don't be a fool ; kang yeosang (ateez)

04

—Pero miren a quién tenemos aquí... —una sonrisa burlona se dibuja en su rostro y yo trago saliva mientras evito el contacto visual. Le veo cruzarse de brazos y apoyarse del marco de la puerta—. Pero si hasta te pusiste guapa —ruedo los ojos.

—¿No piensas salir? —suelto en un bufido y él ríe mientras se echa a un lado para cederme el paso.

—Todo tuyo —apenas veo que se aleja cierro la puerta, suspiro mientras me apoyo contra ésta.

En realidad no necesitaba venir al baño, solo quería huir de todas las miradas curiosas.

Me miro en el espejo y suspiro, me digo que no tengo porqué dejarme intimidar y que debería ser un poco más social, verifico que me veo bien y reconozco que aunque no sea tan hermosa como las chicas que se encuentran afuera no tengo porqué sentirme mal, después de todo yo también soy bonita. También intento darme seguridad, repito que nada malo va a pasar, y que, aunque no me gusta estar rodeada de gente desconocida, debo intentar socializar un poco estando segura que si algo malo pasa al menos tengo a Yunho cerca. Suspiro y le sonrío a mi reflejo para entonces salir.

Cuando llego a la sala veo que ya han comenzado a comer pizza. Yunho me hace señas para que me acerque y así hago.

—Bueno, ya que estamos todos hablaré —la voz de Wooyoung se hace presente y todos lo miramos curiosos a la par que dejan de parlotear para darle atención—. Como algunos saben mi hermana obtuvo una beca en China —algunos asienten mientras otros, como yo, esperamos a que continúe el discurso—. El motivo de ésta reunión es celebrar todos los esfuerzos que ella ha hecho para conseguir ésto y también para celebrar su despedida —él sonríe pero se le nota algo triste—. Sooyoung, sé que ésto es lo que siempre quisiste y aunque de verdad no quiero que te vayas no puedo ser egoísta y pedirte eso, has hecho mucho por mí, es mi turno hacer ésto por ti, aunque eso signifique dejar ir a mi hermana favorita —todo lo dice con tantos sentimientos encontrados que hasta a mí me dieron ganas de llorar.

—¿Pero qué dices? Soy la única hermana que tienes —la que creo que es Sooyoung habla y todos reímos ante el comentario.

—Shh... Déjame terminar —ella ríe y niega con la cabeza—. También sé que no querías que nadie lo supiera, por eso he llamado a nuestros amigos más cercanos para despedirte, espero que no te moleste que haya invitado algunos amigos míos, quería compartir éste momento importante con ellos —y con eso último morí de ternura.

Aaaawwww ¿cómo puede ser tan lindo?.

Él trata de ocultar las lágrimas que comienzan a amontonarse en sus ojos—. Wooyoung... —ella rompe en lágrimas al ver que él está a punto de llorar tambien y yo —siendo la llorona que soy— no evito soltar un pequeño sollozo, llamando la atención de los presentes, incluídos los hermanos.

—Lo siento, lo siento, soy algo sentimental, continúen —digo sorbiendo mi nariz y me sorprendo al sentir un brazo envolver mi cintura. Sigo con la mirada el brazo y miro sorprendida a San, él me sonríe marcando sus hoyuelos.

Luego de la sentimental charla, un chico —que si mal no recuerdo se llama Mingi— comienza a contar chistes e historias graciosas para animar a los hermanos —y a mí, claro está—, Wooyoung terminó presentándonos a todos y su hermana, Sooyoung, rápidamente me incluyó en la conversación que mantenía con las chicas. Al principio estuve un poco tímida, ellas hablaban entre sí lo típico, maquillaje, ropa de moda, sus cantantes favoritos y chicos.

—Dime Hyesun, ¿cómo van las cosas con Wooyoung? —Jiah y Sooyoung miran atentamente a la nombrada, esperando por una respuesta de su parte y sonríen al verla sonrojarse, yo miro mi teléfono, fingiendo no prestar atención a la conversación cuando en realidad escucho hasta el mínimo detalle.

—Tuvimos una cita el sábado pasado, fue muy lindo. Fuimos a comer helado, luego al cine, y cuando se hacía de noche decidimos regresar a pie, me tomó de la mano y luego me abrazó para apreciar el atardecer —a medida que relata la historia me lo imagino y no evito sentirme un poco triste, también algo celosa, ella lo cuenta con tanta ilusión y emoción que contagia a las chicas que no dejan de suspirar.

—Soon, tu hermano es todo un romántico empedernido —comenta Jiah y Sooyoung sonríe asintiendo.

—Él siempre ha sido muy dulce con las chicas, en especial las que le gusta —mira a Hyesun y ésta se sonroja.

—B-bueno, como decía... —ella hace una seña para acercarnos y así lo hacen, yo me mantengo al margen pero aun así lo escuchar—. Antes de dejarme en mi casa... —hace una pausa dramática—...me besó —las chicas intentan ahogar un grito y ella se tapa la cara cuando Wooyoung voltea a vernos.

—¿Sucede algo? —escucho la voz de Yeosang a mis espaldas y me tenso, está muy cerca de mí, pues incluso siento su calor corporal y, de alguna manera, me incomoda.

—Nada nada, son sólo cosas de chicas, ya sabes —Jiah explica y él hace un sonido en modo de afirmación.

—Ohh, hablan de chicos, me les uno —volteo a verlo con el ceño fruncido y él me guiña un ojo a la par que sonríe fingiendo inocencia—. ¿Han notado que Seonghwa está más guapo? —su sonrisa ahora se ha vuelto maliciosa, Jiah se ríe, todos la miramos, yo algo confundida con su reacción hasta que de la nada su semblante se vuelve sombrío y la mirada que le da a Yeosang no luce nada amigable.

—Vete —su cara da tanto miedo que hasta yo he tragado saliva.

—Pero si no he dicho lo mejor... —la ignora para dirigirse a nosotras, le da la espalda y susurra lo suficientemente alto para que ella lo escuche—...desde que Jiah y él terminaron está más bueno, ¿le han visto las piernas? —continúa ignorando la mirada asesina de Jiah.

—Yeosang... —advierte y cuando  creo que está apunto de saltarle encima Seonghwa la toma del brazo.

—Sabes que sólo está molestando, no le hagas caso —niega con la cabeza y ella se relaja un poco, bufa para luegoirse en dirección a la cocina con Seonghwa tras ella.

—Parece que te gusta mucho molestar a los demás —le digo y él sonríe claramente divertido.

—¿Qué te puedo decir?, es mi pasatiempo favorito, es como una especie de don —se regodea inflando el pecho, como si realmente estuviese orgulloso de ello y yo ruedo los ojos para darme la vuelta e ir hacia donde está Yunho pero, antes de siquiera dar un paso, él me toma de la cintura y me susurra al oído;— sobretodo me gusta molestarte a tí.

 

(...)

 

Editado.