Capítulo 40.

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Todas las escenas no - sexuales y sexuales narradas en este libro cuentan con la participación de personajes mayores de edad de acuerdo con las nuevas normas de consentimiento de Wattpad. Además, todas ellas cuentan con consentimiento expreso para su realización. Más información o dudas sobre las modificaciones en mi página de Instagram. 

Capítulo dedicado a:

LisaLaMilanesa
@Inocencialmpura.
pavonessamartinez
Angie_gical

Muchas gracias por leer💕💕

Una semana había transcurrido desde el precioso y movido finde semana que había pasado con Ian en aquella majestuosa casa. Continuábamos bien y se podía decir que la confianza en él otro al igual que la comunicación entre ambos había aumentado. Poco a poco y por ahora sin ningún miedo o cualquier otro pensamiento paranoico, Ian era capaz de expresarme claramente como se sentía, me llamaba para contarme lo que le decían sobre su padre y me explicaba como se sentía al respecto. Obviamente estábamos en un buen momento.

Era muy agradable saber y sentir que mi relación con él había llegado al punto donde es capaz de decirme todas esas cosas retorcidas que se le pasaban por la cabeza. Se sentía como si hubiéramos dado un paso gigante después de haber retrocedido unos cuantos cuando tuvo aquel ataque. Orgullosa lucia el bonito anillo en mi dedo que a mi parecer expresaba más que los te quieros. Era una muestra de que esto era real, nos pertenecíamos, éramos nuestros, solos nuestros.

En un principio, cuando llegué a mi casa tuve que quitármelo para que mis padres no hicieran preguntas mientras me contaban como, aunque mi padre haya tenido que estar de reunión en reunión se lo habían pasado bien, disfrutando un poquito de la ciudad de Londres cada vez que tenían oportunidad. Se veían radiantes mientras sonreían.

En el instituto todo seguía su curso; Travis y yo aburridos dibujando y jugando al ahorcado cada dos por tres, yo medio dormida y Ethan haciéndonos compañía, poco a poco se iba haciendo más a nosotros y viceversa. Como era de esperarse, Ian no se tomó de buena forma el decirle que Ethan seguía e iba a seguir saliendo y juntándose con nosotros de ahora en adelante. Diría que el chaval era su kryptonita aunque al final, después de una conversación bastante seria, — donde yo me negaba rotundamente a que el tuviera el poder de decidir sobre mis amistades. — aceptó que no podría prohibirme ver a Ethan, que era mi amigo y que iba a estar cerca de mi lo quisiera el o no. No voy a negarlo, fue difícil convencerlo y hacerle llegar a dicha conclusión, pero se dio cuenta de que si yo era feliz eso era lo correcto y como último recurso, me pidió mantenerle informado si Ethan se pasaba de la ralla en algún momento.
Accedí a su petición sin poner un pero, sabiendo ahora su historial amoroso y su poca confianza debido a sus problemas, esto era un gran avance para el al dejar algo sin su total control, destensar la cuerda un poco.

Hoy ya era viernes, me encontraba en casa y estaba terminando de ayudar a mi padre a secar los platos mientras el fregaba y mi madre sacudía el mantel y recogía las demás cosas de la mesa.

- Hoy es la gran noche. - anuncia mi padre con una gran sonrisa y voz cantarina.

- ¿La gran noche? ¿A qué te refieres? - fruncí el ceño pasando un trapo seco para quitar la humedad del plato que acababa de entregarme.

- Esta noche vienen mis socios a cenar, lo de la barbacoa en el jardín, ¿te acuerdas que te lo conté hace unos días? - realmente no me acordaba. Asiento lentamente. - ¿No lo recuerdas, no?

Daddy🖤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora