Día 20

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—...otra vez —Harry estaba inclinado hacia adelante. Draco también. Unos centímetros los separaban cuando gesticuló para darse a entender—. ¿Qué tienen que ver Blaise Zabini y Fleur Delacour con que hayas nadado desnudo en el Lago Negro, de noche?

Draco chasqueó la lengua, fingiendo que no estaba más que entretenido con la estupefacción de Harry.

—A Blaise le gustaba alguien y no se atrevía a hablarle. Entonces hicimos una apuesta; él le escribiría una nota, si yo le escribía a alguien de su elección y esta persona me contestaba...

—Y eligió a Fleur —Draco asintió—. ¿Por qué a Fleur?

—Porque bailamos en el Baile de Yule el año pasado.

Harry parpadeó.

—¿Qué? —Luego frunció el ceño— ¿cuándo pasó eso? Tú fuiste con Parkinson. Estoy muy seguro de que fuiste con Parkinson.

—Después de bailar con Pansy —Hizo un gesto vago, para restarle importancia—. Ella estaba cansada, yo fui por una bebida. Sonó una canción que me gustaba y Fleur estaba cerca, sola. Le pregunté en francés si bailaba conmigo esa pieza, ella se alegró de que hablase su idioma, empezamos a hablar de mi familia, su familia...bailamos unas cinco canciones. Ya era tarde. No creo que estuvieses por ahí todavía.

Soltó un bufido de risa, incrédulo.

—Así que bailaste un poco con Fleur Delacour...—Meneó la cabeza—. ¿Puedo decírselo a Ron? Me reiré de su expresión un rato. Él intentó invitarla.

Draco frunció la nariz.

—Adelante, no es que sea un secreto en realidad.

—Así que le escribiste a Fleur y no te contestó, porque no te recordaba, y...—Calló cuando lo vio negar, con una sonrisa divertida.

—Fleur me contestó e intercambiamos un par de cartas más después de eso, porque el tema que le pregunté también le interesaba a ella. Pero Blaise no pudo enviar la nota, los nervios no lo dejaron.

Harry se pasó una mano por el cabello, a la vez que arrugaba el entrecejo.

—¿Y el castigo de no hacerlo, era nadar desnudo en el Lago Negro, de noche? —Otro asentimiento—. Pero eso no explica qué hacías tú ahí también...

—Los Sly somos mucho más leales de lo que parece. Blaise estaba muy avergonzado, yo me reía, Pansy también. Me puse un amuleto de calor y me dije "¿por qué no?" —Se encogió de hombros—. De hecho, fue divertido.

—Nadaste con Zabini porque querías —Soltó, aún más incrédulo—. Desnudo. De noche.

Él volvió a encogerse de hombros.

—Es mi mejor amigo, estaba sufriendo. Yo no tenía nada mejor que hacer, de todos modos.

—Ron es mi mejor amigo —Recordó Harry, enderezándose—, pero no somos tan amigos.

Se sintió todavía más aturdido, si es que cabía la posibilidad, cuando Draco echó la cabeza hacia atrás al reírse de la expresión y el tono que utilizaba.

—¿Acaso es algo que atenta contra tu masculinidad? Por Merlín, he visto a Blas desnudo unas, no sé, dos mil veces desde el primer año. Es un poco exhibicionista al pasar del baúl al baño desnudo cuando va a tomar una ducha, y luego se queja de que el piso está helado...—Rodó los ojos—. No es para tanto. Nadamos, no estoy diciendo que nos empezamos a besar y tuvimos una escena de libro, sólo nos salpicamos mientras Pansy seguía riéndose y amenazaba con tomarnos una foto.

Harry se limitó a asimilarlo durante los siguientes segundos. Luego suspiró.

—Supongo que ya dijo sus tres cosas, ¿no? —Miri asintió cuando la observó. Él se cruzó de brazos e intentó pensar en lo que fuese, bajo la atenta mirada de Malfoy—. No puedo imaginarme nada que decir —Admitió, seguido de una risa ahogada, y sacudió la cabeza—. ¡Es que no me puedo creer que tú...! Merlín. Eres ese tipo de persona que hace locuras por alguien más, hacerte chica por Pansy, nadar por Zabini- ¡nadar desnudo en un lago lleno de criaturas mágicas!

—Voy a comenzar a pensar que en serio te estás haciendo una imagen mental de lo que te digo, Potter.

—¿Qué? ¡No! ¡ya te dije que no!

La manera en que sonreía, con el rostro recargado en la palma, lo descolocaba. Se estaba divirtiendo a costa de él, pero no de la forma maliciosa en que se burlaba usualmente.

Le resultaba tan extraño que le era difícil pensar en algo más.

—Sólo estoy...sorprendido —Admitió, más bajo. Cuando se volvió a inclinar hacia adelante, Malfoy continuaba en la misma posición. Levantó una ceja.

—Creías que era incapaz de sentir un mínimo de aprecio o lealtad por quien fuese —Harry mostró una expresión de disculpa, sin darse cuenta. Él carraspeó—. Tal vez...no te he dado motivos para pensar lo contrario. No es que en realidad importe, o que sean cosas que tú necesites saber, sólo mis amigos saben que hago algo así, pero...

—Podría haberte entendido mejor todo este tiempo —Completó por él. Draco debió ver el mismo punto, porque cabeceó, a manera de una vaga aceptación que no lo era del todo. Tomó una profunda bocanada de aire y suspiró después—. Yo tampoco- ya sabes. No puse mucho esfuerzo de mi parte por ver...más allá. Merlín —Harry soltó una risa ahogada y negó—, es que ni siquiera pensaba que fueses...un chico. Que pudieses ser como un chico normal. Como- como preocuparte por tus amigos y sus relaciones, que te gustase alguien, estudiar, bromear con otros sin, bueno, sin ser un idiota y cretino.

—He perfeccionado el arte de bromear con otros actuando como un idiota y cretino. Tengo una imagen que cuidar —Cuando Harry no hizo más que observarlo boquiabierto, Draco le guiñó. Segundos más tarde, los dos contenían la risa y él asentía, viéndolo con más curiosidad que nunca bajo ese nuevo enfoque.

Se aclaró la garganta, de nuevo.

—Nunca he hecho...algo así por mis amigos. Por lo general, son ellos los que hacen las locuras por mí —Comentó, riéndose por lo bajo al pensar en todo lo que podía enumerar para demostrárselo, y notando, a la vez, que no le importaba tanto que lo supiese. Ya que pensaba al respecto, decidió también contarle, en tono más serio:—. No me gusta la fama. De verdad no me gusta. Y no creo haber hecho algo especialmente bueno, no creo- que deba ser celebrado, no- yo sólo-

Gesticuló, incapaz de ponerlo en palabras. Cuando apartó la mirada un instante y volvió a fijarse en el Slytherin, creyó notar que este lo observaba diferente. Más tranquilo. Más neutral.

—Eres el único idiota que no apreciaría esa fama, Potty.

—Créeme, tú tampoco la encontrarías divertida después de entrevistas con Skeeter...—Ambos recogieron sus maletines y caminaron en dirección a la salida. Harry ahogó un grito al caer en cuenta de cierto detalle y le dio un manotazo en el brazo, para llamarle la atención—. Espera, ¡tú tuviste entrevistas con Skeeter! ¡le hablaste de mí!

—Ella me preguntó —Juró, alzando las manos, en señal de falsa inocencia. Harry entrecerraba los ojos por detrás de los lentes, él enseñaba una sonrisa ladeada.

—Eres un idiota.

—Tú no eres mucho mejor.

—Sh.

—Sh tú.

El estudiante de tercero de Gryffindor que los vio deambular por el pasillo, hacia el Gran Comedor, dándose empujones sin fuerza y mandándose a callar entre ellos, no estuvo muy seguro de cómo debía reaccionar.

Un día a la vezWhere stories live. Discover now