TAIYŌ | UCHIHA ITACHI

42

Kaguya entrecerró los ojos, analizando a Naruto y a Sasuke, dándose cuenta del poder que poseían.

—¡Naruto, Sasuke-kun! —gritó Sakura cuando la mujer los arrojó con fuerza contra una estructura de roca.

Asuna sintió su cuerpo congelarse cuando aquella mujer pasó por su lado, sintiendo su chakra abrumador tan cerca. Kaguya siguió de largo, su objetivo eran Naruto y Sasuke.

—Esos son Hagoromo y Hamura. No... ¿Indra y Asura? —activó su byakugan y los observó—. Entonces, ¿ese jutsu se los habría dado Hagoromo?

—¡¿Cuál es tu objetivo?! —preguntó Kakashi.

—Ninshu... No, se hicieron llamar ninjas —explicó—. Les hablo a ustedes, que juegan con el chakra sin saber lo que significa, esto es inevitable. Pero este lugar, este terreno es mi precioso semillero; no puedo recibir más daño. Terminaremos con la pelea aquí mismo.

El entorno cambió. Estaban en un lugar diferente y caían directamente hacia la lava bajo ellos. No era un genjutsu, Asuna podía sentir su chakra y el de los demás en calma, ¿acaso Kaguya tenía el poder de manipular las dimensiones?

Sasuke invocó a Garuda y cayó sobre él.

—¡Sasuke, por allá! —Naruto apuntó al resto del equipo, aún caían.

Los ojos de Itachi se encontraron con los de Sasuke, sabía que su prioridad en ese momento era que Naruto estuviera a salvo, sino no podrían detener a Kaguya. Él se encargaría de proteger a los demás.

—Asuna —musitó, extendiendo su mano hacia ella para que la tomara.

—¡Bien! —aceptó, comprendiendo el plan.

Itachi atrapó a todos con la mano de su Susanoo y Asuna lanzó un kunai hacia una estructura firme, teletransportándose a ese lugar.

—¿Eh? —exclamó Sakura cuando su banda se deslizó por su frente y cayó a la lava.

—Naruto, te lo dejaré muy claro —advirtió Sasuke, mirando a la enemiga frente a él—. Si cualquiera de los dos muere, este mundo estará acabado. Solo con tu poder del yang y mi poder del ying podremos sellar a quien tenemos delante, si no lo conseguimos será el fin de la humanidad; pase lo que pase no podemos morir.

—Comprendo lo que dices, pero a veces el cuerpo se me mueve solo, como aquella vez —respondió Naruto.

Ambos recordaron aquel momento, Sasuke había protegido Naruto de las agujas de Haku en su primera misión importante en el Pais de las Olas; cuando su amistad comenzó.

Kaguya lanzó una senbon de su cabello y Sasuke protegió a Naruto y a él mismo con el Susano, pero una de las senbon dio en un punto vital del halcón haciéndolo perder estabilidad.

A los segundos estaban cayendo hacia la lava, pero Naruto sostuvo a Sasuke con una mano de chakra mientras flotaba en el aire.

—¿Eh? Naruto está volando —murmuró Asuna, asombrada.

—Es por el chakra de Rikūdo —explicó Itachi.

La batalla siguió. Naruto se enfrentó a Kaguya hasta que ella lo mandó a volar, así que Sasuke aprovechó esa oportunidad para lanzar una flecha con su Susanoo, con la cual se intercambio de lugar para llegar con más rapidez hacia la enemiga.

Todos se cubrieron con sus brazos cuando hubo una explosión, Asuna abrió los ojos y a pesar de que apenas veía, logró ver que Sasuke estaba cayendo hacia la lava. Suspiró aliviada cuando él se intercambió con una de las gudōdama de Naruto y alcanzó a sostenerse de su pie. La sustancia negra se moldeó hasta formar una base circular para que sirviera como punto de apoyo para el Uchiha.