❪ 25. BAR ❫

17.4K 1.7K 246
                                    

𝗖𝗢𝗙𝗙𝗘𝗘: BAR

𝗖𝗢𝗙𝗙𝗘𝗘: BAR

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

❪ Cherry. ❫

—¿ESTÁN BIEN? —no sabía cómo apareció de repente, asustandonos a ambos.

Giré, encontrando a Cinco frente a mi, aunque el miraba el suelo y pude notar que habíamos olvidado limpiar la sangre.

Mire a Klaus con una mueca.

—Si solo... Fue una noche larga —respondio mi hermano, tratando de que Cinco no prestará atención al suelo, este me miro buscando una respuesta, aunque solo me límite a asentir.

—Más de una, por lo que veo —nos miraba sin perder detalle alguno, perdiendose por un instante en mi cabello que seguía mojado.

—Si... —arrastre la única vocal, Cinco frunció el ceño ligeramente al escucharme.

—No recuerdo las placas —lleve mis manos a mi cuello por instinto, Cinco se había acercado a Klaus e intentado tocar estás, aunque el más alto no lo permitió.

Entonces, me miro a mi, que solo sostuve las placas que colgaban de mi cuello, las apreté en el agarre de mi mano, por si trataba de acercarse también aunque no lo hizo, solo me miro aún más confundido.

—Le pertenecían a un par de amigos —hablo Klaus, ambos estábamos muy cansados, y el interrogativo repentino de Cinco no ayudaba en nada.

—¿Qué hay del nuevo tatuaje? —mire a Klaus notando que efectivamente su tatuaje estaba al descubierto.

—No recuerdo habérmelo hecho.

—Fue una noche larga, Cinco, ya lo dijimos —hable lo suficientemente claro para que me escuchará, tome a Klaus del antebrazo con la intención de volver a su habitación, pero aún así Cinco nos siguió.

—Lo hicieron, ¿No es así? —detuvo nuestro andar, aunque ya no nos encontrábamos en medio del pasillo.

—¿De que hablas? —Klaus no pudo disimular sus nervios.

—Saben que reconozco los síntomas —Klaus y yo compartimos una mirada preocupada.

—¿Síntomas de que? —trate de fingir que no lo comprendía.

—Desface horario, comezón en el cuerpo... —mi hermano curbio su rostro con sus manos  —El dolor de cabeza que se siente como si alguien pudiera algodón en tu nariz hasta llegar a tu cerebro.

Klaus entreabrió sus dedos, para mirar a Cinco, antes de descubrir su cara. Cinco se acercó hasta mí, observandome detenidamente a los ojos, y elevando una de sus manos a uno de los mechones de mi cabello que caían a un costado de mi rostro.

Su tacto seguía siendo suave y cuidadoso.

—¿Me contarás algo sobre eso, Cherry? —entreabri los labios, respirando con dificultad entre ellos.

¹ 𝗖𝗢𝗙𝗙𝗘𝗘 | cinco hargreeves (reescribiendo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora