capitulo 5

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Salto de tiempo

* Vemos a un zorro en medio de la hierba mirando su comida, un conejo gordo y agradable, tan pronto como saltó, una flecha aterrizó en el suelo junto al conejo, asustando a ambos animales y huyendo *

Mirabel: maldita sea!!

*Mirabel maldijo mientras caía del árbol que estaba escondiendo poniendo su moño improvisado en su espalda podía escuchar a Gabriela lloriquear haciéndola poner los ojos en blanco*

Mirabel: Lo sé, lo sé, apesto en esto. Lo intento, niña, créeme, y no entiendo por qué te quejas. Te di la mayoría de los conejos que atrapé en las trampas. Si alguien debería quejarse, soy yo.

*Gabriela caminó junto a Mirabel jadeando mientras Mirabel suspiraba y acariciaba su cabeza*

Mirabel: me pregunto si puedes entenderme o simplemente te quedas conmigo ya que te alimento tanto.

*Mirabel dejó de acariciar y comenzó a caminar de regreso a casa silbando a Gabriela para que la siguiera, Mirabel tomó un trozo de corteza de su bolso improvisado y comenzó a masticarlo, sabía horrible pero engañó a su estómago pensando que había comido, Mirabel golpeó ella misma contra un árbol borroso haciéndose maldecir*

Mirabel: tu sabes cual es el problema no Gabriela es el maldito ojo gracias a la vela todo lo que veo en mi ojo derecho es borroso incluso con mis lentes cuando finalmente regresemos a encanto voy a destruir eso bueno para nada vela y tira los restos en la cara de esa vieja chancluda!!!

*Los pájaros volaron del cielo por los gritos de Mirabel haciendo que Gabriela gimiera con Mirabel asintiendo*

Mirabel:si si baja la voz lo se chica lo siento vamos vámonos a casa me estoy cansando de comer corteza a ver si puedo pescar algo

*Al oír la palabra pez, la cola de Gabriel comenzó a moverse en una feliz sucesión, lo que hizo que Mirabel pusiera los ojos en blanco*

Mirabel:tienes un estomago sin fondo tienes suerte de que eres lindo y que no tengo con quien hablar tambien

*Mirabel y Gabriela siguieron caminando cuando escucharon que algo se acercaba rápido hacia ellas, Gabriela comenzó a gruñir cuando Mirabel sacó su arco y flecha y apuntó a la fuente del sonido, de las sombras un enorme oso de 8 pies de largo. llegó rugiendo Mirabel disparó su flecha estando tan cerca esta vez que no falló al golpear al oso en los ojos, pero eso no lo detuvo, lo único que hizo fue enojar al oso, el oso llegó a Mirabel cortando con toda su fuerza lanzándola contra un árbol, Gabriela comenzó a saltar y morder pero cebada hizo cualquier cosa ya que el oso mordió a Gabriela sacudiéndola antes de tirarla, Gabriela gritó y comenzó a gemir de dolor mientras el oso corría hacia Mirabel quien agarró su cuchillo crudo para tratar de defenderse, cuando el oso la alcanzó, Mirabel comenzó a apuñalarlo en el cuello para tratar de matarlo, mordió un pequeño cuchillo hecho de piedra cebada que le hizo cualquier cosa al animal de 600 libras, mientras Mirabel retraía su brazo el mundo se congeló por ella como en ese momento Cuando el oso mordió el brazo izquierdo de Mirabel con toda su fuerza arrancándolo del cuerpo de Mirabel, Mirabel gritó de dolor como nunca antes, lo último que escuchó Mirabel antes de desmayarse por la conmoción y la pérdida de sangre fue el sonido de disparos*

Días después

*Mirabel gimió sintiendo su brazo izquierdo como si estuviera en llamas, abrió lentamente los ojos y los cerró instantáneamente por las luces cegadoras*

Enfermera: oh, qué bien que esté despierta aquí, déjeme quitarle estas luces, quiero decir, ¿quién en su sano juicio pensó en poner las luces justo encima de nuestros pacientes?

the scar of the Madrigal Where stories live. Discover now