Amor bajo llave.

36.

Cruda realidad.

Sole dormía en un sillón que estaba a lado de la cama de Marcelo, le habían suministrado un sedante ya que hacerla irse a descansar a su casa fue una misión imposible.

Marcelo dormía ajeno al resto del mundo, ajeno al hecho de que sería padre en aproximadamente 8 meses, ajeno a que su partida iba a destrozar a la jovencita que dormía producto del medicamento.

- Como ve a mi cuñado?- Gala estaba más respuesta después de la noche más terrorífica de su vida, no podía evitar el miedo de ver a Marcelo en esa situación, el había salvado su vida y la de su hija.

- Aún espero ciertos estudios, pero mis pronósticos no son favorables, el golpe que Marcelo recibió fue muy fuerte y su cerebro ha presentado inflamaciones en zonas estratégicas, necesito esos estudios pero puedo afirmar que el panorama es muy oscuro.-

Gala asintió pestañaeando para evitar derramar las lágrimas que luchaban por salir, no era posible que un héroe como el tuviera que pasar por eso, su hermana no merecía eso, su bebé debía ser lo único en lo que tendrían que concentrarse.

Marissa llegó con Ángela en sus brazos, seguida de su mamá y Gabriel.
Su ex pareja no se había apartado del hospital, preocupado por todos ellos, su interior estaba confundido, recordaba las palabras que le había dedicado a Marcelo y ahora el verlo postrado en esa cama después de salvarle la vida a su hija, lo hacían sentir como un pedazo de nada a lado de la grandeza que Marcelo había mostrado.

Sole abrió los ojos con pereza, le costó unos segundos acostumbrarse a la luz del lugar, cuando recordó la situación se incorporó rápidamente.

- Ya ha venido el médico...?-

Gala asintió y prefirió retardar más esa terrible predicción.

- Ha dicho que se necesitan más estudios y vendrá más tarde a hablar contigo...-

- Bueno tal vez eso sea buena señal y todo esté bien...- Sole apretó la mano de Marcelo para brindarle consuelo, aunque ella era la que más lo necesitaba.

- Querida deberías ir a comer algo, tienes que cuidarte por ese bebé que esperas...-

Sole miró con una sonrisa a Sonia, en medio de esa tragedia su bebé había sido una buena noticia.

- Aún no puedo creer que sea verdad...- Marissa sonreía con algo de tristeza, ella quería a  Marcelo cómo a un hermano, así lo veía desde que lo había conocido.

- Los médicos lo confirmaron, tengo cuatro semanas de embarazo...- Sole sonrió radiante y Gabriel no supo como reaccionar, seguía en shock por esa noticia.

Horas más pasaron lentas y tortuosas en ese hospital, su familia seguía ahí todos hablaban esperanzados queriendo brindarle buena vibra al inconsciente  Marcelo, Sole acariciaba su cabello de vez en cuando queriendo despertarlo pero sabía que faltaba mucho más para eso.

Una empleada del hotel había llegado con ropa y algunos documentos que le habían pedido para internar a su prometido, Sole dió órdenes de limpiar todo el desastre causado por el incendio aunque debía esperar el trabajo de los bomberos tenían que dictaminar que fue un accidente no algo provocado.

Sole sabía que ella tenía que ir y hacerse cargo, pero Oli la estaba reemplazando perfectamente y ella no quería apartarse de él.

- Lamento haberlos hecho esperar...- el doctor que Sole y Marcelo conocían a la perfección entró seguido de otra doctora.

- Y bien doctor, cuál es su diagnóstico?- Sole agradeció que Gala preguntará ya que ella había enmudecido de repente.

- El cerebro de Marcelo presenta daños considerables, no podemos intervenirlo hasta que esta inflamación ceda de hacerlo podríamos dañarlo y terminaría con secuelas...-