My Hero Academia x Lectora

✨Escenario✨

Idea y pedido por: Mey_2057

¡Espero te guste! ❤️

Escenario: Izuku, Katsuki, Shōto, Eijirō, Shinsō y Denki por el quirk de un villano terminan convertidos en animales y la protagonista tiene que cuidarlos mientras pasa el efecto.

...

Midoriya Izuku

Para aquellos momentos __________ agradecía esa virtud suya de mantener la calma en situaciones desesperantes, aunque no quitaba el hecho de querer correr en círculos ante los nervios.

---Tú mamá---habló finalmente.

No hacía falta explicar el porqué de la expresión confundida del pequeño y adorable conejo de pelaje verde que se encontraba en el piso, alzando la mirada ante la presencia de _________.

---Iremos con tu mamá---aclaró---. Crees... ¿crees poder caminar?

Ante la pregunta el conejo se impulsó en sus patas traseras, pero solo consiguió tambalearse, dando una clara respuesta, por lo que ________ suspiró y tomó en sus brazos a su ahora amigo convertido en conejo. Caminando a casa de la progenitora de su amigo, la joven no pudo evitar acariciar el pelaje color verde del animal, cuestionándose si así de suave era su cabello en realidad, de igual forma notó el movimiento nervioso de la nariz del conejo y como cada vez se encogía de a poco, hasta que su cabeza se volteó hacia a ella, y supo qué quería preguntar.

---Hay que aprovechar---se excusó---, esto no se presenta todos los días.

Midoriya no sabía cómo tomar aquello, en todo caso no es como si quisiera que _______ detuviera las suaves que le proporcionaba. Aunque también se sentía mal por querer permanecer así más tiempo sólo para sentir a la chica que le gustaba más de cerca.

Bakugō Katsuki

---No sé si sentirme mal por ti o reírme---habló sincera.

A pesar de que no podía expresar su molestia con palabras, Bakugō ladró tanto como podía, no obstante, a ________ le parecía muy gracioso ver a su amigo así de pequeño, ladrando, y de paso, siendo un lindo perro que curiosamente poseía el mismo cabello rubio y pinchudo.

---Te ves estúpidamente adorable---agregó, ganándose más ladridos.

Entonces, trató de calmar al pequeño perro que trataba de morderla, haciendo caso omiso a las miradas de las personas que pasaban por su lado, sin embargo, cuando intentó cargarlo, le mordió el dedo.

---¡Oye! ¿Acaso es mi culpa que te hayan hecho eso?---expresó fingiendo estar molesta---. ¡Puedes tener rabia!

Tomó por el pellejo a su amigo canino y lo zarandeó levemente, caminando directamente a su casa.

---Iremos a mi casa, pero eso no quiere decir que harás de las tuyas. Si haces eso te dejaré afuera---. Agradece que mi mamá no esté por hoy.

Bakugō analizó todo meticulosamente, indagando en los pros y contras, pues podía estar en el mismo espacio de _________, conviviendo muy de cerca con ella.

Quizá podía utilizarlo a su favor.

Kirishima Eijirō

Observó confundida al hermoso perro de pelaje color rojo y a simple vista sedoso que se encontraba sentado en el piso mirándolo atenta, con ojos brillosos y su cola moviéndose constantemente.

---¿Cómo puedes estar así de feliz?---preguntó acomodándose en la silla---. Ya aún estaría en pánico.

Sonrió cuando ganó como respuesta un fuerte y animado ladrido que resonó entre las paredes de la cocina, pues aún estaba pensando en qué hacer con su amigo que lastimosamente pasó por ese accidente. Suspiró llegando a una simple conclusión:

---Creo que tendrás que quedarte conmigo...

_________ no supo cómo actuar o qué responder cuando la cola su amigo se movió con entusiasmo y si no fuese porque se vería raro, también estuviese sonriendo. El perro sostuvo su peso en sus patas traseras y se levantó lo suficiente alto como apoyarse en las piernas de la chica y sentir las manos de ________ acariciar su cabeza y rascarle detrás de las orejas. Definitivamente estaba más que feliz. Por otro lado, _________ nuevamente sonrió, esta vez enternecida porque la misma personalidad demostrativa y alegre de su amigo seguía manteniéndose aún ese tipo de situaciones.

Tal vez por eso le gustaba tanto.

Shinsō Hitoshi

---Esto amerita una foto...

___________ alcanzó su teléfono que no se encontraba muy lejos de ella y tomó una foto al felino que ahora se encontraba en sus piernas durmiendo plácidamente luego de que un villano con su característico quirk le diera a Shinsō, su amigo más cercano y lo dejara (según sus especulaciones) bastante cansado. Aquella foto la guardaría y apreciaría durante mucho tiempo.

Jugueteó sin preocupación alguna con sus orejas puntiagudas y acarició su cabeza y cuello con dedicación, sonriendo tiernamente cuando escuchó leves ronroneos que, si no fuesen por el silencio de su casa no llegaría a escuchar. Grabó el momento en su mente, sabiendo que algo como eso no se presentaría jamás.

‹‹Tan lindo...››

Pero lo que ella no sabía es que Shinsō fingía estar fuera de la realidad, disfrutando también de esa ventaja de esa desgracia que le llegó a pasar.

Todoroki Shōto

---Esto es demasiado...---soltó.

Se arrojó al sofá de la sala, permitiéndose relajarse al menos unos instantes, hasta que sintió que la miraban pesadamente. Buscó el origen, encontrándose con su amigo Todoroki ahora convertido en un felino poseyendo aún sus lindos ojos.

Lo imaginó diciéndole cosas como: "Todo esto es mi culpa", "Lamento ser una molestia", "Prometo recompensártelo"

Sonrió bobamente.

Aún así, no se sorprendió cuando le llamó y pasó un buen rato acariciándolo y escuchando los ronroneos que emitía, inmersa en cómo resolver la situación, cayendo dormida en el proceso, no sin antes sentir un peso en su abdomen.

Kaminari Denki

---¡No me lamas!---expresó molesta alejando el perro---. ¡Te dije que te bajes del mueble!

El perro de pelaje amarillento y de hermosos ojos parecidos al color dorado hizo caso omiso a las palabras de _________ y sólo continuó en su tarea de fastidiarla sólo para recibir afecto, sonriendo para a sus adentros de poner tener a la chica tan cerca.

---Debí dejarte en la calle...---masculló, bromeando realmente.

Pero la verdad era que en el fondo se sentía extraña, quizá porque la sensación de culpa del no estar al tanto de su amigo para evitar aquel inconveniente le estaba carcomiendo por dentro, siendo ajena a lo que su amigo pensaba sobre la situación. Su mano acarició la cabeza del animal, asombrándose ante la suavidad de este, repitiéndose en su mente que como recompensa por su descuido, lo cuidaría.

Aunque en realidad había otra razón detrás de cuidarlo.

Fin.

El escenario con Shinsō no lo pidieron pero ajá, hace tiempo que no escribía sobre él y quería darles un regalo a las personitas que aman a este chico. (?

Admito que me gustó bastante escribir este escenario. Discúlpenme si quedaron algo cliché y cortos pero realmente no encontraba otros temas con los cual desarrollarlos.

Disculpen cualquier error ortográfico y/o algo fuera de contexto.

¡Nos leemos pronto! ❤️