For You- Joseph Morgan

Capítulo 39; Una oportunidad más.

Narra Joseph:

Alison acaricia mi cabello, me deja llorar aferrándome a su cintura y susurra cosas dulces para consolarme.

-Deja de llorar.-Me dice, intenta sonar cariñosa pero no lo consigue.-Joseph, de verdad. No llores más.-Agrega.

-Lo siento muchísimo.-Digo, es la décima que lo hago, pero creo que nunca serán suficientes para enmendar el terrible daño que he cometido. Ninguna palabra puede arreglar lo que he hecho.

-Lo sé, créeme, te llevo escuchando desde hace veinte minutos decir que lo sientes.-Comenta fríamente, sin compasión alguna por mí.-¿Quieres qué diga que está bien?-

Levanto la mirada para verla a la cara.

Alison es hermosa.

-No tienes que mentir.-Respondo, imitando parte de su fría actitud. Aunque la voz se me quiebra por las lágrimas que llevo derramando desde hace veinte minutos.

-No es una mentira.-Me responde.-Te digo que está bien.-

-¡¿Cómo diablos va a estar bien lo qué hice?!-Suelto con una indignación que no sé de donde ha salido.

-Te gusta torturarte a ti mismo.-Asegura.-Disfrutas sufrir.-

-Cuando se trata de ti, merezco un poco de dolor.-Confieso, algo gélido me recorre el cuerpo. Me siento estúpidamente débil ante ella, estoy a merced de que se digne a destruirme.

-Deja de hablar de dolor, por favor. Intento superar esto, deberías intentar hacer lo mismo.-Me recomienda, acaricia mi cabello una vez más. Aprieto mi agarre en su cintura al notar que es la primera vez en semanas que me deja tocarla por más de dos minutos.

-¿Cómo voy a superarlo sí tu no me perdonas?-Pregunto, ella frunce el ceño.

Alison Hale es más que hermosa.

-Te perdono.-Me dice, con su usual indiferencia. Me gustaría entrar en su cabeza en estos momentos y ver que clase de pensamientos retorcidos le inundan la mente.-¿Era lo que querías?-Agrega desdeñosa.

Miente, en realidad no me perdonará nunca.

No suena real.

-No de esa forma.-Sigo su juego, necesito saber a donde quiere llegar.

Ella se inclina hacia mí.

-Es la única forma que conozco para decirte que te perdono.-Me dice.

-Careces de imaginación, cariño.-Me atrevo a decir, unos segundos luego, comprendo el doble sentido de lo que ambos hemos dicho. ¿Por qué a todo le encuentro doble sentido?

-Lo cierto es que sí.-Dice, con una lastima que ha de ser falsa. Se separa de mí de nuevo y aparta mis brazos de su cintura.-Te ves realmente lindo cuando lloras.-

No comprendo a Alison Hale. Su actitud puede cambiar en cuestión de segundos. No sé como lo hace, pero puede enfurecerce, ser fría, ser divertida y dulce durante la misma conversación en cinco minutos.

Sí su plan es confundirme, lo ha logrado.

Las últimas semanas ni me ha dirigido la palabra y hoy me ha confesado que me sigue queriendo,  luego de estar a punto de acostarse con uno de mis amigos.

Es más inestable de lo que creí en un principio.

-¿Me quieres?-Pregunto, necesito que me lo diga una vez más.

-¿Y aún preguntas eso?-Me mira extrañada.-Te he odiado durante las últimas semanas, o eso era lo que creía, pero, he estado pensando en ello. Era sólo rabia y dolor, no odio en verdad. Mis emociones bajan y suben últimamente, y la única que se ha mantenido constante, es el estúpido amor que siento por ti.-Confiesa, mirando sus pies descalzos. No le gusta hablar de lo que siente.-Y eso me mantenía furiosa y triste. Porque te quiero, y lo que hiciste me dice que el sentimiento no es mutuo.-