Capítulo 6

5.9K 271 52
                                    

He pasado toda la noche en el hospital, junto a Kevin. Ya he dicho a mi madre que me quedaré aquí el tiempo que haga falta, no me separaré un solo segundo de él. Bajo a la máquina de la cafetería, meto 1€, y cae una chocolatina. Tengo tanta hambre... Estoy despeinada, así que me improviso un moño. Vuelvo para la sala de Kevin, cuando abro la puerta, el hace un moín con la boca, entreabre los ojos, gira la cabeza hacia mí, y me saluda.

-Buenos días, queridísima vecina -y hace un intento de sonreír-.

Estoy fascinada. ¡Ha despertado del coma! ¡Gracias Diós, gracias! Grito entusiasmada.

-¡Kevin, has despertado, te he echado tanto de menos! ¡Pensaba que iba a perderte! ¡Pensé que no volvería a verte! -me lanzo a sus brazos, con lágrimas en los ojos, y el hace un gesto de dolor-.

-¡Ay, cuidado preciosa, que los puntos están muy recientes! -se toca el brazo-.

-Lo siento mucho -y le beso, un intenso e interminable beso-.

Estoy tumbada en la camilla al lado de Kevin, con la cabeza en su pecho, y el me rodea su brazo. Entonces entran el doctor y la enfermera. Me levanto rápido, y me coloco en la silla de al lado de la camilla.

-Hombre, porfin ha despertado el bello durmiente -dice irónica Irina, la enfermera-.

-¿Cómo estás muchacho? -dice Raúl, el doctor-.

-Estoy bién, doctor. Mejor de lo que pensaba. -responde Kevin, aún con algunos gestos de dolor-.

-Ya lo veo, estás hecho un toro. -contesta con una sonrisilla maliciosa- Por cierto, Kevin, ¿cómo llevas las piernas?

-¿Que le pasa a mis piernas, doctor? -responde Kevin, algo preocupado-.

-Prueba a mover los dedos, muchacho. -ordena secante-.

Kevin hace un gesto de curiosidad, sus dedos no se mueven. Después hace el intento de mover las piernas, pero tampoco puede. Su cara expresa desesperación.

-¡¿Doctor, que pasa, porqué no me puedo mover de cintura para abajo?! -grita alterado-.

-Mientras estabas en coma te hicimos unas pruebas, y me temo que has perdido el nervio muscular de las zonas inferiores. Para que me entiendas, te has quedado immóbil de cintura para abajo. Muchacho, me temo que estás paralítico. -explica, con la cabeza gacha-.

-¿Pa..pa...paralítico? ¿Y..yo? -tartamudea, al borde de la desesperación-.

-Lo siento. -responde el doctor. Apoya una de sus manos en el hombro de Kevin, y nos dejan a solas en la sala. Le traen una silla de ruedas, y vuelven a marcharse.

¿Kevin paralítico? ¡Cómo es posible!

Kevin intenta colocarse en la silla de ruedas como puede, yo le ayudo, y finalmente se coloca.

¿Va a pasar toda su vida en silla de ruedas? ¿Cómo és posible? ¿Porqué a él? Su entristecida voz interrumpe mis pensamientos.

-¿Ahora cómo vas a querer a un paralítico? No podré andar. ¡Ni siquiera podré vestirme yo solo! ¿Porqué a mí, Jessica, porqué? -sus ojos se humedecen, y al fin estalla. Su cara se vuelve un mar de lágrimas-.

-Oh, Kevin, no dejaré de quererte, jamás. Lo que siento por tí va más alla del físico. Lo único que me importa eres tú. Yo. Nosotros. Y siempre será así, nada va a cambiar.

-¿Pero cómo vas a estar enamorada de alguien como yo? ¡Mírame! Sólo soy una cara bonita. ¡Y ni siquiera puedo mantenerme en pie! -agacha la cabeza, decepcionado de si mismo-.

Me siento sobre él, sobre sus piernas, en la silla de ruedas. Agarro su mano, y le miro fijamente.

-Kevin, yo te quiero por como eres, no solo por tener una cara bonita. Tu sonrisa és lo único que me da las fuerzas que necesito para levantarme cada mañana. Sí, nos conocemos de hace una semana. Pero te aseguro que en una semana, sólo una simple semana, me has echo sentir lo que nunca nadie ha conseguido, y eso no va a cambiar. Yo te quiero Kevin, y siempre te querré, seas como seas. Porque a mí no me importa tu físico, a mí, lo que verdaderamente me importa és esto -acerco mi mano a su pecho, y la coloco sobre su corazón-.

-¿A pesar de estar en una silla de ruedas? -responde triste-.

-A pesar de todo, mi amor.

Sus brazos se aferran a mi cuerpo, hunde sus dedos en mi largo cabello, me agarra, y me besa.

ObsesiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora