarlos tal y como ellos me ignoraban.

La relación que tenía con Allen se había acabado.

¿Que relación? ¿Donde tu corres mientras el va detrás de ti con una motocierra?

Que loca.

-¿Estas escuchando, Layla?- Me por Gabs pasando una mano delante de mis ojos para llamar mi atención.

Le di un mordisco a la manzana para ganar tiempo de responder.

-Gabs te estaba diciendo que si íbamos al cine este viernes.- Respondió Heather por mi al ver que no te la idea de que estaban hablando.

Solo necesito esa oración para tener de nuevo en mi mente a los Collingwood.

Anna y yo teníamos planes para ir al cine, supongo que eso ya estaba descartado.

-Si, esta bien.- Dije sin ánimos de seguridad hablando.

Después de eso quedamos las tres en silencio, aburriendo nos como unos hongos en putrefacción. Como me odiaba en estos días.

-Necesitamos novios.- Suspiro Gabs mordiendo si emparedado de atún.

Rodee los ojos cuando la imagen de Allen apareció en mi mente.

¿Por que tenía que pensar cada cinco segundos en ellos?

Era una completa idiota al estarme aferrando a esas personas que me estaban haciendo tanto daño. En especial Allen.

Cada vez que pensaba en peligro mi cerebro me decía que era Allen, pero mi corazón se negaba a aceptar ese hecho.

-Lo último que necesitas es un novio. ¿Que pasó con Hale?-

-No funcionó. Tina Martín lo atrapó antes que yo, esa...-

-Calmada. De todas formas Hale no era para ti.- Dijo Heather lanzando le una papa frita a su plato.

-Ya se quien es para mí.- Hablo Gabs cambiando drásticamente su expresión a una seductora. -Miren ese chico de ahí.- Giré mi cabeza hacia donde Gabs miraba para encontrar al mismo chico que Anna dijo que era tierno.

Tenía el cabello castaño, un perfecto cabello y sus ojos cálidos se encontraron con los míos como si me sintiera mirarlo.

Sonreí levemente en su dirección y él también lo hizo.

-Si, es lindo.- Dije aunque ya le había dicho a Anna que mi tipo de chico no encajaba con su perfil.

Nuestra lucha de miradas se acabó cuando el tierno chico cayó hacia adelante sobre su bandeja de comida cuando un hombro fuerte chocó con el.

Allen.

Sus ojos grises se toparon con los míos, me miro con tanto odio que hizo a mi estómago retorcerse.