▶ Imagine One Shots ◀

( 13RW ) Clay Jensen

Clay había dejado de hablar me después de que escuchó mi cinta, la número 13, así es, terminé en una cinta suya, la última y la más “importante”, ya que las anteriores no las toman en cuenta. Por que lo que más vale es la última razón por que suicidó. Antes de que comiencen a criticar me les diré por qué acabé en una de las cintas que aparece en la lista...

Flahsback

Hannah y yo habíamos quedado un fin de semana vernos en Monnet's, nuestra cafetería favorita desde luego. La razón era de que mis padre ya no querían que estuviese con ella la mayor parte del tiempo, pero ¿qué podía decirles?, ¿que es mi única amiga?, ¿que nos tenemos la una para la otra para apoyarnos en todo? Mientras enviaba una mensaje para mi madre y me dejara de mandar más de sus sermones vía por chat escuché esa voz — ¡Hola! — haciendo que levantase la vista de la pantalla encontrándome con una castaña sonriente: guardo mi celular para prestar le absoluta atención — Siento la demora. Es que hubo un pequeño inconveniente en mi trabajo y no me dejaron salir hasta que despachara a un cliente — explica y sonrío de lado aguantando la risa — De acuerdo, ya estoy aquí. ¿Qué querías decirme? — suspiro, no sé si esté lista o no para decírselo, justamente llega el mesero y nos toma la orden, me pido un frappé y Hannah pide unos brownis junto con su taza de chocolate con crema. Conversamos, reíamos, sonreímos y de vez en cuando nos hartabamos a que nuestra orden no llegaba. Esas risas y sonrisas serían las últimas de nuestra gran amistad. “¿En verdad tienes que hacerlo?” Si, debo y tengo que — Aquí está su orden. Gracias por haber esperado — masculla el mesero entregando lo que pedimos y le agradecemos, comenzamos a degustar — Bueno. Ya reímos y todo pero... ¿Qué era lo que tenías que decirme? — me incómodo un poco, sudo en frío, mis manos me tiemblan y los nervios comienzan a contaminar me — Hannah... — dije, trago en seco y la miro secamente — Ya no podemos ser amigas — dije firme conteniendo las lágrimas que en cualquier instante brotarían — ¡¿Qué?! — se ríe un poco — Vaya, que buena broma. Seguramente te irá bien en actuación — niego con la cabeza — No Hannah... estoy hablando enserio — por un momento se me queda mirando y comienza negar con la cabeza manteniendo una sonrisa forzada en su rostro — Hannah mis padre me obligaron. Yo no quería en verdad — me mira, sus ojos están cristalizados — Entonces si tus padres te dicen que te tires desde un precipicio ¿lo harás? — niego con la cabeza — No pero... — me interrumpe — Pero nada ____. Pensé que nuestra amistad valdría la pena. Pasamos varios meses juntas, creí que por fin tuve una amiga de verdad, que no me dejaría como los demás, como Courthny, como Jessica o Alex y ya vi que estaba equivocada — responde — Hannah te mandaré mensajes, trataré de estar en contacto contigo. Sólo deja me explicar te — sus lágrimas brotaron — No, ahorra te tus palabras para alguien más — dicho esto último se fue. Me quedé ahí, desquitando me con mi frappé y los brownis...

Fin de Flashback

Y así fue como terminé en la última cinta de mi mejor amiga Hannah Baker... — Clay por favor — suplicaba mientras tocaba la puerta de su cuarto. Sé que sentía algo muy fuerte por Hannah, ambos se gustaban, ambos querían estar juntos y tras escuchar la verdad, tras escuchar la verdadera cinta número 13 se enfadó conmigo. Él creyó que no soy la culpable de su suicidio, por eso no se separó de mi. Continué tocando la puerta varias hasta que dejé de hacerlo al ver sus hermosos ojos azules, tan cristalizados, tan profundos y tan tristes. Sus mejillas con algo de moretones provocados por los amigos de Justin, su labio partido y su golpe de la frente que todavía se llega a ver — Clay — tomo su rostro con ambas manos. Varias lágrimas brotan de sus ojos, me abraza y solloza en mi hombro — ¿Por qué...?  ¿se tuvo que ir? — pregunta entre cortado. Acaricio su cabello y mis dedos viajan por su cuero cabelludo — Ella sólo... — suspiro — Ella sólo se fue quebrando — suelto, deja de abrazar me, me mira a los ojos y mis manos se mantienen en sus mejillas. Siento algo en mis labios, algo húmedo. Un beso inesperado de su parte y apasionado. Hace que entre a su cuarto, me recuesta en su cama — Queda te conmigo — me dice en mis labios — Así será — contesto en los suyos. Algo tan inesperado ¿no lo creen?