Daddy🖤

Capítulo 47.

Todas las escenas no - sexuales y sexuales narradas en este libro cuentan con la participación de personajes mayores de edad de acuerdo con las nuevas normas de consentimiento de Wattpad. Además, todas ellas cuentan con consentimiento expreso para su realización. Más información o dudas sobre las modificaciones en mi página de Instagram. 

Madison's Pov.

Habían pasado tres semanas desde el entierro del padre de Ian y todo parecía haber vuelto a la normalidad, toda esa aura de tristeza y melancolía había ido menguando y disipándose hasta el punto de observarse sólo como un lejano recuerdo. O al menos, así lo sentía yo desde mi punto de vista, teniendo en cuenta que no era ningún familiar mío directo y que ni siquiera lo conocía completamente. Aunque no podía negar que las lágrimas que solté en el funeral de Alexander fueron verdaderas. El estar allí, viendo cómo entierran un ataúd y tener a Ian a mi lado devastado, aparte de toda la frialdad del cementerio me habían hecho imposible no llorar.

Por parte de Ian, llegar al punto en el que se encontraba ahora había sido un proceso difícil.

Los días después del entierro de su padre se negaba a hacer nada, todavía sin poder creer lo que había pasado. En ese momento tuve que actuar como madre, llevándole la comida para que se alimentara aunque no quisiera y también dándole sus pastillas, porque lo que menos falta hacía en ese momento era que toda esa tristeza que sentía se transformarse en rabia y en un arrebato le diera por hacer daño a cualquier persona, o mucho peor, hacerse daño a sí mismo. No iba a permitir eso bajo ningún concepto.

La primera semana además de no querer moverse de casa, las pesadillas no le dejaron dormir. Todas las noches que había podido ir a pasar con él poniéndole como excusa a mis que dormía en casa de Travis porque no estaba pasando por un buen momento con su novio, había presenciado cómo en medio de la noche empezaba a escuchar gritos y esos sueños horribles le hacía incorporarse del colchón con el corazón desembocado. Todavía recordaba a la perfección la primera noche que eso sucedió.

- Creo que es hora de irnos a dormir, mi amor. - agarró mi mano levantándome del sofá con él.

Después de llegar del instituto había conseguido que saliera de su cama y a continuación de su despacho para pasar la tarde viendo televisión y comiendo palomitas. Me parecía un plan capaz de ocuparse de despejar su mente en estos momentos donde tantos malos pensamientos surcaban por ella.

Le seguí escaleras arriba rumbo a la habitación. Cerramos la puerta a nuestras espaldas. Desde la muerte de Alexander incluso Ruth le había ofrecido a Ian quedarse a dormir aquí para cuidar más de él.

- ¿Quieres que nos demos un baño? - ofrecí masajeando sus hombros desnudos cuando se despojó de la sudadera que llevaba. Estos días no había ni abierto el lado del armario en el que tenía guardadas las camisas y los trajes del trabajo. Su intención no era ir, al menos hasta nuevo aviso. Le había dejado toda la mayoría del papeleo que se podía hacer sin su supervisión a Susan, el solo se sentaba en el despacho que tenía en casa para hacer reuniones breves a las que para su pesar no podía ni faltar o atrasar. Me había mencionado varias veces tras el entierro que si no seguía participando aunque sea mínimamente en su trabajo mientras se acostumbraba a todo lo que había pasado, su padre estaría muy decepcionado de él. Yo no creía eso, pero siempre me rehusaba a comentar nada, sabía cómo era Ian cuando se ponía cabezota.

Asintió con la cabeza, girándose para terminar de despojarse de sus pantalones de chándal y así dirigirse al baño en bóxer. Escuché como abría el grifo de la ducha mientras yo quitaba mi ropa, reuniéndome con él en el baño completamente desnuda.