DxD: Camino hacia la dominación

Capítulo 57: Dragón de la dominación en el cielo

El Cielo estaba en un caos en estos momentos. Qlippoth había lanzado un ataque hacia el mismo cielo, magos, dragones malvados, ángeles caídos, todo tipo de criaturas que estaban ligados a Khaos Brigade se lanzaron hacía el Cielo en un grana ataque total. Si no fuera por Michael siendo un poco mas precavido de lo normal, no se hubiera podido detectar el ataque.

Michael logro contactar a Azazel y Sirzches antes de que todo ocurra, para que puedan enviar refuerzos si fuese necesario pero, cuando el líder del cielo vio a todos los enemigos, su rostro se volvió un poco oscuro.

"¡Asia, mantenga la sanación tanto como pueda!", Rias exclamo al ver todo el desastre que estaba sucediendo en estos momentos. El Cielo, un lugar de pureza, donde los edificios y caminos se asemejan a un lugar sentado sobre las nubes con un techo blanco brillante en lo alto. La puerta que estaba custodiando el cielo fue destruida. Los edificios trataban de resistir a la magia que usaban los magos y Ángeles mientras luchaban.

Era un caos total, los sonidos de explosiones se escucharon por todos lados mientras las luces de todo tipo de magia aparecían y desaparecían como un espectáculo de luces mortales.

Rias estaba junto a su séquito y el equipo DxD que había sido desplegado por completo.

A lo lejos, Michael estaba parado mirando al final de todo el ejercito enemigo. Un hombre con hombreras doradas y largas túnicas. Su cabello un poco alborotado y largo de un color gris, mientras que sus labios se movían hacía una sonrisa llena de burla y diversión hacía el.

"Rizevim Livan Lucifer", Michel apretó un poco los dientes, el no había sentido enojo desde que estaba en la guerra hace miles de años. 

. . . 

"¡Haa!", Xenovia corto con su espada mientras corría junto a Kiba, cortando y matando a todos los que podían. En la mano derecha de Kiba, sostenía una espada que parecía hecha de un cristal nevado, con cada corte, enviaba olas de hielo que congelaban a sus enemigos.

Booom! booom! boooom!

Bang!

Rias lanzaba olas de su poder de la destrucción mientras Akeno la respaldaba desde el aire, lanzando rayos.

"Ei!", Koneko golpeo a un mago y lo enviaba a volar mientras vomitaba sangre.

"¡Rias Onee-sama!", Asia grito llamando la atención, ella punto a un lugar. Todos se giraron y sus expresiones tenían lineas oscuras. Un enorme dragón de cien cabezas se acercaba a gran velocidad.

"Ladon ..... de todas las cosas", Rias apretó los dientes.

. . .

"¡Griselda, ayuda a los demás!", Gabriel exclamo a su reina que estaba luchando con una espada.

"¡Pero Gabriel-sama!"

"¡Vaya, estaré bien! ¡No soy tan débil!", Gabriel exclamo una vez mas. Griselda frunció el ceño, pero de todos modos asintió. Sus alas se desplegaron desde su espalda y se lanzó volando hacía otro lugar.

Gabriel se quedo mirando a lo que tenía delante.

Dos clones de del dragón malvado, Grendel. Es verdad que al ser clones no eran tan fuertes como el original, pero aun así no dejaban de ser peligrosos.

El cuerpo de Gabriel se rodeo de una luz amarilla mientras volaba hacía los dragones.

"¡Rooooaaaarrr!", ambos dragones rugieron mientras avanzaban a gran velocidad. A diferencia de otros dragones que se paraban en sus cuatro patas, Grendel era similar a Tannin. El se paraba con sus dos patas traseras, como si fueran un humano. Su cuerpo se rodeaba de un aura oscura y llena de intención asesina.

Las llamas salieron de sus hocicos, creando un gran vórtice de extremo calor. Gabriel voló evadiendo el ataque mientras se formaban distintas armas de luz detrás de ella. Lanzas, espadas, hachas .... una, dos, tres; diez; veinte; cien .... poco a poco llegaron a los miles como una formación de luz rodeando a los dos dragones malvados.

"Rooooaaarrrggh!", los dos dragones rugieron de dolor cuando las armas atravesaron sus escamas y carne. A pesar de que el Grendel original tenía una extrema defensa, estos solo eran clones con menos poder y todo.

Gabriel movió sus dedos y todas las armas de luz clavadas en el cuerpo de los dragones se iluminaron con una gran luz. Y, antes de que los dos clones de Grendel pudieran rugir, fueron engullidos por la luz.

Bang! Bang!

Dos cuerpos cayeron llenos de heridas y quemaduras, Gabriel suspiro con un poco de pesar al ver a los dos dragones muertos. Ella nunca fue una buena para matar, incluso dragones como lo eran Grendel.

. . .

"¡Maldición! ¡Las barreras de esta cosa son molestas!", Rias exclamo enojada. Ladon era un dragón poderoso, su especialidad eran las barreras mágicas, al punto de poder crear barreras donde el espacio-tiempo se distorsionaba.

"¡Que!", Rias grito al ver como una linea de color negro traspasaba una de las barreras de Ladon y hacía que una de sus cabezas explotara en pedazos.

"¡ROOOOOAAAARRRRGGGGGGHHH!", el enorme rugido de furia y dolor de parte de Ladon se escucho por todo el cielo.

Justo en ese momento, toda batalla pareció detenerse. No, toda batalla fue detenida, una enorme presión cayó sobre el cuerpo de todos dentro del Cielo. Los mas débiles comenzaron a asfixiarse mientras temblaban.

Ziiiiiiing ~!

Un solo sonido se escucho en todo el silencio que había quedado. Los mas cercanos pudieron ver una linea dorada aparecer frente a Ladon antes de desaparecer.

Bang! bang! bang!

Pero de repente, una a una, las cabezas de Ladon cayeron al suelo con un estrepitoso ruido. La sangre exploto desde los cuellos y llovió rojo para los mas cercanos. 

Rias palideció un poco al ver la lluvia de sangre. 

"¡Kukukuku! ¡Este dragón celestial llego a dar una mano!", un enorme rugido se escucho junto a la voz. Todos alzaron la vista para ver un portal aparecer y a un Ddraig emanando gran poder desde su cuerpo. Algunos soltaron sus armas al ver al uno de los dos dragones celestiales con vida y en este lugar.

El suelo tembló cuando Ddraig aterrizo en el cielo.

"Mmm ..... esto es molesto, Ddraig ..... ¿Con quien quieres luchar?", Issei apareció a su lado mientras hablaba.

"¡Déjame divertirme un poco! ¡Solo ve a lo que tengas que hacer, socio!", Ddraig sonrió, el sabía que no había mucho que hacer, sobre todo en contra de Khaos Brigade, el único que podría luchar en su contra sería Rizevim Lucifer que, en estos momentos había perdido cualquier sonrisa.

"¡Lucha conmigo, Dragón Celestial!", una voz grito desde lo lejos.

"¿Oh?", Ddraig miro hacía donde provenía la voz y sonrió un poco.

"¿No eres Crom Cruash? ..... ¡Bien, ven a luchar!", Ddraig exclamo mientras se elevaba. Crom Cruash sonrió de forma feroz y se lanzó con todo su poder.

BOOOOOM!!

Cuando los dos puños chocaron, se formaron ondas expansivas que enviaron a volar a las personas cercanas. 

Issei sonrió mientras se arreglaba el cabello a causa del viento.

"Parece que lo tenían un poco duro", comentó Issei al grupo Gremory.

"Issei ...... ¿que es lo que haces aquí? .... sobre todo después de lo ocurrido en el inframundo", Rias frunció el ceño y pregunto con seriedad.

"¿Crees que estoy aquí por ti?", pregunto Issei con un poco de incredulidad.

"No, Azazel me llamo preguntando si podía ayudar. En cuanto a tu hermano, solo puede ser culpado por no tener con una correa a esos bastardos .... tratando de obligar a mi esposa a un séquito .... ¿es que acaso los diablos son tan desvergonzados?", Issei hablo con frialdad.

"Pero no es momento para tales charlas .... ", Issei miro hacía un lugar y sonrió.

"Pensar que tal cosa estaría aquí .... Kukuku .... eso sería de ayuda para ella", Issei se rió de una forma un poco sádica mientras se elevaba y comenzaba a volar en una dirección.