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    Había pocas cosas que Jungkook disfrutara más que gozar en la cama de alguien. Le encantaba conocer un cuerpo nuevo, una nueva zona sensible, una nueva forma de suspirar. Las piernas que estaban encima de él eran femeninas y tersas, encantadoras. Los pechos que caían con gracia frente a él eran perfectos. El tacto que recorría su cuerpo era experimentado.

    La chica mordía y succionaba su labio inferior con fuerza. Las manos de Jungkook fueron a la espalda desnuda de la chica, dando caricias suaves hasta que sintió que la piel debajo de sus dedos se erizaba. Los besos de ella bajaron a su mandíbula, aprovechando a morderle el mentón. Jungkook soltó un quejido, había algo que no le gustaba.

    Los labios de la chica bajaron a su cuello, dispuestos a dejar una marca a su paso.

    —No me gustan los chupetones —advirtió él.

    Ella no dijo nada, siguió con lo que estaba haciendo. Mordió y lamió el cuello de Jungkook. Él no se podía concentrar. Cerró los ojos y empezó a imaginar cosas lindas. Fue entonces que la imágen del rostro de Jimin llegó a su mente. Intentó dejar de pensar en su rostro, entonces comenzó a imaginar su cuerpo. Él era el primero en decir que no estaba mal pensar en una persona mientras tenía sexo con otra, esta vez había algo diferente, había un sentimiento de preocupación. No quería aceptar que tenía que recurrir al recuerdo de Jimin para calentarse. Los labios de la chica siguieron su camino hacia los pezones de Jungkook, los cuales también chupó y mordió, esfumando por completo su fantasía. A Jungkook se le escapó otro quejido.

    —Te gusta morder —dijo nervioso.

    —Mucho —susurró ella.

    Volvió a subir hacia el cuello de Jungkook, por reflejo, él subió los hombros y se contrajo.

    —Alza el cuello —mandó ella. Tomó su mentón e hizo que Jungkook pusiera su rostro hacia atrás para así volver a besarlo, a su manera, en ese lugar.

    Jungkook no aguantaba más, esa zona había quedado muy sensible debido a las repetidas mordidas, quería que se detuviera. Pero se notaba que la chica estaba disfrutando y dando todo de sí, no quería "cortarle el mambo" y se suponía que le estaba gustando, debería gustarle. Agradecía que estaba oscuro y que no se estaban viendo las caras porque de seguro la suya era de sufrimiento. Ella se detuvo y acarició el torso desnudo del chico, a Jungkook se le escapó un suspiro de alivio. Metió su mano dentro de la ropa interior de Jungkook, no se encontró con la erección que esperaba.

    —¿Pasa algo? —preguntó extrañada.

    —Mi perro murió.

    Jungkook no tenía perro.

    —Que mal... ¿Quieres que lo intentemos otra vez? —habló con su voz más seductora, con intenciones de volver al cuello de Jungkook. Él, nervioso, puso su mano entre medio para detenerla.

    —Tal vez lo dejamos para otro día —dijo sentándose en la cama.

    La chica chasqueó la lengua, algo molesta, y se apartó para ponerse su remera. Jungkook hizo lo mismo.

    Cuando ambos estuvieron vestidos, salieron de la habitación. Ella acompañó a Jungkook hasta la puerta de su apartamento.

    —Hasta la próxima —dijo ella. Tomó el rostro de Jungkook entre sus manos y le dió un beso duro en los labios. Jungkook estaba tan fuera de clima que le pareció totalmente desagradable.

    —Hasta la próxima —respondió él con una sonrisa acartonada cuando se separaron.

    La chica abrió la puerta, él salió al pasillo del edificio y ella volvió a cerrar la puerta. Jungkook caminó hasta llegar al ascensor, apretó un botón para llamarlo y esperó. Cuando las puertas automáticas se abrieron ante él, se adentró en el ascensor y marcó la planta baja. Las puertas se volvieron a cerrar y el ascensor comenzó a bajar. Jungkook sacó el celular de la mochila. Abrió Tinder y entró a la parte de las conversaciones, allí eliminó su match con la chica sin pensarlo dos veces. Soltó un suspiro cansado en el que se aflojó todo su cuerpo. Las puertas del ascensor se abrieron, Jungkook acomodó la mochila en sus hombros y caminó hacia afuera del edificio. Notó en la cara de la recepcionista la sorpresa que había significado que saliera tan pronto, él también estaba impactado.

Para Siempre [Kookmin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora