Obsesión

Capítulo 15

Acabo de retocarme en el baño y bajo hacia el salón.

-Sí que has tardado, hija, no has podido ni despedirte de Kevin y Saúl

-Ya.. Lo siento. Esto... Mamá, hoy iré a dormir a casa de Mar, ¿vale?

-¿Con David? -responde, sorprendida-.

-Oh, no, no. Yo vivo en un piso del centro, solo. Mi hermana vive con mis padres aún -contesta David, sonriente-.

-Tengo que irme mamá, llego tarde. Te quiero -le doy un beso, y corro hacia la esquina donde Kevin me esperaba-.

Me espero en la esquina, y Kevin aparece detrás de mí, y me sube al coche. Llevamos aproximadamente media hora de camino, a través de montañas y bosques, y finalmente paramos en una cabaña pequeña, muy antigua, en medio de la arboleda. Kevin saca unas cintas y cuerdas del maletero, me coge por el brazo y me empuja hasta estar dentro de la horrible cabaña.

-¿Qué vas a hacerme? -pregunto. Tengo mucho miedo. ¿Me pegará, o algo parecido?-.

Me arrepiento de haber venido, tendría que habérselo contado todo a David y le habría dado una buena paliza. Joder, ¿qué he echo?

-Callate y haz lo que te diga -responde secante- Túmbate.

Me estiro en la cama, saca las cuerdas y me ata los brazos a la cabecera de la cama y los pies a la parte del final. Estoy totalmente abierta, me arrepiento de haber elegido este vestido.

-Calladita estás mejor, princesa -saca la cinta y rompe un cacho-.

-Más te vale que no me toques. Sinó... -me pone la cinta en la boca y no me deja terminar-.

-¿Sinó qué? ¿Vendrá tu principito azul a salvarte y me pegará? ¡Uy, tengo un miedo que no puedo ni mantenerme en pie! Dime, ¿cómo va a encontrarnos? Nadie excepto mi família conoce este lugar, y no saben ni que estoy aquí -sonríe, con aire glorioso- Bueno, ahora que lo pienso, quiero oírte gritar, total, estamos a 7km del pueblo más cercano, así que nadie te oirá -me quita de un tirón la cinta, y hago una leve mueca de dolor-.

-No te me acerques Kevin, ¿qué te he echo yo? ¡Estás obsesionado conmigo, estás enfermo, estás loco! -grito-.

-Sí. Pero loco por tí -se pone entre mis piernas de rodillas, y me arranca el vestido de un tirón-.

-¡¿Pero qué coño haces?! ¡Aléjate de mí! -comienzo a patalear, pero no sirve de mucho porque estoy atada-.

Joder, en vaya lío me he metido. ¿Qué hago? Estoy atada e indefensa, no tendría que haber venido, soy gilipollas.

Me quita el sujetador y las bragas, y quedo completamente desnuda. Entonces él se quita la camiseta, los pantalones, y los calzoncillos, y se acerca a mí.

-Kevin, porfavor, no hagas esto, sabes que soy... virgen.

-Jessica, en el fondo se que me deseas. Quiero ser el primero en follarte, no ese gilipollas  de David. El no te quiere ni la mitad de lo que yo te quiero Jessica.

-¡Kevin, ni se te ocurra! ¡Tú nunca me has querido, para tí solo he sido una más, yo era tu juguete! ¡David me quiere y me cuida, el no quiere hacerme daño, no como tú! -grito furiosa mientras intento liberarme de las cuerdas-.

-¡Cállate! -me grita. Y entonces se coloca entre mis piernas, me agarra de los muslos, y me penetra con fuerza y con fúria. Una y otra vez. Sin parar-.

Mi cuerpo se retuerce de dolor, esto és horrible,  siento un dolor muy fuerte en la barriga, pero a la vez algo placentero. Pero.. ¿qué estoy diciendo? ¡Kevin está violándome y digo que siento placer!

-¡¡Para!! -grito entre lágrimas, entre dolor-.

Kevin para dentro de mí, y noto en mi interior un ardiente líquido. ¿¡Pero qué hace!?

-Eres un gilipollas. Me secuestras, me violas, ¿y no tienes ni el valor de ponerte un puto condón? Te odio. Te odio con toda mi alma, como nunca he odiado a nadie. ¡No quiero que vuelvas a tocarme, ni mirarme, nada! ¡Suéltame!

Kevin coge una navaja y me quita las cuerdas. Pienso en abalanzarme sobre el, quitarle la navaja, y acuchillarlo. Pero sé que acabaría perdiendo yo, ya que él tiene más fuerza. Todas las sábanas están ensangrentadas. Este asqueroso ser me ha desvirgado como un animal. És repugnante. Me pongo rápido toda la ropa, y salgo corriendo. Kevin está arrodillado en la puerta, decepcionado, creo que mis palabras le han dolido, y eso és lo que pretendía. Él no quiere hacerme daño, simplemente quiere que esté con él, me quiere, está enfermo, necesita ayuda, pero no lo hace con maldad. Mi corazón está ocupado por David, yo le amo y él me ama. Kevin, a diferéncia de David, abusa de mí y me trata fatal. Tengo que llamar a David, y que venga a buscarme. Pero... ¡Mierda! Tiré mi iPhone bajo la cama para que no me lo quitase.. ¿Qué hago? Quizás Kevin vuelva con su padre, pero prefiero no arriesgarme a ir ahora, por si él sigue ahí. Tendré que dormir en el bosque, y de madrugada iré a la cabaña a por mí móvil, llamaré a David, y ya está. Todo arreglado. Pero.. ¿si estoy embarazada? ¿y si David se da cuenta de que ya no soy virgen cuando le dije que lo era? ¿se enfadará? Joder, vaya lío. Y todo por culpa de Kevin. Pienso denunciarle. Se lo contaré todo a todos. ¡No voy a parar hasta verle entre rejas, encerrado, que és donde tiene que estar! ¡¡Lo odio!!