Well... why not?

CAPÍTULO 29

Desde nuestra grada se puede observar perfectamente el escenario, en el cual cinco chicos acaban de salir como por arte de magia. Todas las fans se acercan corriendo a la valla de seguridad para estar más cerca de sus ídolos, nosotras en cambio nos quedamos un poco más atrás para que no nos aplasten. La música empieza a sonar y el grupo canta una de sus mejores canciones, miles de voces resuenan por todo el estadio. Las tres siguientes no son tan conocidas pero aun así, el público las canta emocionado. Hay una parte en la que Niall se acerca mucho a nosotras y nos lanza un beso por el aire, Sandra que está a nuestro lado casi se desmaya.

A continuación se sientan todos en una especie de escaleras que hay más atrás y con sus guitarras comienzan a tocar una melodía que me resulta muy familiar. El primero en cantar es Zayn, al reconocer la letra se me vienen a la cabeza los recuerdos de dos noches atrás. Liam y yo cantando en aquel escenario rodeados por decenas de personas, pero como si solo estuviéramos los dos. Los colores no tardan en incendiarme las mejillas cuando Lucía me dice al oído

—Mira a quien le toca cantar ahora. —Levanto la mirada hacia el escenario y veo al chico de ojos castaños y pelo alborotado acercarse el micrófono a los labios.

Empieza a cantar y esa preciosa voz invade hasta el último rincón del estadio, me estremezco y disfruto del resto de la canción. Claudia nos propone acercarnos a la valla para verlos mejor y las demás accedemos, nos posicionamos en casi primera fila y con cada canción que pasa bailamos y cantamos más fuerte.

Casi sin darnos cuenta el concierto se termina y los chicos agradecen al público su amor y hospitalidad. Nos esperamos a que el resto de fans salgan para volver al backstage con los demás, Sandra se ha quedado con nosotras.

—¿Te ha gustado el concierto? —le pregunto mientras echamos a andar hacia fuera de las gradas.

—¡Muchísimo! —dice ella entusiasmada —Mi momento favorito ha sido cuando Niall nos ha lanzado el beso, mira. —Saca su móvil del bolsillo y le da al icono de galería, en unos pocos segundos veo a Niall cantando y acercándose a nosotras.

—¡Lo tengo grabado! —Esta chica me ha caído muy bien y me gustaría seguir en contacto con ella, por lo que decido preguntarle

—¿Me lo podrías pasar? —ella asiente y me da su número de teléfono, tal y como lo había supuesto.

Al enviarme el video le da a reproducir otra vez y se la ve tan entusiasmada con él que se me ocurre una idea. Me acerco a Lucía y le digo bajito

—Entretenla cinco minutos, que no se vaya. —Ella me mira confundida pero finalmente accede.

Yo camino deprisa hacia la puerta de la entrada en busca de cobertura, me aseguro de que nadie pueda oírme y saco mi móvil. Marco el número de Niall lo más rápido posible y él lo coge al segundo tono.

—¿Si? —dice al otro lado de la línea

—Hola Niall soy Ivette —él cambia totalmente el tono de voz y dice

—¡Hola Ivette! ¿Qué te ha parecido el concierto? —Como no tengo mucho tiempo le respondo rápido y voy directa al grano.

—Ha sido genial, aunque te quería pedir un favor... —Parece contento, ya que dice

—Claro, dime.

Le explico que en su otra firma nos encontramos a una chica que se moría de ganas por conocerle y que ahora había tenido el valor de venir hasta la otra punta de Francia, solo para verlos actuar. Le digo que creo que le haría muchísima ilusión conocerle y que si me podría hacer ese favor, él accede encantado. Se lo agradezco muchísimo y no tarda ni cinco minutos en estar a mi lado, le pido que espere aquí un momento y vuelvo a entrar con las chicas.