Capítulo 42 - Part 1.

207K 7.8K 7.7K
                                    

Todas las escenas no - sexuales y sexuales narradas en este libro cuentan con la participación de personajes mayores de edad de acuerdo con las nuevas normas de consentimiento de Wattpad. Además, todas ellas cuentan con consentimiento expreso para su realización. Más información o dudas sobre las modificaciones en mi página de Instagram. 

Capítulo dedicado a:
cntrrs_maru
Girlu_u
Dayan1236
CarolinaQuintero571
Roxi1980
Rubeniho0916
LarryForever2002
AzuquitaTuPatrona

Muchas gracias por leer mi novela y apoyarla tanto❤

Leean la notita del final, por favor, bebés😊

Ian's POV.

Son más o menos las diez y media de la mañana cuando empiezo a abrir los ojos y removerme en la cama. Sonrío como un idiota en cuanto veo los pelos alborotados de Madison al lado mío, mientras ella duerme plácidamente en mi cama, arropada hasta el cuello con las sábanas, permitiéndome ver su cara relajada y descansando. Lo más probable es que se encontrara realmente cansada, había pasado una semana de la discusión de Travis y Joel y para animar a su mejor amigo habían decidido salir de fiesta ayer por la noche, presentándose por sorpresa después, en la puerta de mi casa completamente borracha.
Es decir, yo había sido informado de qué saldría con Travis, pero desde el principio me comentó que se quedaría en casa de él al finalizar la noche.
No puedo negar que fue muy gracioso verla así.

Flashback.

Acababa de terminar de enviar un correo para los procuradores del contrato con los japoneses cuando el timbre sonó, haciendo que mirará la pantalla de mi móvil para comprobar la hora. Eran las tres de la mañana. No estaba esperando visitas y menos a estas horas. Salí de mi despacho con el ceño fruncido y me dirigí a la puerta, saliendo al porche — todo por culpa de que hace unos días la cámara del telefonillo de la entrada se había estropeado y no había tenido tiempo para llamar al técnico — y continuando por el camino de piedras que cruzaba mi jardín hasta la verja principal, abriéndola.

- ¡Papi! - mi pequeña exclamó alegremente, abrazándome.

- ¿Madison? - pregunté extrañado correspondiéndole el gesto. - ¿Qué haces aquí, bebé?

- ¡He venido a verte! - se separó de mi. No paraba de hablar en un tono elevado, seguro por haber estado tanto tiempo en un recinto cerrado con música alta.

- ¿Pero cómo has llegado? ¿Y Travis? - miré la calle buscándolo. Madison simplemente me hizo a un lado e intentó pasar, casi cayéndose en el intento de no ser por mi brazo en la cintura. - Cuidado nena.

‐ He venido con esto. - levantó su pierna, con una sonrisa. - Y pues Travis se ha quedado en su casa, porque no ha sido capaz de pillarme. ¿Sabes papi? El no es bueno corriendo. - murmuró con gracia, no tenía duda que estaba algo borracha.

- ¿Has venido andando aquí? ¿Sola? - mis ojos estaban apunto de salirse de las cuencas. Cerré la verja de la entrada sin soltarla.

- No no, todo el camino no. Luego he cogido el bus nocturno a unas cinco manzanas de aquí, ¡y me he dormido! - volvió a exclamar con efusión. - Pero por suerte un chaval muy majo me ha despertado para venderme unos polvos blancos raros, ¡mira! - sacó de su bolso una bolsita diminuta con polvos blancos. Dios, que desastre. - Son para ti, te los he traído de regalo para que pueda quedarme a dormir en tu casa aunque no te haya avisado.

Daddy🖤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora