[14]

4K 338 325
                                    

—Androssi Agüero Zahard ¿Así que ese es tu nombre completo? — le dijo aquel albino que estaba de cuclillas frente a ella mirándola directo a sus ojos. Él llevaba su venda sobre la cabeza, pues ver a Androssi no le cansaba.

—Androssi Alexandra Agüero Zahard. — le soltó molesta desde el sillón individual donde él la tenía tirada.

—Que nombre más largo — Satoru mostró su sonrisa descarada.

—Ah pues, reclámale a mis papas.

—Así que eres hija de Khun... el chamán argentino que me pisa los talones y una Zahard, el clan árabe que se cree mucho.

Si Khun Agüero Agnis se enterase de que secuestre a su hija, probablemente encontraría la forma de matarme.

—Papá es más fuerte que tú— dijo ella orgullosa— y los Zahards...

No era que tuviese la mejor relación del mundo con su padre, pero se había arreglado hace un par de años y estaba algo mejor que con su madre.

—No seas arrogante. Sí, es fuerte, lo acepto. Pero a través del cielo y la tierra, soy el único honrado.

—Lo que eres, es un patán.

—¿Qué significa tu nombre?

—¿Eh?... ¿Androssi? Significa Androssi o Endrossi como quieras llamarme.

—No eso no. Los kanjis..

—¿Qué kanjis de qué? Soy latina no tenemos eso... — ella se removió intentando quitarse las esposas que le había puesto el albino y las cuerdas con la que la había amarrado, pero eran armas de grado especial inclusive para contener maldiciones de alto grado. La había amarrado por los pies y atado sus brazos a su cuerpo. — ¡Ahora desátame! ¿Qué diablos crees que haces?. Ni que fuera peligrosa.

—Eres peligrosa.

—Por su puesto que no, yo soy un pan de Dios — puso ojos inocentes.

—¿Pan de Dios?. Ya me has dado en las pelotas 4 veces, me rompiste las costillas y me partiste el perfecto perfil hace un rato.— ella se rio recordando aquella patada que le dio a su cara y como disfruto viéndolo quejarse y sangrar por la nariz. .— si no fuera porque pudiese curarme, hubiese quedado desfigurado. El futuro del clan Gojō peligra por tu existencia, mi decendencia se acabará si seguimos así.

—Le estaría haciendo un favor al mundo, no necesitamos más personas como tú y mucho menos tu decendencia.

—Jummm — Satoru se puso de pie y acercó su rostro a la chica, luego le acarició su cuerno y la mejilla suavemente — Nuestra decendencia, muñeca.

—Iuuu, aléjate de mí viejo pervertido. — alejo su rostro del de él para que no viese su sonrojo.

Aquel chico le estaba pisando los talones en todo sentido, la miraba directamente con sus ojos y de vez en cuando rosaba su cuernito lo que le daba escalofríos a la chica.

—Hace unas semanas querías que tuviese sexo casual contigo.

—Estaba borracha, no pensaba bien y me faltaban como 10 tornillos. No te ilusiones.

—Siempre te faltan como 10 tornillos... — se burló él. — pero así me gustas... ahora ¿Qué hacías en la escuela y con el uniforme Zahard?

—Eso no es de tu incumbencia, y ¡Maldición... Desátame, Esto es un secuestro!. Soy una civil secuestrada, pondré una queja.

Ese carácter... sonrió Satoru al ver como la chica se removía bajo él.

—Ni siquiera eres japonesa.

El Chico de la Venda en los ojos I & II (Satoru Gojo x OC)Where stories live. Discover now