Capítulo 8

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Me hice a un lado para que Hoseok pudiera pasar. Lo ayude a cargar a los chicos hasta una de las habitaciones de arriba, tuvimos que subir las escaleras y no sé como demonios lo hicimos. Baje rápidamente y cerré la puerta con llave. La seguridad primero.

Me senté en el sofá de la sala sintiendo mi cuerpo bastante ligero. Debe ser a causa del susto, es decir, ¡casi me da un infarto! Están muy heridos y de pronto aparecen en mi casa. Es muy impactante. Los pasos de Hoseok al bajar por las escaleras me dieron a entender que debía reaccionar y salir de ese trance en el que había entrado.

Él me observó con seriedad y se sentó a mi lado. Se quedó en silencio, clavando la mirada en el suelo y yo hice lo mismo. Mi estómago se revuelve con intensidad provocandome una horrible sensación de miedo.

—¿Qué sucedió?—me atreví a preguntar, dudoso.

Hoseok me miró con impotencia y supe que no había podido resolver del todo este problema. Observe su uniforme de policía, sí, hace un año que trabaja inspeccionando las calles en busca de algo irregular, como posiblemente sucedió hoy. Aún no se como eligió ese trabajo pero parece gustarle.

—Sabes que hago mi revisión diaria, debo vigilar los alrededores.—comenzó a explicar, entrelazando sus manos con fuerza. Prosiguió:—Cuando entró en unas calles cerca de aquí, encontré a unos chicos golpeandolos, al verme salieron corriendo y no me dio tiempo de alcanzarlos. Solo agarre a Jungkook y al otro chico, y los traje aquí. Fue el único lugar que se me ocurrió que no fuera el hospital ni la estación de policía.

Fruncí el ceño al escuchar tanta información. ¿Unos chicos? ¿Por qué querrían ellos hacerle algo a Jungkook? No, tan siquiera a Taehyung, que parece no matar ni una mosca. Que extraño. Aunque le de muchas vueltas no le encuentro una respuesta lógica.

Hoseok pareció leer mi mente, porque agregó:—Lo sé, es confuso. Pero cuando llegué, ellos discutían y lo que logré escuchar me da a entender que Jungkook los conoce al igual que su amigo.

—¿De dónde podría conocerlo? No entiendo.—me queje, despeinando con enojo mi cabello.

—Yo tampoco lo entiendo. Sólo nos queda esperar a que despierten. ¿Puedo quedarme aquí?

Asentí.—Claro, ya sabes dónde.

—Gracias. Si me disculpas, me voy a dormir. Este día fue horrible y agotador.—se levantó con pereza y comenzó a subir las escaleras. Se detuvo repentinamente y me miró.—Me parece que Jungkook esconde algo.

Hice un intento de decir algo pero ya no estaba. Sus palabras rondan por mi mente y parecen grabarse lentamente. ¿Qué podría esconder Jungkook? Si él no parece ser así, algo me dice que debo creerle. Ahora que lo pienso, está en un Instituto Correccional y si está ahí, es por una razón.

Nunca lo había visto de esa forma. Me parecía tan tonto y desesperante, aunque algunas veces, veo a un Jungkook completamente distinto. Muy poco lo he notado pero esta presente, lo sé. Y quiero descubrirlo, no debería querer saber más sobre él pero ya no puedo evitarlo.


Me acosté con cuidado, casi no puedo sentirme cómodo. Estúpido sofá. Apoye mi cabeza en el reposar del brazo, y solté un sonoro suspiro. Jungkook es un completo enigma, no conozco nada acerca de él, a penas me enteré de que tiene padres y ahora sucede esto, ¿Cómo debería sentirme? Estos chicos desde luego, que no son buenos pero ¿Qué hacen lastimando a Jungkook? Cerré los ojos con fuerza dejándome llevar por la impotencia, me molesta demasiado que le hagan algo, ¿Qué diablos estoy haciendo? Relaje mi cuerpo y deje que morfeo me llevará, quizás dormir sea lo mejor.

**

Abrí los ojos con pesadez y di varios parpadeos para acostumbrarme a la luz del sol que se cuela por la ventana. Me removí incómodo, aturdido por el dolor en diversas partes de mi cuerpo. Mierda, duele. Me levanté con dificultad y mentiría si dijera que no estuve a punto de rodar por el suelo como una cosa extraña. Me estiré un poco, soltando un quejido de dolor, dios. Escuché unos ruidos provenientes de la cocina, me di la vuelta asustado y me encontré con un sonriente Hoseok, vestido con un delantal y como si fuera poco, preparando el desayuno.

Sweet Caprice ↛ KookminWhere stories live. Discover now