〘Capítulo 49〙

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Faltan 2 días, y todo estaba bien hasta que el teléfono de mis abuelos sonó temprano con Aaron avisando que no iba a ir a trabajar. Mis abuelos y yo estábamos en la Iglesia, orando para purificar nuestras almas.

Ironías.

Mi abuelo sacó el móvil en plena misa, estaba en vibrando en su bolsillo y eran a penas las 9 de la mañana cuando tuvimos que irnos. No dijo lo que pasaba, solo tuvimos que irnos. Mi corazón por su puesto latía despavorido, sin saber qué hacer pero confiando que Hades estaba bien.

Mi sorpresa fue cuando llegamos al hospital y ahí estaba Aaron. Leia se había intentado suicidar y por eso tomó un frasco de pastillas, pero Aaron la encontró a tiempo así que le salvó la vida al traerla al hospital donde le hicieron un lavado de estómago.

—Ella no está bien señor, en nuestros reportes vimos que se ingresó al hospital hace unas semanas y luego se escapó —dice el doctor fuera de la habitación de Leia. Ella está adentro con la enfermera quien la está asistiendo porque acaban de llevarla a la habitación. Aaron está al lado de mis abuelos y yo estoy más alejada, pero escuchando todo.

—Ella entró porque tuvo un aborto espontáneo —Aaron corrige y el doctor mira sus registros, pero levanta la cabeza y niega con ella.

—La paciente no está ni estuvo embarazada, y si lo estuvo no se atendió en este hospital por lo que su historia clínica no refleja eso.

El doctor es tajante al decir que Leia no se atendió aquí por su aborto. Pero yo misma vine, la vi salir...

Pero Aaron no habló con un doctor. Cuando vinimos ella estaba saliendo del baño. ¿Eso quiere decir que ni siquiera fue atendida? ¿Tuvo un aborto en el baño?

Algo es seguro, Leia no está bien. Y su hermano menos.

No entiendo lo que está pasando, y todo me grita que tengo que salir de todo este circo macabro, perverso y horripilante en el que estoy condenada a quedarme si no escapo ahora que puedo. Los focos están puestos en la chica, y en su intento de suicidio.

—Recomendamos que sea dejada en observación esta noche para que mejore, luego les recomiendo buscar un especialista porque según mi tiempo de experiencia, la chica está pasando por un cuadro no muy normal —el doctor es sutil y no dice que está loca. Yo diría que está loca, pero él no lo dice.

Aaron asiente confundido y luego les pide disculpas a mis abuelos y va por un vaso de agua. Cuando se va lo veo caminar de forma apresurada, y mis abuelos no le prestan atención a él sino al doctor. Yo aprovecho para seguirlo sutilmente y lo veo ir en sentido contrario a la cafetería. Frunzo el ceño al verlo actuar así, y decido seguirlo porque mi curiosidad es más fuerte que yo.

Aaron Draven me da asco.

Después de todo, lo que sé es una aberración, se lo contaría a mis abuelos para destronar a su predilecto y que vean la mierda donde están metidos hasta el cuello, pero hoy no. Hoy no será el día.

Ellos son muy creyentes, irónicamente, y saber que ese par practicaron o practican incesto hará que se tuerza todo. Que se jodan todos, Leia se lo merece por hacerme la vida imposible y Aaron, está igual o peor que su hermana. ¿Cómo pudo hacer eso? ¿No sintió asco?

Lo sigo hasta que lo veo entrar en el baño de hombres. No hay muchas personas cerca, antes de entrar finjo ir al de mujeres y miro que no haya nadie. Es domingo y muy temprano como para que haya mucha gente, así que cuando nadie entra y decido hacerlo.

Lo primero que percibo es el sonido de la canilla del lavamanos abierta, el agua suena mientras se va por la rejilla y hace el sonido de fondo. No hay nadie más que él y yo. Aaron está mirando el agua correr mientras se sostiene del filo del lavamanos.

El Juego de HadesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora