❝A veces solo tienes que tener un poco de fe...
...literalmente❞
Faith Diggory, la hermana pequeña del popular Cedric Diggory, no es muy diferente a su hermano. Ambos aman el Quidditch, probablemente todos en la escuela alguna...
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—¿El arma? ¿Qué arma? —Umbridge preguntó con una amplia sonrisa. —. ¿Han desarrollado algún método de resistencia? ¿Un arma que podrían emplear contra elMinisterio? Por orden de Dumbledore, claro... —Umbridge miró de Hermione a Faith y ambas asintieron.
—¡S... s... sí —Hermione estaba fingiendo llorar ahora para convencer a Umbridge—, pero cuando se marchó todavía no la habíamos terminado ya... a... ahora nosotros la hemos terminado solos, y te... te... teníamos que encontrarlo para decírselo!
—¿De qué tipo de arma se trata? —Umbridge preguntó con entusiasmo. Había puesto su gruesa mano sobre el hombro de Faith y le había apuntado a la cara con la varita.
—No... no... nosotros no lo entendemos del todo —mintió Faith.—. Solo hicimos lo que el profesor Dumbledore nos dijo que debíamos hacer.
Umbridge se puso de pie y se palmeó la falda como si estuviera tratando de recuperar algo de su dignidad.
—Llévame a donde está el arma —dijo formalmente.
Hermione y Faith compartieron una mirada. ¿Qué iban a hacer ahora?
—No quiero enseñársela... a ellos —Faith le dijo, mirando a los Slytherin.
—No eres nadie para poner condiciones —siseó Umbridge con una dulce sonrisa.
—Bien—suspiró Faith.—. ¡Bien, que la vean, y esperoque la utilicen contra usted! ¡Sí, mire, invite a un montón de gente a venir a verla! Le... le estará bienempleado... ¡Sí, me encantaría que to... todo el colegio supiera do... dónde está, y co... cómoemplearla, así, si vuelve usted a molestar a alguien, podrán... deshacerse de usted!
Harry estaba bastante impresionado con lo bien que Faith y Hermione eran capaces de mentir. Y todo para ayudarlo a ayudar a Sirius. No podía desear mejores amigos.
Umbridge estaba dudando. Todo lo que Faith acaba de decir la asustó un poco. Ella miraba nerviosamente a la Brigada Inquisitorial.
—Está bien—dijo finalmente. —Diggory, Potter, ustedes dos me mostraran esta arma. ¡Levántense, ahora!
—Profesora— comenzó Malfoy, estaba claro que él también quería ver el arma inventada, —, profesora Umbridge, creo que algunos miembros de la Brigadadeberían acompañarla para vigilar que...
—Soy una funcionaria del Ministerio perfectamente capacitada, Malfoy, ¿de verdad crees que nopuedo defenderme yo sola de dos adolescentes sin varita mágica? — Umbridge preguntó con dureza—. Además, no parece que esa arma de la que habla la señorita Diggory sea algo que deban verunos colegiales. Permanecerán aquí hasta que yo regrese y se asegurarán de que ninguno de éstos —Señaló a Ron, Hermione, Ginny, Neville y Luna— escape.
—Como usted diga —dijo Malfoy bastante decepcionado.
—Y ustedes dos pueden ir delante de mí y mostrarme el camino—Umbridge señaló a Harry y Faith—. Adelante.
