Capitulo 36

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LA AGOTADORA REALIDAD DE LA TRANSMIGRACIÓN A NOVELAS - NOVELA - CAPITULO 36

• Capítulo 36

Con una débil sonrisa, Katie se arrastró en sus rodillas, más cerca de Rosetta. Mientras cojeaba, las cadenas conectadas a sus piernas fueron arrastradas a través del suelo, de nuevo acompañadas con un fuerte sonido.

Katie miró alrededor de la prisión, luego, cuando fue claro que no había nadie más allí, ella se postró tan bajo como pudo. Incluso así, no había mucho espacio para que alguien viera esto.

Con una expresión aburrida, Rosetta esperó a que la anciana abriera los labios.

—En realidad… Estoy guardando un gran secreto. Es un secreto tan grande que podría sacudir el Ducado. No, la verdad, más que eso, es un secreto que podría agitar  y volcar la aristocracia entera debido a lo impresionante que es.

— … ¿Un secreto que podría sacudir el Ducado?

—Sí, Milady. Conozco un secreto que podría poner el mundo al revés. Si me saca de aquí, si me lo promete… No, no… no… es… Si usted escucha lo que tengo que decir, no podrá resistirse a sacarme de aquí.

Después de decir estas palabras, el sonido de una respiración agitada llenó el calabozo. Emocionada por lo que ella misma había dicho, Katie arañó el suelo de piedra con sus uñas ennegrecidas.

“No parece que estés mintiendo.” Observando lo emocionada que estaba al respecto, Rosetta abrió los labios lentamente.

—¿Eres la única que conoce este secreto?

—Sí, por supuesto. Soy la única.

—Entonces, ¿cómo puedo creer que tus palabras son ciertas?

Pese a hacer esta pregunta acusadoramente, la sonrisa de Katie no podía ser borrada de su cara. Debido a que estaba sonriendo tan ampliamente, sus labios agrietados se rajaron y comenzaron a sangrar. En un instante, se produjo el grotesco espectáculo de la sangre fluyendo por sus labios.

—Tengo pruebas. Hay evidencia para respaldar lo que digo… Si me deja salir de este lugar. Puedo mostrarsela de inmediato. Si me salva… puedo demostrar todo.

Entre más murmuraba, más brillaban sus ojos.

“¿Qué clase de secreto podría sacudir el Ducado?” Incluso recordando el contenido de la novela original, Rosetta no podía pensar en nada. Pero decir que eso era mentira… “Parece que ella está diciendo la verdad.”

Descansando su cabeza en una manó, palpó su mentón y giró la cabeza hacia un lado.

Pero no tenía ninguna suposición. Ni siquiera podía imaginar qué clase de secreto era este cuando el mismo no aparecía en la novela. Mientras dudaba, Katie volvió a hablar como si tuviera prisa.

—Milady, ¿lo sabía? En realidad… —Su voz tambaleante resonó en el aire sombrío.

¡Clap! Aunque la voz fue detenida con un repentino aplauso. Los labios que deseaban hablar urgentemente se cerraron debido a ello. Y los ojos sorprendidos se giraron hacia Rosetta.

Levantándose del suelo, Rosetta tomó la lámpara e ignoró esa mirada.

El rostro de Katie, aún en shock, se levantó junto al movimiento de Rosetta.

—Mi… ¿Milady?

Al oír la voz perpleja, Rosetta alargó la mano que sostenía la lámpara y la acercó a los barrotes. Katie hizo una mueca al ver la luz y retrocedió.

LA AGOTADORA REALIDAD DE LA TRANSMIGRACIÓN A NOVELAS - NOVELA  Where stories live. Discover now