Obsesión

Capítulo 16

Amanezco bajo un árbol, con un trozo de tela por encima para cubrirme el cuerpo que me encontré anoche por aquí tirado. Es una situación pésima. Afortunadamente llevo en la muñeca mi reloj de mano, y puedo saber la hora.

Ahora mismo son las 5:47am, ya es de madrugada, y no creo que Kevin siga allí. Recuerdo bastante bien el camino hacia aquella horrible cabaña, así que no tengo ningún problema para llegar. Me asomo poco a poco por la ventana del lateral izquierdo y veo que no hay nadie, así que me dirijo hacia la puerta, pero por desgracia está cerrada con llave. Espero que Kevin no haya encontrado mi móbil. No se me ocurre nada para entrar, hasta que veo a unos 5 metros de mí una piedra bastante grande acabada en punta, voy a cogerla, y la estampo contra la ventana. El cristal se hace añicos, apoyo las manos en el marco, me doy un leve impulso y entro a la cabaña. Noto una punzada en la mano, y al mirarmela veo un corte no muy profundo. Seguramente haya sido con algun resto de cristal que quedaba por los bordes, bueno, no es nada. Me apresuro a coger mi iPhone que gracias a Dios todavía sigue bajo la cama. Escucho el pitido de un coche, así que sigo el ruido y aparezco en medio de una carretera. Rápidamente llamo a David para que venga a buscarme.

-Jessica, ¿qué pasa? -pregunta algo incómodo-.

-Em... no... nada... Anoche tu hermana y yo nos fuimos a una discoteca y... y iba tan borracha que me dejó tirada en la carretera -miento-.

-Pero si mi hermana no bebe -dice algo confuso-.

-Bueno, ya te contaré. Lo principal és que estoy en medio de la carretera, muerta de hambre, sucia y quiero ir a casa.

-Está bien, ahora paso a buscarte. ¿Dónde estás?

Miro un cartel que pone Zaragoza 16km.

-Estoy en la carretera hacia Zaragoza, en el quilómetro 16.

-¿Qué haces tan lejos? Eso és por lo menos media hora de camino. ¿Mi hermana dónde está? -contesta inquieto-.

-David, luego te lo explico todo. No tardes, por favor -cuelgo-.

Tengo que pensar en las explicaciones que le daré a David, no puedo contarle la verdad porque me dejaría, y mataría a Kevin. Y no quiero que eso pase.

Pasan 40 minutos y entonces veo el Mercedes blanco de David acercándose, por fin. Me levanto, y hago un gesto con la mano para que pare. Sale del coche, y me acerco para abrazarle, pero se aparta.

-¿Qué te pasa? -pregunto desconcertada-.

-Sube al coche -responde autoritario-.

Subimos al coche, lo pone en marcha y comenzamos el trayecto hacia casa.

-Haber, cuéntame qué ha pasado -pregunta enfadado-.

-Pues mira, anoche tu hermana dijo que íbamos a ir a una bolera con unos amigos, y ellos trajeron mucho alcohol. Tu hermana se emborrachó, pero yo no tomé nada. Me fuí al baño, y cuando volví ya no habia nadie.

-¿No habías dicho que habíais ido a una discoteca?

-Esto... me habré equivocado, estaba nerviosa.

-Jessica, estamos en medio de un tramo de carretera, y solo hay bosque alrededor. ¿Dónde ves tú una discoteca?

-Esque comencé a andar por si encontraba a alguien que me guiase, y acabé aquí.

-Mi hermana hace 2 años que no bebe. Y, ¿para qué ibas a andar podiéndome llamar? -replica serio-.

-Pues anoche sí lo hizo. No sé, estaba insegura, por como actuarías si supieras que estabamos por ahí con amigos.

-Bueno, dejémoslo. Ya hemos llegado-.

Frena el coche delante de mi casa, y me mira.

-¿A qué esperas para bajar? -dice bruscamente-.

Me bajo del coche sin responderle, y baja la ventanilla.

-¿Tú adónde vas? -pregunto curiosa-.

-A hacer unos recados.

Arranca el coche, y se va.

Entro en casa, subo a mi habitación y me quedo mirando al techo pensativa. ¿Qué recados tendrá que hacer? Es muy raro. ¿Se habrá enfadado? Cojo el móbil, y le mando un Whatsapp.
Gracias por recogerme amor. ¿Qué estás haciendo? Ya te echo de menos.

Pasa media hora y cuando miro el Whatsapp veo que ha visto el mensaje, pero no ha respondido. Comienza a ser preocupante, decido enviarle otro.
¿Qué te pasa? Últimamente te noto raro. Llámame, por favor. Te quiero.

Pasa una hora, y otra vez está visto. Sigo sin recibir respuesta. Decido llamarle. Le llamo aproximadamente unas 8 veces, pero no lo coge. ¿Qué pasa? ¿Porqué no lo coge? Joder, que lío.

Me pongo a ver la televisión, pasan horas y horas, y sigo sin saber nada de él. Són las 7:32pm, no tengo nada que hacer y estoy agotada. Lo mejor será irme a dormir. Me pongo el pijama, me tumbo y me adentro en un profundo sueño.