▶ Imagine One Shots ◀

( T W D ) Carl Grimes 1/2

Narra T/N:

Sigo despierta en esta vida, en un mundo paralelo y lo único que quiero saber es si mi verdadera familia está bien. Por desgracia todo se siente tan real, todo es tan real.

Me siento agobiada, incluso inseguro y frente a las personas pareciera que soy la única salvadora de Alexandría. Es ahí que debo tomar una decisión, una muy buena.

Me levanto de la cama. Quizá lo que necesito es despejar mi mente y enfocarme en lo que en verdad importa. Ato los cordones de mis botas, me abrigo, me cuelgo a los hombros mi mochila y en mano me cargo el rifle. Salgo de casa, camino por los senderos de la comunidad. El frío azota mis mejillas, congela las puntas de mis dedos y mis pies.

Llego a las rejas. Las abro, salgo y vuelvo a cerrarlas y camino como alma lleva el diablo. Me adentro al bosque una vez que estoy demasiado lejos y comienzo la cacería.

(...)

Mato, aniquilo, desollozo... Hago mil y un cosas con tal de matar a aquellos caminantes. Inesperadamente ya no estoy en el bosque, estoy perdida.

Aún así disfruto de la hermosa vista que me brinda el amanecer desde la altura de un edificio. Entonces dejo a un lado mi mochila, rebusco en ella. Encuentro mi diario. El forro es de cuero, tiene un broche y las hojas están algo arrugadas pero intactas. Saco una pluma y escribo. Planeo todo de acuerdo a la situación.

Espero salgamos con vida.

Guardo todo. Veo en horizonte. Susurradores se están aproximando.

Me alejo del borde, me llevo mis pertenencias. Busco un atajo, olvidé por completo sobrepasar las fronteras. Sólo ocasiono que mi gente esté en más problemas.

(...)

Un susurrador me sujeta por los hombros uno más de ellos amenaza con degollarme. Soy más ágil, pateo su entrepierna, del bolsillo de mi pantalón saco mi navaja, entierro esta en el muslo de quien me sujeta. Golpeo su rostro. Cae. Agarro una piedra y termino con matarlo dolorosamente. A lo lejos veo que se aproxima Alpha.

Huyo.

Corro con todas mi fuerzas. Veo una frontera al final del bosque... Mis piernas me están matando pero no voy a rendirme, no lo haré por Carl, por Michonne, por Judith, por Daryl, por Carol... Por mi familia.

Atravieso la frontera. He regresado a la zona segura. Alpha camina sin prisa alguna, recupero el aliento. Giro a mis espaldas. Ya vienen.

Vuelvo a mirar a enfrente.

— Arquera... Pequeña y tonta arquera.
Parece que no tienes respeto alguno ante mis fronteras — me pongo de pie, dejo a un lado mi mochila, tiro mi navaja —. Te ves tan indefensa y débil. Creeme, tú y tu gente pagarán por todas las veces que sobrepasaron mis fronteras, especialmente el Cowboy —.

— ¡Él no tiene nada que ver en esto! — grito —.

— ¿Me estás gritando? ¿Acaso me gritas cuando yo, tragando me mi orgullo, te hablo pacíficamente? —.

— Vete al infierno — mascullo —. Si grito es por que te he permitido demasiadas cosas hacia mi comunidad. Si mi padre siguiera con vida ya estarías muerta —.

— Pero yo no lo veo por aquí. Siempre hablas de él y nunca aparece. Espera... Él está muerto ¿no es así? — trago en seco —.

— Calla te —.

— Debe de ser doloroso perder a un padre. Tener que crecer sin él sólo lo convierte en una apuñalada directamente al corazón — habla —. Comparto el mismo dolor. Yo perdí a mi hija... — cambia su ceño a uno molesto —. ¡Por que tu gente le lavó el cerebro con ideas totalmente abruptas! ¡Con ideas realmente estúpidas! —.