Capítulo 44. El plan Sayler. Parte 01

40 21 6
                                    


Kylee «Cooke» Sorní

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Kylee «Cooke» Sorní.

Cuarenta y ocho horas antes del plan.

Un caluroso viernes de julio no me dejaba estudiar del todo bien, permanecía intentando darme un poco de aire con los mismos libros cada cierto tiempo, nunca imaginé que Efrén sería un horno en temporada de verano. Por suerte estaban llegando los exámenes finales y eso indicaba que podría descansar, además de quizás tomar en cuenta el visitar a mis padres en España, no se lo había preguntado a Karter, pero al menos yo sí quería hacerlo.

Un mensaje hizo vibrar mi celular y no dudé en tomarlo para ver la pantalla.

«¿Dónde estás con este tremendo calor? ¿Quieres ir a por un helado?»

Lohan me tomó desprevenida, creía que estaba en el entrenamiento a esa hora. No tardé en responderle.

«Estoy en mi habitación, a casi cincuenta grados»

...

«¿A qué hora iremos por el helado?»

Unos toques en la puerta me hicieron apagar la pantalla y caminar hacia el llamado, al abrirlo noté al mismo ojos azules y pelo castaño que me escribía hace un instante.

—Justo ahora.

—Ya van dos veces este tipo de sorpresas en una semana, ¿qué te traes?

—Estamos muy cerca de los exámenes, ¿tú qué piensas? —Hizo una sonrisa divertida y yo me hice la ofendida.

—¿Entonces solo me sobornas para que te ayude en los exámenes? ¡Qué tragedia! Creí que eras mi amigo.

—Entre la amistad y las calificaciones, prefiero la última.

—Apoyo tu opinión. —Lohan abrió su boca con sorpresa ante mis palabras y yo sonreí antes de reír por su reacción—. ¿Qué? Es la verdad.

—Consideré que dirías todo menos eso.

Lo dejé entrar al lugar y él se retiró la mochila para lanzarla en mi cama, se sentó en una de las sillas y se inclinó un poco en ella para mirarme mientras recogía mis libros.

—¿Karter está en la piscina?

—No. Está estudiando con unos compañeros para los exámenes, no podemos darnos el lujo de reprobar. ¿Tú no deberías estar entrenando?

—Terminamos antes, el entrenador tuvo una emergencia de último momento. Supuse que no estabas en clases y por eso vine a molestarte.

—Aún faltan unas horas, al parecer te aprendiste mi horario.

—Es lo que un amigo hace, coloca a sus amigos por encima de las calificaciones.

Rodeé los ojos con una sonrisa cuando coloqué todo en su lugar. Volví a su lado y me senté en la silla más cercana.

Ideales [Terminada]  #PGP2022 Bilogía ✨ Inestables ✨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora