Capítulo 18

8.1K 866 380
                                    

Aún no comprendo cómo demonios no escuché el ruido de la puerta y el auto, absolutamente nada logre oír. Desde luego mi mente estaba concentrada en algo mucho mejor. De cualquier forma, debo enfrentar esto.

Tomé una larga respiración y me bajé de la mesa cubriendo un poco mi rostro lleno de vergüenza. Mi corazón late freneticamente debido a los nervios y siento como mi estomago se revuelve con locura.

—Sigo esperando una explicación.—demandó, cruzándose de brazos con impaciencia.

—Bueno, verás... —comencé a decir, balbuceando.

—Mi nombre es Jeon Jungkook, señora. Mucho gusto, es un placer conocerla.—sonrió, acercándose con total confianza y estrechando su mano.

Mi madre aumentó su enojo y buscó en mis ojos una respuesta. Todo mi alrededor comenzó a distorsionarse y de un momento a otro, me sentía sofocado. Debo ser un hombre, dije que iba a intentarlo, no debo huir.

—M-Mamá, él es... Es un amigo.—lo señalé, luchando para mantener mi voz estable.

—Park Jimin, sacalo o llamo a tu padre, no quiero que lo veas más. ¿Cuándo vas a comportarte?—amenazó, alejándose de Jungkook y aproximándose a la puerta.

—Pero mamá... —traté de objetar pero notar como rebuscaba en su bolso el teléfono, me hizo desesperar.

—¡N-No, no! ¡No le digas a papá! No, por favor...—suplique, alzando la voz con desesperación.

La sola idea de ver el rostro serio y enojado de mi padre me pone los pelos de punta. Él quería que lo suplantará en la empresa y que lo ayudará, en cambio, yo estudié literatura para ser profesor porque era lo que quería. Y lo decepcioné, no cumplí con sus expectativas. Y ahora, decirle esto, seria romper con toda confianza y amor de su parte.

Mis ojos se cristalizaron y mi cuerpo comenzó a temblar ligeramente. Es asfixiante sentir un hueco en tu corazón que hace una insoportable presión que no parece tener fin. Tengo miedo, no quiero defraudar a mis padres.

Jungkook trató de acercarse a mí pero me alejé, dudoso y confundido. Quiero que me abrace y me proteja, pero a la vez, quiero hacer lo que dice mi madre porque tengo mucho temor. Observé como mi madre me observaba con frustración y Jungkook parecía dolido.

—Lo siento, Jungkook... V-Vete, por favor...—solloce, obligándome a mi mismo a no doblegar.

Él pestañeo desconcertado y me observó con unas emociones indescriptibles reflejadas en sus ojos. Me quede sin aliento, no quiero que se vaya. Di un paso al frente sin ser consciente, solo pensando en sentir su calor.

—¡Jimin, ni se te ocurra!—gritó histérica haciéndome retroceder instantáneamente.

—Jungkook, lo siento... Vete, por favor...—susurré en voz baja lo suficientemente audible para que él pudiera escucharme.

Trato de acercarse de nuevo, sin embargo, se detuvo y no dijo nada. Solo me miraba con una expresión neutra, al transcurrir unos segundos, suspiró y se dio la vuelta para irse. Caminó con pasos firmes y rápidos, pasó al lado de mi madre y logré captar como le rodó los ojos con burla.

—¡Tú, condenado niño!—rugió mi madre al verlo reír con ironía.

—Mujer tonta, no deja ser feliz a Jimin.—escupió las palabras con sarcasmo, para luego marcharse completamente.

Mi madre cerró la puerta de un solo tirón y se giró para mirarme fijamente con sus ojos amenazadores. Derramé más lágrimas en silencio, recordando la expresión dolida de Jungkook, no quiero lastimarlo, quería un abrazo. Mejor dicho, lo quiero justo ahora. Una fuerza creció en mi interior y me cubrí el rostro con mis manos, explotando en llanto.
Mi madre al final no hizo nada, sólo suspiró y se fue a su habitación. Por mi parte, continúe llorando media hora más hasta arrastrarme al sofá y quedarme completamente dormido. De lo que estoy seguro, es que debo alejarme de Jungkook por ahora hasta que logré encontrar una salida o una solución.

Sweet Caprice ↛ KookminWhere stories live. Discover now