Daddy🖤

Capítulo 58.

Todas las escenas no - sexuales y sexuales narradas en este libro cuentan con la participación de personajes mayores de edad de acuerdo con las nuevas normas de consentimiento de Wattpad. Además, todas ellas cuentan con consentimiento expreso para su realización. Más información o dudas sobre las modificaciones en mi página de Instagram. 

Madison's POV.

Mis padres ya habían regresado de su viaje en Alemania y eso solo significa una cosa: Problemas.

Tras nuestro regreso de Nueva York, había disfrutado de tres días magníficos en casa de Ian, donde no me había despegado de él en ningún momento, pensando en que quizás no volvíamos a estar así.

Ambos estábamos de acuerdo en hablar con mis padres y contarles sin remedio la relación que compartíamos, a pesar de las consecuencias y de lo que eso podría suponer para nosotros, aunque eso no hacía que mi miedo disminuyese.

Tenía tanto miedo de sus reacciones, de sus posibles palabras hirientes hacia lo nuestro, de sus ojos decepcionados mirándome por el simple hecho de estar enamorada de Ian o como ellos dirían, de el socio de mi padre.

Y es que, joder, ellos siempre han sido comprensivos conmigo, me han brindado su confianza sin cuestionarme en ningún momento y tener que confesar que les he estado mintiendo durante todos estos meses me hace temblar de miedo. No quiero que mis padres me odien o me vean como la hija que nunca han deseado, se decepcionen de mí, pierda su confianza y nuestra buena relación para siempre.

El primer paso era hablar con mi madre para poder confirmar la cena y después, llevar a cabo el plan que Ian y yo habíamos hecho.

- A ver. Hay que pensar que vamos a decir. - hablé paseándose por el salón. - Yo voy a hablar con mi madre y le preguntaré si puedo traer a un amigo a cenar...

- Novio. - me corrigió Ian, sentando tranquilamente en el sofá. - Soy tu novio, no tu amigo.

- Para ellos no eres ni mi amigo, eres el socio de mi padre así que no me presiones. - fruncí el ceño. - Cállate y escúchame. - le ordené.

Arqueó una ceja cruzándose de brazos.

- Te voy a dar unos azotes. - advirtió.

- Está vez no, por favor. Siento que si me rozas de esa forma lloraré por lo nerviosa que estoy. - suspiré temblorosamente.

- Anda, ven aquí. - me llamó, indicándome su regazo y yo accedí, sentándome encima de él. - Tienes que relajarte amor, hemos decidido hacer esto, pero podemos esperar. - besó mi frente con cariño. - Dime, ¿qué quieres hacer?

- Quiero decírselo. No quiero mentir más a mis padres y no quiero seguir ocultando lo que siento. - cogí aire y volví a levantarme, nerviosa. - Empecemos otra vez.

- Le dirás a tu madre si un amigo puede ir a cenar y después apareceré yo. Fin. - habló encogiéndose de hombros.

- ¿Pero tendré que presentarte, no? - cuestioné dando vueltas alrededor del sofá. - Diré algo así como "Mamá, papá, este es Ian. Es mi novio y llevamos un par de meses saliendo".

- Y después tu padre me arrojará un jarrón.

- ¡No digas eso! - le reprendí asustada. - Todo va a salir bien, ellos van a entenderme. Cuando ellos empezaron mi madre tenía dieciséis y mi padre veintiuno, están más o menos igual que nosotros, ¿verdad?

- Si, supongo. - respondió no muy convencido. - Saldrá bien amor, deja de preocuparte. Todavía faltan dos días para que lleguen tus padres.

- Es que no puedo parar de pensar en ellos. - me volví a acercar a él, parandome delante. - Estoy muy agobiada, así que levanta de ahí y consiénteme. - dije causándole una sonrisa de oreja a oreja.