DxD: Camino hacia la dominación

Capítulo 55: Encuentro

Sorano, Ni Jie y Hong'er estaban jugando en un parque de la ciudad de Kuoh. Mientras tanto, Issei las esta vigilando con una sonrisa. A pesar de que cada una de las pequeñas eran fuertes por derecho propio, el no quería descuidarlas. 

Mientras miraba como sus hijas jugaban entre ellas, comenzó a pensar y recordar su largo camino hacía lo que era ahora. Podría ser poco tiempo, pero con todo lo que había hecho, con todas las venturas, luchas y otras cosas; El sentía como si hubiera sido mas tiempo de lo que era en realidad.

Ahora, le encantaba ser padre, incluso con lo joven que podría ser, disfrutaba cada momento con sus queridas hijas. Incluso si dos de ellas no lo eran por sangre.

El tambien se sentía orgulloso, la madres que estaban con sus hijas miraban y comentaban sobre lo hermosas que eran sus pequeñas.

De repente, las niñas se acercaron.

"¿Paso algo?", pregunto Issei con curiosidad.

"Helado .... calor .... ", Sorano sonrió.

"Hahaha ~ .... esta bien, vamos por helado", Issei levantó a Sorano y la sentó sobre sus hombros antes de que tomara las pequeñas manos de Ni Jie y Hong'er para caminar hacía algún lugar donde vendan helados.

. . .

Hong'er estaba comiendo un helado de frutilla mientras caminaba de la mano con Issei y sus hermanas. Ella se detuvo de repente cuando vio algo en una vitrina.

"¿Sucede algo, Hong'er?", pregunto Issei con curiosidad. Ella solo apunto con su pequeño dedo. Issei levantó una ceja, pero cuando vio lo que Hong'er apunto, sonrió.

"¿Lo quieres?", pregunto Issei con una sonrisa.

"Um!", ella asintió con una gran sonrisa. Todos entraron a la tienda de juguetes, las niñas miraron con estrellas en sus ojos.

"Realmente te gustan los pingüinos", Issei tomo un peluche del animal y lo llevo al mostrados, donde una señora estaba atendiendo.

"Parece que eligieron tambien ... ", Issei vio a Ni Jie con un peluche de oso polar y Sorano con un dragón rojo. 

"Eh .... ", Issei sudo un poco al ver a la señora mirando a Issei con sus mejillas rosa y a las niñas con estrellas en los ojos.

"Llevare los tres", dijo Issei, colocando el dinero sobre la mesa.

"Ah! ... Si, claro ... ¡muchas gracias!", la señora parecía avergonzada por quedarse espaciada de tal forma. Ella asintió y tomo el dinero antes de devolver el cambio.

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Una mujer rubia caminaba por la ciudad de Kuoh con una hermosa sonrisa. No importaba si eran hombres o mujeres, incluso con su increíble apariencia, ninguno pudo mirar hacía ella con lujuria. Su aura, sonrisa, presencia, todo en ella era demasiado puro como para ser manchado por ese tipo de pensamiento, las personas podían sentir que sería algo malo que pensaran de esa forma al ver tal mujer.

"¿Mm?", la mujer se detuvo cuando pareció sentir algo. Su cabeza se giro y su mirada se encontró con un hombre que vestía una traje de negocios, su cabello castaño caía sobre su espalda mientras estaba amarrado en una cola de caballo baja; Sus ojos color vino brillaban con cariño, amor y felicidad mientras miraba a tres niñas pequeñas jugar tranquilamente una con la otra.

La mujer no pudo evitar sonreír, era una escena que para ella era hermosa.

Cuando sus ojos se detuvieron una vez mas en la figura del hombre, se detuvo y sus ojos se abrieron un poco mas. Ella ya no estaba mirando la espalda del hombre sentado, si no que sus ojos se encontraron.