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Cuando crees estar dos pasos adelante, siempre hay alguien que esta a una milla de ti.

—¡Es un no y punto!.

Cuando perteneces a una jerarquía simplemente hay dos opciones; sí y no. Si te sales de ese balance o intentas desobedecer cualquier cosa que se encuentre por fuera de esas dos opciones, entonces eres una agitadora.

—¡Eso no te concierne Alexey!.

Es una pirámide que hay que seguir como algo natural, como si nacieras con ello. Cuando se pertenece a algo así, hay que adaptarse como si fuera algo de siempre; como una oreja, una lengua, una voz, los ojos o incluso los pulmones que necesitas para respirar. Ya que cuando te conviertes en agitadora, hasta respirar se convierte en algo dudable e incluso... negable.

—¡Tiene que ir!.

Yo ahora estoy muy por debajo de ser algo parecido a la punta de la pirámide. Conseguí ser una de las mejores cazadoras, sí. Soy respetable y temida por muchos incluso fuera de Blody Place, pero esto ni siquiera importa cuando aún sigo siendo ordenada y manejada por un jerarca.

—No puede hacerle nada, es código de plata.

Mi cabeza se levanta por inercia.

—¿Qué es el código de plata?—salgo de mi trance poniendo fin a su discusión.

Lucka se levanta de la silla.

—El código de plata es uno de los más respetados en el tratado por la paz que firmó Kay hace unos años con Constantine.

Veo Taylor mira hacia arriba recordándolo.

—"Ante cualquier situación que amerite reunión, se cederá la paz, tolerancia y respeto para concertarla, solo serán dos individuos. Sin guardias, sin armas, sin acompañantes, sin protección alguna bajo ningún perímetro de distancia, sin trampas, sin nada que no sea la persona invitada, todo esto de parte de ambos individuos. De lo contrario o bajo el rompimiento de todo esto; por parte del inocente tiene toda autoridad, capacidad y derecho de sentenciar a muerte al culpable y con ello: tomando por cargo el titulo de Jerarca del ejército enemigo".

Trago grueso.

Entonces básicamente, tengo que ir sola. Confiando que en Hux cumplirá su palabra ya que le conviene.

—¿Por qué te niegas tanto Quinn?—Rochelle se dirige a Alexey—. A Hux le conviene no tocarle ni un pelo, de lo contrario, Kay se queda con sus Destripadores, es sencillo.

—Tú mejor cállate—no puedo evitar sentir satisfacción cuando Alexey le dice aquello—. Si fuera por ti, sería espectacular que Constantine la dejara en una zanja con los intestinos afuera y sin sangre en su sistema. No tienes lugar aquí Rochelle así que apártate.

Ella se queda callada.

Por fin alguien que la pone en su lugar.

—Me da igual lo que todos ustedes quieran. Incluso lo que ella quiera—me señala Kay—. Va a ir y cuando él intente algo en tu contra; pondrás en marcha lo que dice el tratado —piensa un segundo—. No lo mates, quiero ver como se retuerce al ver como tomo a sus súbditos.

Todos se están adelantando demasiado.

—Raven—Alexey me llama.

Volteo a verlo.

Esta neutro, pero sus ojos verdes lima me transmiten negatividad.

No confía en Hux.

La cosa es que, esta reunión me conviene en muchos aspectos. Él es de los pocos que me han dado respuestas, no voy a desperdiciar algo así y a demás... ¿Qué más le da a él si me dejan picada en el bosque?.

ARMAS LETALES © [ Despiadados I ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora