❪ 35. WEDNESDAY... AGAIN ❫

12.9K 1.4K 434
                                    

COFFEE: MIÉRCOLES... DE NUEVO

 DE NUEVO

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

❪ cinco. ❫

VAMOS CINCO, TAN SOLO PIÉNSALO BIEN... Sí mueres ahora mismo, nadie podrá proteger a Cherry —dejó aquella pregunta en el aire, más sabía que sólo trataba de jugar con mi mente. Manipularme nuevamente —¿Eso quieres que digan las últimas líneas de tu reporte?

Y justo en ese instante, aparecí frente a ella.

—Si así será, así lo quiero entonces —una cínica sonrisa, tal como la de ella, apareció en mis labios. Espere ansioso su siguiente movimiento.

—No puedes seguir con esto, ambos sabemos que hasta tu tienes limites —amenazante, como siempre, esa era su forma de hablarme —Te salve la vida de una soledad. Me debes —apretó el gatillo, esperando que la típica bala saliera disparada hacia mi, en cambio, no se escucho ruido alguno. Se había quedado sin balas y, de esa forma, mis planes estaban resultando.  

—Estoy en deuda —me miro con suficiencia, aunque lo siguiente que dije borro aquella sonrisa —Pero no es contigo —añadí, saque el anillo de la granada y la moví con diversión antes de arrojarla justo hacia donde ella se encontraba.

Tan pronto como pude, corrí hacia la sala de tubos, apoyándome en una de las paredes para cuando la granada hizo explosión. Aventurandome para alcanzar la sala de maletines, tome uno e hice lo mismo que había hecho con la encargada.

Los restos de las paredes volaban por el lugar, algunos en mi dirección. Logre abrir el maletín justo a tiempo, e inesperadamente me encontraba suplicando porque el maletín me llevara al.momenro que necesitaba.

Todo volvería a la normalidad si lo lograba, apenas habrían sido un par de horas con mi ausencia y, con suerte, Cherry no se negaría a perdonarme por haberme comportado como un idiota.

Solo rogaba porque todo saliera bien.

Miércoles 8:15 am
(... Otra vez)

La dura madera de la barra fue lo que me recibió apenas volví. El dolor se disparo por mi columna, y no pude evitar gruñir.

—¿Sigo drogado o también lo ven? —Preguntó Klaus

—Cinco, ¿dónde has estado? —Pregunto Luther, intente mantenerme de pie pero solo rodé hacia abajo de la barra, golpeándome de nuevo, solo que esta vez contra el suelo. Volví a quejarme.

—¿Estás bien? —hablo preocupada Allison, ayudando a equilibrarme junto a Luther. Diego susurraba por lo bajo y Klaus me veía sorprendido

—¿Quién te hizo esto? —Pregunto Luther, la morena sostenía un vaso de café entre sus manos, y fue lo segundo en llamar mi atención.

Lo primero había sido la ausencia de la ojiazul.

—Es irrelevante —fue lo único que atiné a responder, arrebatando el vaso de la mano de mi hermana, aunque pude notar como esta iba a protestar, me limite a ignorarla dando un largo trago a este. Me mantuve en mi lugar quieto hasta que por fin pude sostenerme por mi mismo.

¹ 𝗖𝗢𝗙𝗙𝗘𝗘 | cinco hargreeves (reescribiendo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora