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24

El despertador sonó a temprana hora, ambos se levantaron completamente perezosos y sin ganas de salir de la comodidad de la suave cama de Paul. John observaba sonriente al chico con el cabello alborotado y los ojos entrecerrados, tenía ganas de quedarse un rato mas allí observándolo, pero corría el peligro de que Jim entrase a la habitación y los atrapara en la misma cama, eso definitivamente no terminaría bien.

—Me iré a bañar, ¿quieres ir primero o después? —de su armario sacó ropa interior limpia mientras charlaba con su novio.

—¿Sabías que dos personas en la ducha ahorran agua? —Paul no dudó en sacar de allí mismo una camiseta y lanzarsela con fuerza en la cara.

—La próxima vez no pienso dejarte entrar a mi cama. —sin más que decir se marchó, oyendo las risas de John de fondo.

Mientras Paul estaba en el baño, John había decidido hacer la cama y ordenar el colchón del suelo que no había utilizado, había sacado su uniforme de la mochila y ropa interior limpia. No contó con que su único lápiz había caído al piso por hacer movimientos brutos y rodado bajo la cama, con pereza se agachó y lo alcanzó con su mano, no evitó fijarse en la guitarra de Paul descansando allí, debido a que era zurdo había invertido las cuerdas y el golpeador estaba del lado contrario. Una camiseta hecha bolita en el fondo también llamó su atención, no necesitó pensar de más para saber de qué se trataba, también era hombre, ¿debería molestar a su novio al respecto? Sabía que era muy vergonozoso con aquellos temas y se lo había demostrado algunas veces, pero no quería excederse y que su chico creyera que sólo pensaba en esas cosas, claro que no, simplemente las situaciones se habían dado y le gustaba bromear al respecto.

—El baño es todo tuyo. —anunció Paul entrando a la habitación con una toalla rodeando su cintura minutos después, para ese momento Lennon ya se había levantado del suelo y guardado su lápiz hace un buen rato, claramente, ahora simplemente estaba de pie con su ropa bajo uno de su brazos.

—Con su permiso, chico bonito. —antes de irse lo tomó de la cintura y besó sus labios de forma corta, adorando sentir la suavidad de su piel bajo sus palmas.

—Dejé una toalla para ti en el baño, es de color negro. —dijo, mientras veía a su novio murmurar en forma de respuesta está bien.

A lo que esperaba a John, se había puesto el uniforme, aún le dolían los brazos por las agujas y había tenido que quitarse la venda para entrar al agua así que tuvo bastante cuidado cuando se vistió, nuevamente tuvo que ponerse la venda de inmediato, por supuesto. Decidió bajar las escaleras y preparar el desayuno, por sorpresa su padre estaba allí encargándose de ese detalle, tres platos con tostadas y mantequilla descansaban en la encimera, también habían tazas de té, una para cada uno.

—Paul, debes tomarte el anticonvulsivo, es una pastilla. —el chico hizo una mueca al oírlo, por un momento se había olvidado del tumor.

—Okay. —detestaba tomar pastillas, siempre le daban la sensación de que se atragantaría.

James dejó la estúpida pastilla en la palma de su mano y le entregó un vaso de agua, el chico miró asqueado esa cosa en su diestra para depositarla en su boca y beber largos sorbos de agua a continuación, no sabía porqué era así con las pastillas, si era capaz de tragar cualquier comida sin problemas y no sufrir lo mismo.
Al oír las pisadas en la escalera supo que se trataba de su novio, por lo que no tardó en voltearse a verlo, se veía tan endemoniadamente sexy con el cabello húmedo y la camisa con los primeros botones abiertos revelando parte de sus marcadas clavículas, ¿lo hacía a propósito a caso? Tenía todo el uniforme mal puesto y eso lo hacía verse mucho más provocador.

—Dejame ayudarte con esto. —se acercó hasta él y le arregló el cuello de la camisa, no dudó en quitarle la corbata y armarla otra vez, pues lo había hecho terrible.