Baby Boy ✓ MinChan

IX

Chan

Agradezco mentalmente a todos los dioses porque Jeongin me dejó sentarme en su mesa.

La verdad es que después de la actitud de Minho ayer decidí que era mejor dejar de intentar, pues aunque para mí era divertido, yo solo estaba siendo una molestia y un martirio para aquél chico y no había manera en que terminara siendo mi amigo.

—No es que te esté corriendo pero, tus amigos están allá. —Hace un movimiento con su cabeza en dirección a la mesa de Felix—. ¿Por qué no te sientas con ellos?

—Yo, ah... La verdad es que no le caigo bien al chico pelinegro más alto.

—¿A Changbin? —pregunta no muy seguro.

—No, no. —Me río—. Él es el enano, hablo de Minho.

—Ah, ya. Entonces es el chico que tiene pinta de estar estreñido.

Ahora me río con más ganas.

—Sí, sí. Ese mismo. Hablando de apariencias, luces como un zorro, ¿te lo habían dicho?

—¿Verdad? ¡Yo también se lo dije la primera vez que lo vi! —Me sobresalto cuando un chico de cabello azul intenso toma asiento junto a Jeongin—. Y él me dijo que yo parecía ardilla, ¿puedes creerlo? ¿Dónde quedó el respeto a tus mayores, niño?

El chico nuevo empuja ligeramente a Jeongin y este sonríe dejando ver los metales en sus dientes.

—Justo donde quedará el tinte de tu cabello: en el caño. —Jeongin se ríe como loco y no puedo evitar reír también. Su diversión es tan contagiosa.

El peliazúl está intentando no reír, pero falla.

—Vaya, estos niños de ahora —dice aún riendo—. Soy Jisung, por cierto. —Ahora me mira a mi.

—Yo soy Chan.

—Sí, lo sé. Lo supuse. Jeongin me ha hablado del fantástico chico australiano que le salvó de seguir tomando el desayuno en el baño.

—Ahora estás exagerando —dice un apenado Jeongin, pero dirige su mirada a mí—. Aunque sí fue muy amable por tu parte, Chan, gracias.

—Hombre, no agradezcas nada. Digamos que hoy me devolviste el favor. —Miro a ambos chicos—. ¿Se conocen hace mucho?

Ambos se miran y comienzan a reírse.

—Si mucho para ti es ayer, entonces sí —contesta el peliazúl.

—Wow, parecen cercanos —digo, y no exagero. Estos en dos días han logrado hacer una amistad que yo en toda mi vida no he logrado tener.

—Sí, bueno... rarezas de la vida —Jisung comienza a comer de su hamburguesa mientras da sorbos a su Coca Cola. Jeongin lo imita.

—¿No es demasiado temprano para tomar Coca Cola?

—Oye amigo, yo no te estoy juzgando por alimentarte de pasto —dice Jisung.

—Es ensalada. —Lo miro ofendido.

Pero Jeongin empieza a reír y a nosotros dos no nos queda más que reír también.

**

Ya ha acabado el receso y me dirijo a mis siguientes clases. Durante estas y hasta que salgo, hago lo mismo, dejar en paz a Minho y sentarme con Lara que a pesar de parecer pesada, tiene un sentido del humor un tanto bueno.

Si bien es cierto que se cree lo mejor del universo, en cierta parte da la sensación de que lo hace porque quiere encajar y que alguien le preste atención. Debería dejar de hacerlo, porque más allá de eso, es muy graciosa e inteligente por lo que veo.

Las clases del día terminan y tuve éxito en mi misión de dejar de ser una piedrita en el zapato de otras (Minho) personas.

Lo que resta de la semana hago lo mismo y la siguiente semana también. Me siento con Lara, desayuno con Jisung y Jeongin, y cuando Minho no está con Changbin y Felix me acerco a platicar con ellos.

Yo sé que en Corea tienen sus propias palabras y maneras de llamar a los mayores, pero yo no voy incluirlo porque la verdad no lo entiendo del todo. xd Espero que eso no sea un problema para ustedes a la hora de leer.