After to us. #SB2

Capítulo 33.

Capítulo 33. 

1 semana. Sólo había pasado una semana. Parece que fue ayer que me enteré que había perdido a Kyle, que había perdido a mi hijo. 1 semana de llorar en las noches. Lo intento. Intento mucho no llorar entre el día porque se que Kyle está en casa y no quiero que se preocupe por mi. 1 semana de sentirme la peor. Primero perdí a mi hija y después a mi tercer hijo.

Toda esta semana Ambu estuvo viniendo a ver cómo me encontraba, como estaba Kyle.

—Voy a ir al supermercado por las galletas de Kyle. ¿Necesitas algo?

—¿Podrías traer jugo de manzana y comida india?—veo una sonrisa asomarse en su rostro, ella asiente, sabía a qué me refería.

Hoy no quería sentirme mal, quería dejar de estar triste y una tarde de películas con mi mejor amiga y mi hijo era lo mejor que podía ofrecer.

Llaman a la puerta mientras estábamos en la segunda película. Eran las 8:30 p.m., ¿quién podría ser?

—¿Pediste una pizza? —negué, vimos a Kyle y el negó.—Entonces, ¿quién podría ser?

Vuelven a llamar a la puerta, ahora muy fuertemente. —Voy yo —dije.

Abro la puerta y lo primero que me encuentro es a él. Con una chaqueta de cuero y una playera blanca, traía puesto unos pantalones de mezclilla oscura y sus tenis Adidas. Tenía el cabello desordenado y tenía la mirada perdida. En sus manos traía un ramo de mis flores favoritas, girasoles. Me veía como si quisiera decirme algo. Oh Dios.

—¿Podemos hablar? —me regala un intento de sonrisa y le sonrió, me da los girasoles y me ve—, se que te gustan los girasoles.

Veo a Ambu y ella solo suspira. Kyle lo ve y sonríe. —¡Papá! ¡Viniste!

—Hola, cachorro —lo carga y lo abraza—, te extrañe mucho.

—Entra, estamos viendo una película con la tía jugo —le tira de su pantalón y Georg le toma su brazo.

—Primero hablaré con mamá, ¿está bien? —Kyle asiente y Georg me ve.

—¿Qué sucede? —empecé. Sus ojos se veían más oscuros de lo normal.

Jugaba con sus pies, se movía de lado a lado, iba y venía sin mirarme. Intentaba entender su lenguaje corporal, pero me era imposible. —¿Cómo estás?

—Mejor que ayer —asiente y ve al suelo —, ¿tu cómo estás?

—Mal —no lo pensó mucho, y se podía notar que se veía muy mal — estoy muy mal.

—¿Qué sucede?

Intento acercarme a él y se aparta de mí. —Georg, ¿Qué pasa?

Suspira y su mirada cambia, sus ojos se veían muy diferentes. Y de repente, me sentía muy pequeña, justo cuando lo volví a ver, se veía exactamente igual, desesperado, con muchas cosas que decir. —Conduje como loco para poder llegar hasta aquí, manejé a una florería y traje tus flores favoritas, intenté pasar a comprar algo de comer para poder pasar un gran tiempo con nuestro hijo —sonreí, pero al instante mi sonrisa se desvaneció, se veía tan serio —; pero camino a la pizzería me di cuenta que estabas embarazada, de Kyle.

—Georg, olvídalo...

—¿Cómo quieres que lo olvide? —su grito me hizo saltar en mi lugar —, ¿cómo quieres que lo pute olvide? Anadla ¡estabas embarazada de Kyle! ¡De él!

—¡Lo sé!

—De él, Anadla, del hombre con el que te acostabas mientras yo sufría.

¿Qué demonios...? —¿Tú, sufrir? ¡Por Dios, Georg, estabas con Carrie! ¡Carrie está embarazada!

—Pero yo no la amo como te amo a ti —se acercó a mí — sin embargo, ella no me fue infiel, no como tú.

—¿Serte infiel? — la voz de Andy se repetía en mi cabeza una y otra vez, "no puedes decirle a Georg". Maldita sea. —¡Maldita sea!

Georg se sentía más cerca, me toma de la cintura, arroja las flores y con su mano ya libre me toma el mentón, acerca sus labios contra los míos, su respiración era pesada, me observa y observa mis labios —¿Te está doliendo la verdad?

No dije nada y sólo le di un rodillazo en su entrepierna. Por un momento pensé que me iba a besar. Podía verlo como se retorcía del dolor en el suelo de la entrada de la casa, sus quejidos cesaron.

—Tu perfecta y muy fiel Carrie está embarazada de Kyle —me observó atentamente.

—No sabes de lo que hablas.

—Claro, ¿por qué creerme a mí? —ya tenía el nudo en la garganta, no entendía por qué se estaba comportando así —, si no me creer, pregúntale a tu hermano

— ¿Qué tiene que ver Andy con todo esto?

—Él los vio, él tiene evidencias, y como no le crees a la persona que tanto te amo y siempre estuvo para ti, incluso cuando me dejaste, es mejor que le preguntes a tu hermano que está obsesionado conmigo tanto que intento abusar de mí y me chantajeo con hacerle algo a Kyle —puedo ver como su mirada cambio, entiendo todo lo que le dije.

—Anadla... —intenta tomarme de la mano y me aparto, para este punto ya estaba llorando —disculpa, no sabía...

—Nunca sabes —abrí la puerta, Kyle salió corriendo en dirección a Georg —sólo tienes 5 minutos con él, después te largas.