special trainee « bts

001.

Estaba andando por la agencia buscando a la chica que se encargaba de mi imagen; mi estilista. Me enteré por boca de otros que iba a cortarme mi preciada melena, ¿¡cómo se atrevía?! Vale, tal vez exageré, pero dejé muy claro que la idea de usar un corte de pelo no me gustaba, además, incluso el CEO dijo que no lo usaría, la idea estaba descartada por completo. Accedí a que me quitasen todo pigmento de mi castaño claro natural para usar un rosa ceniza, pero cortarlo ¡ni hablar!... Hacía mucho tiempo que quería llegar a el largo que llevaba, y justo querían cortarmelo a la altura de mi barbilla.

(...)

Aún no sabéis mi historia, ¿debería de contar como llegué a ser trainee de la SM Entertainment?... Digamos que sí, así que empezaré con ella:
Estaba andando por las calles de Seúl, simplemente con el gusto de pasear y buscar algún nuevo café que no haya probado antes, en eso se basaban mis días libres. Mientras andaba ví que había un pequeño corro y me acerqué, no era muy abundante así que desde la lejanía pude ver que era causado por un grupo de chicas que se estaban turnando para bailar y cantar. La siguiente canción que sonó era Holiday, de Girls Generation, que la bailó una rubia alta. Era una voz muy bonita, se notaba que estaba nerviosa, pero la canción se disfrutaba del mismo modo. Aquella actuación provocó que bailase, debo apuntar que esa vez estaba siendo acompañada por Kim Sunhee (Sunny) así que simplemente bailé para avergonzar la, sinceramente, pero ¿quién iba a pensar que me pidiesen esas chicas que hiciera una actuación también? Sunny, la muy maldita, les dijo que yo lo haría encantada y tuve que hacerlo básicamente porque dijo que me invitaría ella al café si cantaba una canción entera, lo que ella no esperaba era que lo hiciera. Me pidieron que cantase algo que pudiese animarlas ya que había poca gente para ellas, la que tenia el pelo corto y rojo me preguntó si podía cantar Electric Kiss, cantarla y bailar la sola no quedaría bien así que...

—Solo si también cantas y bailas conmigo, ¿sabes la coreografía?—le sonreí.

—¡Claro!—pude ver como su labio superior desaparecía mientras sonreía.— Soy exo-l.

—Para qué le pregunta...—se frotó la frente una de piel un poco más monera.

Me hizo reír, también tenía un grupo favorito.

Hablamos un poco antes de empezar con la "actuación" ya que habían algunos pasos en los que una tenía que hacer una cosa y la otra, otra para que no quedase desastre, así que después de hacerlo nos acercamos a el chico que estaba con los altavoces, la pelirroja le pidió dos micrófonos y que preparase la canción, cuando tuvimos los micrófonos nos colocamos en medio del círculo, entonces, cuando todos callaron ella empezó a hablar.

—Casi llega a su fin esta presentación.—sonrió mirando a todos— Yo soy Eun Jiyoung, y ella es...

—______.—contesté sonriendo después de su pequeño espacio.

—Y vamos a interpretar Electric Kiss, de EXO, espero que les guste.

Hicimos una reverencia y nos colocamos en nuestros puestos, el chico anterior no tardó en colocar la canción y empezamos a cantar, cuando canté Jiyoung me miró, supuse que esperaba que saliera de mí otro tipo de voz, o tal vez simplemente no esperaba una decente. Era raro notar como se iba llenando el lugar con el transcurso de la actuación, así como bailar con una mano dirigida a mi cara para que se escuchase mi voz, a pesar de eso era una sensación que me gustaba, tanto así que cuando hice el último paso apenas recordaba haber cantado y bailado toda la canción. La gente empezó a aplaudir,  Sunny simplemente me miraba mal ya que iba a tener que pagar mi café, pero a la vez sonreía y me apuntaba con su teléfono. Ambas hicimos una reverencia y nos retiramos del centro de aquel cúmulo de gente que se había formado. Otra chica dió comienzo a otra presentación y nosotras nos juntamos al resto de aquel extraño grupo de chicas.

—Siempre te voy a odiar por esto, que lo sepas.—espetó Sunny con media sonrisa, ¿esperaba que la tomase en serio?

Sunny siempre pedía que bailase y cantase, pero siempre que lo hacía en la calle prácticamente ordenaba que me callase, ella era sumamente vergonzosa. Y eso de la vergüenza ajena conmigo lo tenía presente casi todos los días.

—Tal vez deberías unirte a nosotras en la próxima presentación, quién iba a decir que de ese cuerpo tan pequeño iba a salir una voz tan potente.—dijo la rubia.

—No tiene un cuerpo pequeño, tú eres muy grande.—habló por primera vez la del pelo azul.

La rubia rió, era verdad, ella era muy alta y yo tenía una estatura media. Estaba muy feliz con mi metro sesenta.

—Por cierto, no nos hemos presentado, yo soy...—cerró su boca ya que alguien colocó su mano en mi hombro y me giró hacia él para que lo mirase.