El sol de QishanWen☀️

Capítulo 20: La resistencia es la clave

—Ying-er, responde a tu esposo

Wei Ying desvió la mirada, completamente avergonzado, trataba de fingir que no había escuchado nada, ni que sentía las leves caricias de su esposo por su cintura o por sus muslos.
Así como hace ratos había ignorado que su túnica interior se había manchado de su húmedad, y ahora se pegaba a su cuerpo

Realmente la gravedad no estaba a su favor en esta ocasión, sus fluidos habían caido totalmente manchandole, dando una vista espectacular, donde estaba ahorcajadas de su esposo.

Wei Ying rogaba que su esposo no se diera cuenta de esto, ya que si se enterara, las consecuencias serían enormes.

—Baobei ¿Le darás una respuesta a tu esposo? Realmente tengo mucha hambre, no precisamente de comida...— con tentadoras palabras Wen Ruohan no desperdició el tiempo en tocar el cuerpo de tan glorioso ser como lo es su amado, sin dejar en el olvidó esos jugosos glúteos

—¡A-Ruo!

—¿Qué? No dijiste nada de no tocar tu trasero

—¡Desvergonzado!

Wen Ruohan sonrió —La cosa es... que nunca tengo suficiente cuando se trata de ti, siempre quiero más, y puedes sentirlo  realmente no miento— dijo desvergonzadamente mientras movía su regazo para que su esposa pudiera sentirlo perfectamente —Eres el ser más maravilloso que he conocido, y me pones jodidamente caliente todo el tiempo.

Realmente Wei Ying lo sentía

El Wen volvió a insistir —Respóndeme cariño o...— así las traviesas manos del líder viajaron de bajo de la túnica se Wei Ying, casi rozando sus muslos yendo a esa zona de su intimidad

—¿O si n-no qué?— habló entrecortadamente sintiendo cómo los dedos de su esposo trataban de en tocar esa parte

Va a darse cuenta
Va a notarlo

Si eso pasará Wei Ying moriría de vergüenza. Como pudo tomo las manos del líder evitando que se movieran más y decidió dar una respuesta —Yo no estoy seguro si saldrá algo de ahí

Ante esto el semblante de Wen Ruohan cambió por completo, parecía extasiado, su rostro se había iluminado por completo —¿Estás diciéndome que sí sale algo me dejarás?

Wei Ying volvió a sentir esa sensación como si un depredador estuviera hambriento... y el era la presa

—Ya lo veremos— respondió con las mejillas rojas

—Hmm, me es suficiente con eso. Vamos a lavarte ¿Bien?

Wei Ying lo miro desconcertado
—¿Lavarme? ¿No lo haremos?

—Oh, cariño. Tu dijiste que no querías por que estabas muy sensible, si lo hacemos no podría evitar que mi boca se dirija a esos dos hermosos y maravillosos pechos— dijo con tono lamentable

—¡Ya entendí! Deja de decirlo así— se quejó

Wen Ruohan se río —Tú haz dicho que no, y es no. No te forzare a nada, podemos continuar o  descansar si eso quieres. Sabes que tenemos que planear muchas cosas, todo pasará más pronto de lo planeado— nuevamente salía a relucir la caballerosidad y el respeto que le tenía el a su esposa

Wei Ying se sintió derretir, realmente se sentía afortunado. Sin más, con todo el rostro rojo, tomó el cabello de su esposo y lo empujó hasta donde estaba su pecho.

—¿Wei Ying?— habló sorprendido Wen Ruohan con su cabeza pegado al pecho de su esposa

¿Es lo que creó? — se preguntaba internamente el Wen