¹ 𝗖𝗢𝗙𝗙𝗘𝗘 | cinco hargreeves (reescribiendo)

❪ 48. FIX THE PAST ❫

COFFEE: ARREGLAR EL PASADO

❪ Cinco. ❫

CAMINE POR LOS PASILLOS a paso lento, con la mirada fija en el espacio vacío donde se suponía que ella debía estar. Coloque la mochila frente a el, sacándola de ahí.

—Okay... —con todo el cuidado que pude, la coloque cuidadosamente en su lugar, frente a mí. Metí mis manos a mis bolsillos —Apuesto a que se siente bien regresar junto a todas tus amigas —sonrei melancólico —Esta bien, puedes decirlo —suspire mirando al suelo —Siempre fuimos una pareja improbable —pause —Esto no es fácil para mí, Dolores yo... Quiero que sepas que aprecio cada minuto que compartí contigo, todos esos veintitrés millones y medio. Toda una vida —rei de forma irónica —Ahora míranos, tan afortunados para poder tener una segunda —pare por un instante, antes de reír sin gracia alguna —Si, aún tengo mucho que crecer pero estaré bien, lo haré junto a ella, tu lo sabías. Trate de amarte con la misma intensidad con la que la amo a ella y aprecio que al final hayas entendido que simplemente no lo pude lograr, ahora que finalmente tengo una oportunidad para enmendarlo todo, no quisiera desperdiciarla —sonrei de lado —Jamas te olvidaré, Dolores —murmure antes de mirarla una vez más y alejarme.

Camine hacia atrás unos pasos antes de girarme al no aguantar más verla de aquella forma. Camine a una de los dependientes de la tienda

—Disculpe, ¿señorita? —llame su atención

—¿Si? —me miró por sobre su hombro

—¿Podría colocarle algo nuevo a ese maniquí? —señale a Dolores con la mirada —Le gustan las lentejuelas —agregue antes de dar tres ligeros palmadas en su hombro y salir de ahí

❪ Cherry. ❫

—SE ABRIÓ UN POCO pero con algo más de cuidado estarás bien, ya la cerré de nuevo, debes descansar esta vez —dijo mamá colocando la venda otra vez por mi abdomen. Klaus mordía la punta de sus dedos viéndome desde una esquina de la habitación y Diego se veía algo avergonzado

—Genial, ahora nuestra hermana está rebanada otra vez —soltó Klaus, reí ligeramente al escucharlo , Ben estaba a mi lado observando cuidadosamente lo que hacía mamá

—Deja de recordárselo Klaus, es muy idiota para comprender —mire mal a Diego y el rodó los ojos

—Lo lamento, ya te perdí perdón cientos de veces, fue un accidente —permiti que mamá bajara la camiseta que llevaba antes de levantarme y que me colocará la falda del uniforme

—Eww, huevo, cambiate en privado —Klaus hizo una divertida mueca.

—Sal entonces, idiota —el castaño me miro mal

—Lleva shorts debajo, no seas ridículo, Klaus —regaño Ben haciendome reír, mire a Diego que mantenía sus ojos en el suelo, sonreí de medio lado.

—Esta bien Diego, es normal en ti cometer accidentes —sonrei irónica colocandome el saco por último, el moreno hizo una mueca al escucharme

—¿Podrian dejarnos un momento a solas? —le pidió a mamá y Klaus. Ella se fue con una dulce sonrisa y mi hermano tardo unos segundos más en comprender

—Estare bien, Ben. Puedes irte —le hable al asiático haciendo que dudará antes de desaparecer también —¿Que es lo que quieres hablar? —pregunte

—Hablar de eso —suspire

—Ahora mismo nuestra hermana con poderes aparentemente peligrosos está enjaulada bajo tierra, no creo que sea un buen momento para hablar de algo que sucedió hace una decada— iba a salir de ahí cuando me giro jalándome por el brazo

—Estaria bien que me escucharás un momento, ¿De acuerdo? —me cruce de brazos y rodé los ojos mientras asentía —¿Recuerdas el día siguiente de eso?

—Como olvidarlo, fue el mismo en el que te fuiste de la academía sin explicación —hable en voz baja

—Papá me expulsó —frunci el ceño al instante —Al principio no lo comprendía, estaba molesto por eso y sinceramente era un adolescente estúpido

—¿Solo un adolescente? —interrumpi

—... El punto es, que después de un tiempo lo comprendí, y haber actuado de esa forma esa noche fue el peor error que pude cometer en mi vida, y quiero decirte, que cualquier forma que creas que hay para solucionarlo, lo haré. Lo que me pidas, no importa que, mereces una verdadera disculpa —se encogió de hombros, tratando de evitar mi mirada.

Libere mis brazos de esa tensa posición con la mirada fija en el

—Creo que ya tengo lo que quería —me observo confundido —Que te disculparás, Diego —me encogi de hombros, el sonrió ligeramente

—Siempre sospeche que eras demasiado buena para esta academia.

—Creo que tienes razón —el río por lo bajo

Lo abrace fuertemente, sorprendiendolo considerablemente. Duro unos cuantos segundos tenso antes de envolverme en sus brazos de manera calida, tratando de no lastimarme de nuevo.

—No necesitas hacer nada —murmure —Me basta con que hayas entendido que eres un idiota —rei también, se alejo por unos centímetros, apenas mirándome.

—¿Estamos bien, pequeña? —sonrei y asentí

—Claro que lo estamos, y te recuerdo que tengo tu edad —agregue enarcando una de mis cejas, imitó mi gesto de manera graciosa

—Pero tienes la apariencia de una niña, te diré pequeña hasta que crezcas —negue riendo, el suspiro fuertemente —Tratare de no ser un estúpido esta vez —murmuro después, me aleje completamente del abrazo con una sonrisa adornando mi rostro.

—Sera difícil, no te preocupes si te equivocas en un principio —bromee, el rodó los ojos ligeramente divertido, aunque su apariencia de "chico malo" le impedía sonreír a menudo

Duramos unos minutos más ahí, hablando tranquilamente cuando un temblor nuevamente nos puso alerta. Mire extrañada a las paredes que parecían meserse libremente como si no tuvieran el soporte necesario

—¿Que está sucediendo? —pregunte confundida, Diego no supo que responder

—Tenemos que salir de aquí, rápido, sube a mi espalda —se agachó frente a mi, me detuve observándolo algo insegura —No tenemos tiempo, Cherry. Debemos salir ahora —con algo de pesar subí lentamente procurando no lastimarme

—Toma eso de ahí —señale una bandeja con inyecciones que se suponía mamá me pondría para aguantar el dolor, el moreno se acercó permitiéndome tomar una

—Me la pondré y podrás moverte sin problema, no me lastimarás, ¿De acuerdo? —mi voz salió algo insegura, mamá había dicho algo sobre las inyecciones, pero no recordaba exactamente que era, Diego asintió esperando a que lo hiciera.

Mi mano temblaba mientras las sostenía, aún no superaba del todo mi temor.

Vi la gran aguja con algo de temor antes de encajaría en mi brazo procurando hacerlo rápido para olvidar que estaba ahí. Deje que el líquido saliera antes de sacarla de mi piel y hacerle una seña a Diego indicando que ya nos podíamos ir

Teníamos que salir de ahí, y tenía que ser rápido