[22]

3K 236 143
                                    

—𝕊𝕒𝕥𝕠𝕣𝕦 𝔾𝕠𝕛ō—

La cara de Drossi es lo más cómico que he visto en mi vida, debe estar preguntándose qué rayos pasó anoche y la expresión de Kuroo dice lo mismo desde que se percató de mi presencia. No pude evitar tomar mi celular y tomarles un par de fotos.

—¿Qué rayos haces? — protesto ella cubriendo el lente de mi cámara con sus manos, sus mejillas estaban ruborizadas, aun cargaba mi chaqueta y estaba algo abierta dejando ver parte de su busto y el lunar en su pecho que me traía vuelto loco, si el gato no estuviese allí me la comería.

—Lo siento, lo siento — solté una pequeña carcajada — no pude evitarlo, sus caras.

—Hey, bro... ¿Por qué... — no terminó la frase, pero debía ser algo tiempo de ¿Por qué estamos despertando los tres en la misma cama?

Que lindos, ninguno recuerda nada...

Je Je Je Je...

—Solo les diré que anoche yo gane.

Ambos se miraron con un signo de interrogación en su rosto.

۝

10 minutos antes de las 00:00 del sábado

Mmmmmm

Llevo la noche en disputa contra el gato por los ojos, los labios y el trasero de Androssi.

¡Aleja tus dedos de voleibolista de ella, bro!

Pero ella es viva, nos tiene donde quiere y lo peor es que nosotros nos dejamos. ¿Por qué?. No sé, simplemente pasó. Ella te embruja con su baile, te baila como si estuviera en la cama contigo y me tiene más caliente que un ramen recién hecho.

Mis ojos tampoco podían evitar mirar aquel peculiar lunar en su seno derecho.

Pero ni por la puta le voy a demostrar nada.

Quisiera que eso fuera cierto, pero cada que se menea sobre mi pelvis parte de mí se lo demuestra.

Traidor, maldito traidor pequeño Gojō.

—¡Oh! — Androssi tomó otro de los tantos shots de tequila que le paso su amiga Qui y se lo bajó de una, el gato también.

Ambos estaban más que ebrios ya, la mayoría en la fiesta. Yo preferí dejar el alcohol hace rato para cuidarlos a ambos, pero Androssi no lo hacía nada fácil porque mis ganas de follarla solo aumentaban a cada segundo.

—Es la hora — Qui la jaló repentinamente de en medio de nosotros.

—¡Bro! Jajaja — dijimos Kuroo y yo al mismo tiempo con un poco de vergüenza, ya que habíamos quedado a centímetros uno del otro al ya no tener a Androssi en medio.

Nos alejamos rápidamente para ver de que era hora. Escuché como la música cambió a la música de Drossi y Hak. Tres de las amigas de Drossi y ella, se pusieron alrededor de Samu y empezaron a bailarle de forma atrevida al cumpleañero y cantarle en perfecto español algo que iba tiempo de:

Nadie lo hace como tú lo sabe' hacer

Ese cuerpito no e' mío, pero yo le soy fiel

Si tú no quiere' salir, yo no quiero beber

Yona parecía querer unírseles pero Hak la abrazo evitándoselo.

—La mayoría son de descendencia latina o europea. La universidad de Drossi es la más importante del mundo cocina, por eso hay gente de todos los países — me dijo Kuroo al ver la posible interrogante que tenía sobre aquel grupo —Yona y Piper son japonesas, pero fueron corrompidas por la tripleta: Clair, Qui y Drossi, como vez.

El Chico de la Venda en los ojos I & II (Satoru Gojo x OC)Where stories live. Discover now