[2] Mía | Liam Dunbar.

40. Directo a la locura.

Liam.

Habíamos regresado nuevamente al sótano del hospital, donde estaba el cuerpo inerte de nuestra amiga Hayden, y seguía sin saber como le daría la noticia a Summer sobre esto. Mason y yo llorábamos un poco por la pérdida de nuestra amiga, pero después Mason se ofreció a llevar a la señora McCall a la escuela, con la excusa de que Scott estaba mal, aunque no le contamos el verdadero porque.

A pesar de que no habíamos empezado con el pie derecho, Hayden en este poco tiempo se había convertido en nuestra amiga, y perderla nos dolía en verdad. Pero el momento de dejarla ir había llegado, más en específico porque pude ver parado en la entrada del pequeño sótano a Parrish, o mejor dicho, al Sabueso del Infierno, quién venía por el cuerpo de la morena.

Quería que aunque fuera Summer pudiera despedirse de la chica, pero en base a todo lo que estaba pasando, sería imposible, o al menos no por ahora. Por lo que solo le di un pequeño beso a Hayden en la mejilla, de modo de despedida, para después ver a Parrish directo a los ojos, indicándole que podía seguir con lo que venía a hacer. 

El mayor se acerco a paso lento a la camilla donde seguía recostada la morena, para después cargarla entre sus brazos, darse la vuelta y caminar hacía la salida del lugar, mientras los miraba a los dos partir.

Toda esta noche había sido una completa mierda.

[...]

Scott.

Me encontraba en mi habitación, mientras mi madre estaba apunto de comenzar a curar mis heridas. Sí, Theo había conseguido lo que quería y me había matado, o al menos eso pensaron los demás, según a lo que me pudo contar mi madre en el camino de regreso a casa, ella me trajo de vuelta a la vida. No era tan fácil matar a un alfa, y menos a uno verdadero.

---Perdí, mamá.--- le comenté en voz baja.

---Todos los líderes sufren alguna pérdida.--- comentó mi madre.--- A veces hasta más de lo que crees poder soportar. 

---Pero esta vez...perdí a todos.--- le recordé a la mayor.

---Los recuperarás. Tienes que.--- me contestó con seguridad.

---¿Por qué regresarían?--- pregunté con desilusión.

Después de las malas decisiones que había tomado en estos últimos días, ni siquiera yo hubiera vuelto. 

---Porque tu eres su líder.--- volvió a contestarme mi madre.--- Y aún cuando un líder piensa que no puede dar más, todavía queda más.

Volteé a mirar a mi mamá con los ojos ya llorosos, y es que en estos momentos me sentía perdido, lo había perdido todo...a todos.

---La esperanza.--- volvió a hablar mi madre, al verme en mi estado.--- Dales esperanza.

[...]

Liam.

Seguía en el sótano del hospital, sentado en el suelo del lugar, pensando en todo lo que había ocurrido en tan pocas horas, en todo lo que había hecho. Todo si que era una mierda. Estaba tan sumido en mis pensamientos, hasta que una llamada en mi celular me distrajo.

Padrastro, decía la pantalla de mi celular, cosa que me preocupo, por lo que contesté de inmediato.

---¿Le ocurrió algo a Summer?--- fue lo primero que pregunté cuando conteste.

---Hmp, no, bueno si, no se como decirlo...¿crees que podrías venir al hospital?--- fue lo único que me comentó el mayor.

---Si, si, de hecho aún sigo cerca del hospital, no me tardare nada en llegar.--- le mentí.--- Pero...¿esta todo bien?--- le pregunte nervioso.