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Dividido.

Había pasado más de un año de su partida, el peor en la vida de Gabriel.

Noches en vela buscando algún rastro que le diera con su ubicación, pero nada, parecía que se la había tragado la tierra.

Su casa nueva lucía acogedora, muebles en tonos blancos, pinturas hechas por Gala y el, fotografías de su boda, pasaba largos minutos mirándolas sin creer que realmente ese había sido su final feliz, no lo sentía así. Gala sonreía pues había realizado su mayor sueño y Gabriel también sonreía aunque en el fondo como una herida abierta, Sole aún vibraba por todo su ser.

En muchas de sus noches despertaba preso de esos sueños que lo regresaban a un pasado apasionante, el cuerpo de Sole, sus besos, sus caricias, su voz. Todo era tan real que dolía.

- Que haces aquí tan solo?- Gala lo abrazó desde atrás apoyando su barbilla en su ancha espalda.

- Veía nuestras fotos...- Gala suspiró enamorada.

- Pasó tan rápido el último mes, aún no creo que estemos casados...-

- Para mi también ha sido rápido.- admitió el.

- Por cierto Gabe... podemos ir a cenar a casa de papá y Sonia quiero hablar con la familia de algo bastante importante para todos.- Gabriel giró con curiosidad.

- Que es eso tan importante?- Gala se alejó riendo.

- No te diré.- Gabe negó divertido y la siguió por el pasillo.


Desde que Sole había desaparecido, su relación con Gala se reanudó y aunque fue difícil la familia de ella lo acepto nuevamente, el nombre de Sole había sido eliminado para el padre de ambas mujeres, ya nunca se pronunciaba, era como si ella también hubiera muerto al igual que Diletta y aquella historia de amor clandestino nunca hubiera pasado.

Pero para el ella siempre estaba presente, la veía en todos lados, la escuchaba, podía sentirla, tal vez solo estaba enloqueciendo, necesitaba saber de ella, verla una vez más.

La noche llegó rápido, el poco tráfico ayudó a que llegara rápido a la casa de los Greco, era como si el destino estuviera de acuerdo en esa cena, como si de unas piezas de ajedrez se tratará, el juego estaba por empezar.

- Gala, Gabe... que gusto verlos, pasen chicos ya todos están en la mesa...-

- Trajimos algo de vino Sonia, el favorito de mi papá.-

- Eso pondrá felíz a tu padre, es una gran noche, Marissa regreso hoy de sus vacaciones...- Para Gabe eso no pasó desapercibido, Marissa se había encargado de hacerles saber de una manera poco sutil que iría a Italia.

- Oh...- fue lo único que pido decir Gala sin dejar de ver a Gabe.

- Mamá ven rápido quiero que te pruebes el vestido que te envío Soledad...- Marissa cerro la boca tan rápido como pudo, pero fue imposible que el par no la escuchara, ambos quedaron mudos de la impresión.

- Sole? Encontraste a Sole?- Gabriel se soltó tan rápido de Gala y tomó por los hombros a Marissa.

- Eso no es de tu incumbencia.-

- Marissa basta.-

- No me voy a callar está vez mamá, siempre pretendiendo que ella no existe, que eso no pasó... ya basta, no es justo...-

- Marissa entiende que ella tomó una decisión, decidió dejarnos en el olvido.-

- Ay por favor! Basta de hipocresías Gala... conmigo no va a funcionar tu papel de víctima... de esposa abnegada, podrás engañar a papá o incluso a Gabe pero no a mí.-

- Que sucede?- Valentín miraba a todos con gesto severo.

- Que tenemos prisa por cenar papá...- todos callaron siguiendo la mentira de Gala, menos Marissa que sonrió decepcionada de la que había sido su ejemplo a seguir.

- Si de algo sirve Gala... ella es mucho más felíz ahora... - Marissa sostuvo a Gala unos segundos antes de entrar al comedor.

La cena transcurrió incómoda, Gabe no dejaba de ver a Marissa tratando de descubrir el paradero de Sole, ella lo ignoraba vilmente, Gala no dejaba de pensar en lo que su hermanastra le había dicho, Valentín notó el ambiente y decidió intervenir.

- Alguien me dirá que está pasando?-

- No es nada Valentín, Gala está molesta porque no le traje nada de Italia, es que talla mustia no había...-

- Basta de tus insultos hacia mi hija Marissa, ya los toleré mucho tiempo.-

- Tú hija? Y yo que soy Valentín...?- Marissa sonrió con amargura.- No me sorprende, si diste por muerta a tu verdadera hija, que me espera a mí...-

- Es suficiente Marissa.- concedió su mamá.

- Estoy cansada de vivir así, cuando van a recapacitar, cuando vas a buscar a tu hija Valentín!-

- Ella ya no es mi hija.-

- Eres increíble... Gala ya logró lo que quiso, ya está casada con él...-

- No me trates como si yo fuera la culpable aquí Marissa, no lo merezco...-

- Habló de nuevo Santa Gala.- dijo Marissa rodando los ojos.

- Que hice para que me trates así?-

- Arruinar la vida de tu hermana menor te parece poco?-

- Yo la arruiné? Estás segura Marissa? creo que deberías abrir los ojos y dejar de lado todo ese veneno que seguro te dejo mi hermanita en tu visita a Italia, a dónde te recuerdo salió huyendo porque sabía lo mal que había actuado...-

- Gala detente.- ella miró molesta a Gabriel.

- La vas a defender?-

- Alguien no a olvidado a Soledad...- Dijo Marissa riéndose.

- Ya basta! Ese nombre no se volverá a repetir, solo causa dolor y conflicto cada que la mencionas Marissa...-

- Ay papá...  corrección, Valentín. Espero no te arrepientas, de verdad espero que nunca te arrepientas de haber alejado a tu hija, por los caprichos de tu... - Marissa trató de no decir una grosería que empeorara todo.- princesa.-

- Marissa está no es la manera de arreglar nada , si sabes dónde está Sole debes decirlo para poder reparar el error.- Marissa miró con incredulidad a Gabe.

- Y que la vuelvas a lastimar? Ni hablar. Además Gabe...- Marissa sonrió con malicia- Sole ya tiene novio, un hombre que de verdad la ama y que daría lo que fuera por ella... Buenas noches familia, me retiro de repente perdí el apetito.-

Marissa se fue satisfecha por haber arruinado su noche, aunque sabía que si Sole se enterara de que además de prácticamente haber revelado su paradero había hablado de Marcelo la mataría.

El ambiente se tensó más aún, Gala se sentía dolida con Marissa pues en su mente ella solo había hecho lo que debía para volver con el hombre que amaba, Gabe no dejaba de pensar en ese hombre que ahora poseía el amor de su sol, la noche estaba arruinada, pero Gala aún tenía un az bajo la manga.

- Gala cuál era la noticia que querías darnos?- preguntó Valentín tratando de volver a esa falsa realidad en la que eran una familia perfecta.

- Ay papá! Es la mejor noticia del mundo... Papá, Gabe... estoy embarazada!-

Gabriel sintió de nuevo como el mundo se le caía a pedazos, Gala sonreía llena de vida, llena de ilusión, Valentín rápidamente se levantó y abrazo a su hija, a su orgullo, Sonia fue la única consiente de su reacción, lejos de sentir felicidad, el estaba ausente, lejos de ahí, en su mente el rostro lleno de decepción de Sole apareció y sintió que le había fallado una vez más, estaba dividido su corazón seguía perteneciendo a dos personas.

Amor bajo llave.Where stories live. Discover now