36. Desafortunadamente.

3.9K 270 20
                                    

Liam.

Me encontraba lanzando a Scott de una de las paredes de la biblioteca contra una de las mesas del lugar y de regreso, sabía que estaba actuando mal, que quizá Summer se enojaría cuando se enterara de todo lo que estaba haciendo, pero no podía detenerme, era demasiado tarde como para detenerme.

Y más me molestaba que el moreno no hacía nada para poder defenderse ni siquiera el más mínimo esfuerzo, y no sabía si no lo hacía por no querer lastimarme o porque en verdad no podía defenderse. Tomé una de las sillas de la biblioteca y la impacte contra la espalda de Scott, seguía golpeándolo, hasta que lo lancé un poco lejos de mí, y cuando intente acercarme él finalmente se defendió dándome una patada en el pecho que me lanzó unos pocos metros lejos.

---No hagas esto, Liam.--- escuché mencionar al chico.

Cuando me levanté del suelo, pude ver con mejor claridad a Scott; tenía varios golpes en la cara, su nariz comenzaba a sangrar, y todo eso lo había ocasionado yo.

---No puedo dejar que me mates.--- volvió a comentar el moreno.

El chico volteó al gran ventanal que se encontraba detrás de él, ahora dándome la espalda a mí, mientras que me acercaba podía ver como de sus dedos salían garras, se estaba convirtiendo, él estaba aceptando el poder que la superluna nos otorgaba. Finalmente sería una pelea más justa.

[...]

Stiles.

Mientras tanto, en otra parte del pueblo.

Había logrado seguir a Parrish, quién iba convertido en el sabueso del infierno, desde que salió de la comisaría, donde fue a ver unos cuerpos que seguramente eran de chicos quimeras, mientras se llevaba la camioneta donde estos iban transportados, llendose a quién sabe donde. Trate de llamar a cualquiera de la manada, pero ninguno contestaba, por lo que llame a la última opción que tenía.

Una camioneta negra llego al lugar donde yo estaba, mientras que de la puerta del piloto bajaba un chico pelinegro rápidamente, pero de igual manera yo me acercaba a él. Si, Theo Raeken era mi última opción.

---Perdón, vine tan rápido como pude.--- comentó Raeken al momento de bajar de su camioneta.

---Tenemos que irnos, ahora.--- lo interrumpí antes de que quisiera ponerse a platicar.--- Parrish tiene los cuerpos.--- le informé.

---De acuerdo, Stiles, espera, Stiles.--- me habló el pelinegro.

---Parrish esta afuera y tiene los cuerpos, tenemos que encontrar a Scott y decirle.--- le comenté mientras abría la puerta del asiento de copiloto.

---¡Stiles!--- habló Theo en voz alta, haciendo detener mi paso, volviendo a entrecerrar la puerta.--- No creo que Scott quiera hablar contigo en este momento.

---Si gracias, soy consciente de eso.--- le comenté con mi usual sarcasmo.--- Pero no me importa, necesita saber de esto.

---Stiles...--- volvió a hablar Raeken.--- Scott no quiere hablar contigo.

Lo miré con el ceño entre fruncido, sabía que por su tono de voz algo más ocurría, y no sabía porque no me lo decía en este momento, hasta que a paso lento me acerqué de nuevo a él.

---Pero creo que tu papá si.--- me confeso el chico mientras me mostraba mi credencial de la biblioteca.

Misma credencial que había tirado después de todo lo sucedido con Donovan hace unas noches. Santa mierda.

---Tu papá te esta buscando, Stiles, y me encontró a mí.--- me confesó el chico.

---¿Dónde esta?--- le pregunte enojado.

Si este bastardo se había atrevido a hacerle algo a mi padre, no sabe en que grave problema se había metido.

---Yo te cubrí.--- me aseguro Theo, mientras movía la credencial a la altura de su cara.--- Esto estaba resuelto, si Melissa no la encontró en el hospital... supongo que hasta el hijo de un policía puede cometer errores.

---¿Lo lastimaste?--- le pregunte seriamente, mientras veía como el chico caminaba a mi alrededor, cosa que comenzaba a fastidiarme.

---Nunca mentí acerca del porque vine a Beacon Hills.--- comentó Raeken cambiando el tema.--- Estoy aquí por una manada; vine aquí por la mujer coyote, cuyo primer instinto es matar. Vine por la banshee, la chica rodeada de muerte. Vine por el kitsune oscuro, incluso por el beta con problemas de ira, ¿y por qué no? De una vez por la que podría ser mi compañera al momento de liderar a mi futura manada.

Este sujeto si que estaba loco. Sabía desde un principio que algo malo había en él, que lástima que hasta este punto me pude dar cuenta de que era exactamente lo que había mal en él.

---Vine por Void Stiles. ¡Esa es al manada que quiero!--- aseguró el pelinegro.--- Desafortunadamente, eso no incluye a Scott.

Todo lo que estaba diciendo el pelinegro, solo lograba hacerme enojar más y más conforme los segundos pasaban, y era algo que el chico había notado.

---Tus latidos están aumentando, Stiles.--- me comentó lo obvio Raeken.--- Y no es porque tengas miedo, el nogitsune se ha ido...pero tú todavía tienes más sangre en las manos que cualquiera de nosotros.

---Estoy a punto de tener más.--- le amenacé, mientras lo miraba a los ojos seriamente.

[...]

Liam.

La pelea seguía, pero ahora Scott estaba tomando ventaja en esto, desde que se convirtió en hombre lobo no dejaba de lanzarme golpes, los cuales no fallaba, y en un momento aprovecho para clavarme sus garras en la espalda, luego en mi abdomen para con un rápido golpe en la espalda lanzarme al suelo. 

Pero con una patada lo aventé unos cuantos pasos de mí, dándome oportunidad de levantarme e irme contra el, mientras lo tomaba del cuello, aunque él no se quedaba atrás, con un movimiento rápido logró aventarme por las escaleras, haciéndome caer en ellas, y aunque intente golpearlo con una silla nuevamente, el chico fue más rápido, dando un salto por encima de esta esquivando el golpe.

[...]

Stiles.

---Te diré donde esta tu padre...---volvió a hablar el pelinegro, haciendo que volviera a la realidad.---...si prometes no ayudar a Scott.

No resistí más, y le lancé un puñetazo directamente en el rostro, haciendo que el chico volteara su cuerpo mientras llevaba su mano a donde lo había golpeado, había tratado de meterse con las dos personas que más me importaban; mi padre y mi mejor amigo. 

---¡Ahí esta!--- gritó el pelinegro entusiasmado.--- Ese es Void Stiles, se sintió bien...¿no es así?

¿Se sintió bien? Ni siquiera pude pensarlo del todo bien cuando mi cerebro había tomado la decisión de golpearlo una vez más, ahora mandando al chico al suelo. 

---No le diremos a Scott.--- volvió a hablar el chico.--- Pero tú no puedes perder a tu mejor amigo, ¿cierto? Aunque ambos sabemos que nunca lo necesitaste.

Me lancé encima del pelinegro, dispuesto a volverlo a golpear las veces que fueran necesarias para que dejara de hablar, pero antes de que pudiera tan siquiera levantar mi puño en su dirección, él volvió a hablar.

---Ahora me odias, pero después me entenderás.--- habló.--- Esta es la parte difícil...porque no puedes ayudar a Scott y salvar a tu padre. Todavía tienes tiempo, Stiles...

Mi mente se debatía en lo que tenía que hacer, por un lado estaba mi padre y por otro lado estaba Scott. Todo esto era una completa mierda y ni siquiera se donde estaba el resto de la manada.


[2] Mía | Liam Dunbar.Where stories live. Discover now