DxD: Camino hacia la dominación

Capítulo 68: Camino a lo divino

Todos se mantuvieron por un par de días en el santuario del monarca absoluto, la presencia de Issei y sus esposas causo revuelo y nerviosismo, algunos querían matarlo. Habían recordado que el fue quien había sido la causa de que su anterior santo emperador estuviera muerto. Pero no podían hacer nada, no con el enorme poder de el o los que estaban cera, incluso Yuanba les había dicho que no hicieran nada.

Yuanba se había convertido en el santo emperador luego de que sus venas profundas despertaran, de hecho, estaba solo a medio paso de entrar al reino origen divino.

Issei arreglo la relación que tenía con Yuanba, no quería tener una mala relación con el hermano de Qingyue. Pero en estos momentos, era hora de partir hacía su hogar. Issei y las demás volverían a la tierra, y Yue Wugou partiría al reino de los dioses con su hijo, Issei pensaba que no era una decisión completamente acertada del todo, Yuanba ahora era mas orgulloso, si trataban de pasar sobre el, aumentaría su poder y mataría al que hizo tal cosa. Pero Issei no podía decir mucho, era su decisión y la de su suegra.

"¿Que estas mirando tanto? ¿Quieres que te coma?", Gran Rojo entrecerró sus grandes y brillantes ojos en Qianye Ying'er que estaba temblando. El poder que sentía del dragón mas poderoso era terrible en su opinión.

"No lo veas mucho, perra. Te matara, no le gusta que lo vean tanto", Jasmine sonrió al ver el estado de la diosa Brahma.

"Estamos volviendo Rojo, por favor ... ", Issei dijo mirando a Rojo.

"Enseguida mocoso ..... por cierto ...... ", Gran Rojo levantó su gran pata y una garra estaba frente a Issei. De repente, tres brillos aparecieron flotando sobre la enorme garra. Tres colores diferentes, verde, marrón y amarillo. Las luces provenían de tres pequeñas esferas que contenían bastante poder.

"¡Oh! ¿Las conseguiste por mi? ... eso es muy apreciado, muchas gracias Rojo", Issei sonrió mientras tomaba las tres semillas restantes del dios de los elementos, Ni Xuan.

"No te preocupes, larva ... las necesitaras", contestó Gran rojo.

"¡Eso es ... Las semillas del dios maligno!", Qianye Ying'er se sentía sorprendida, ella no se sentía de esta forma casi nunca, pero estas personas eran simplemente absurdas. No solo provenían de otro universo, tenían una persona en el reino extinción divina, otra a medio paso y una ultima que podía entrar y salir de ese mismo reino sin complicaciones o efectos secundarios.

¡Y ahora, tres semillas del dios maligno aparecieron así, de una forma tan fácil!, ella no podía evitar sentir sorpresa.

"Hmph!", Jasmine resoplo llamando la atención de Qianye Ying'er. "Si estas sorprendido por tal cosa, entonces caerás desmayada cuando sientas a los dioses" 

"¿Dioses?", pregunto Qianye Ying'er abriendo un poco mas sus ojos. "¿Existen dioses en ese universo?"

"Por supuesto, perra. Existen muchos dioses, y no se te ocurra planear usar a alguno de ellos, terminaras muerta antes de que lo sepas. Ellos son diferentes a los dioses que existieron en la dimensión caos primal", Jasmine le envió una mirada fría de advertencia. Pero sus palabras eran ciertas. Los dioses de ambos lugares eran diferentes.

La diosa ancestral se dividió en ocho partes, cuatro formaron a los dioses de la creación y los otros cuatro, formaron a los emperadores diablo. Sus formas de nacer podrían ser parecidas con algunos dioses, pero sus formas de pensamientos eran diferentes.

Los dioses de la tierra, por lo general eran seres egoístas, seres que podrían actuar de dos formas cuando se enoja, desatan toda su furia y así terminan creando desastres naturales. O, guardan todo ese enojo dentro de ellos, y al final ... terminara de la misma forma. Incluso en estos tiempos donde son mas tranquilos, su arrogancia, egoísmo, y otras cosas siguen en ellos.