XVII

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Minho

El viernes después de la cafetería, Chan y yo pudimos hablar de manera más amena y despreocupada. Las clases se fueron volando e incluso salimos juntos de la universidad.
Cuando se despidió y se encaminó hacia su rumbo, me fue imposible no mirar su culo y morder mi labio. Lo cual me confundió aún más.

El fin de semana no supe de él y me dediqué a hacer tarea y a no hacer nada en especial.

Sin embargo, me puse a pensar seriamente sobre Chan, y llegué a una conclusión: él me gusta. De eso no tengo duda, en parte me asusta.

**

El lunes en las primeras horas Chan vuelve a tomar asiento junto a Lara, pero esta vez no me sorprende. Es decir, era obvio. Eso es lo que me hace volver a la realidad y darme cuenta que no importa si me gusta o si algo en él me atrajo desde el inicio, él tiene novia.

Yo no entro en la ecuación y ellos parecen felices y muy unidos.

Después cuando ya nos encontramos en la cafetería, Chan y sus amigos vuelven a sentarse con nosotros, solo que esta vez se nos unen Lara y Hyunjin, que acabo de enterarme es su hermano.

Me mantengo callado porque ciertamente no conozco a Hyunjin, aunque para ser parte de los chicos populares es bastante agradable, además de que me incomoda estar cerca de Lara.
No es por ella, ahora que la escucho hablar de manera casual me doy cuenta de por qué Chan se fijó en ella. Sin embargo, no puedo evitar sentir envidia y celos cuando Chan pone un brazo sobre su hombros.

Me quedo callado porque sé que soy demasiado bocón y no quiero decir alguna estúpidez que ella no se merece escuchar. Después de todo ella no tiene la culpa de que a mí me guste su novio.

**

Una hora después del receso nos encontramos en clase de deportes. Es el único momento en el que Lara y Chan se separan al parecer. Ella se va a entrenar con las porristas, incluso si nunca la toman en cuenta para los juegos. Y Chan está entrenando con el equipo de voleibol. Yo estoy sentado en un extremo de la cancha, se supone que debería estar haciendo abdominales, pero el maestro nunca pone atención a los de esta sección así que puedes sentarte y no hacer nada.

Miro a Chan porque al parecer se ha vuelto mi pasatiempo favorito. Él es realmente bueno, es rápido, ágil y fuerte; no me sorprende que el maestro lo haya incluido tan rápido al equipo.

Lleva unos pans que hace que su trasero se marque, este es redondo y firme, y eso hace que mi boca se seque. La camiseta sin mangas que lleva deja ver a la perfección sus fuertes brazos y eso sumado al sudor que baña su pálida piel lo hace ver como la cosa más jodidamente sexy que haya visto nunca. Pero también me hace recordar a los pequeños fragmentos de aquella noche que aún no pueden salir de mi cabeza.

Abrumado por ello llevo mis manos a mi cabeza. Maldición, debería olvidarlo ya. No consigo nada con ello, eso fue una estupidez y nada más que eso.

—¿Minho, estás bien? —pregunta Chan quien ahora está arrodillado frente a mí y aparta mis manos suavemente.

—Yo... —Su toque en mi piel se siente como fuego por lo que me aparto—. Sí, estoy bien.

—Muy bien. —Se sienta a mi lado.

—¿No tienes entrenamiento? —pregunto intentando no sonar como que lo estoy corriendo.

—No, en realidad al maestro no le importa. Además de que soy muy bueno, puedo entrenar otro día.

—¿Eres un engreído, no? —digo y sonrío porque en verdad lo es, y tiene cualidades de sobra para serlo.

—No —dice, pero después se lo piensa—. Un poquito tal vez.

Resoplo y sonrío. Después nos quedamos callados, pero es un silencio bastante cómodo. El aire pega justo en nuestros rostros y no puedo evitar mirar a Chan, él es jodidamente lindo.
Todo es asombroso hasta que me percato hacia dónde mira. Está mirando a Lara quién intenta hacer un giro en el aire. Eso hace que una ráfaga caliente se extienda por mi cuerpo y pronto puedo identificar el origen: celos.

—Ustedes dos lucen bien juntos —digo y entrecierro los ojos por la luz. Juego los cordones de mis tenis para no tener que mirar a Chan.

—¿Qué? —Me mira confundido.

—Tú y Lara hacen bonita pareja —digo con obviedad, pero él sigue teniendo la misma mirada en la cara.

—No, Minho. Lara y yo solo somos amigos.

—¿No están juntos, en un relación de pareja? —pregunto y él se ríe, pero niega con la cabeza. Vaya, supongo que fue estúpido de mi parte suponer eso.

—Yo no bromeaba cuando dije que no era mi tipo —dice y vuelve a mirarla.

—Pero Lara lo tiene todo, es linda, divertida, inteligente también, creo. —Tal vez a Chan le gustan las chicas malas—. ¿Si ella no es tu tipo, quién sí lo es?

Chan sonríe dejando ver sus hoyuelos como si acabara de pensar en algo chistoso, pero después me mira de manera seria.

—Tú —dice y me mira de manera casi penetrante. Mis ojos se abren en demasía y siento mi cara explotar. ¿Qué acaba de decir? Después aparta la mirada como avergonzado—. Es decir, alguien como tú. Para que me entiendas, alguien de tu especie. —Lo miro sin comprender, sabía que era demasiado bueno para ser real—. Un chico.

—¿Un chico? —¿Acaso se está declarando gay frente a mí?

—Sí. Me gustan los chicos, Minho. —En su rostro no hay vergüenza o miedo, se ve tan normal como cuando habla de otros temas—. Como Peter, por ejemplo —dice y hace un gesto con la cabeza hacia un lugar de la cancha.

Miro al chico en cuestión, es alguien que también llegó del extranjero. Es alto, de cabello castaño y risado, piel blanca y un fornido cuerpo.

Y entonces todas las esperanzas que me había dado la reciente noticia se pierden porque yo estoy lejos de parecerme a ese chico.






Bueno por lo menos Minho ya se enteró de que Chan y Lara no están juntos. xd

Baby Boy ✓ MinChan Where stories live. Discover now