ᎷᎽ ᏌᏁᎥᏉᎬᏒᎦᎬ JJK (Gojo Satoru)

Capítulo 34

Narra Abril

Yuta y Naoya estaban de pie frente a mí, listos para empezar a pelear "unidos" contra mí. Yuta empuñaba su katana partida.

¿Debería llamar a Niebla y atacar a Naoya de lleno con la habilidad número 6?

Tal vez sería lo más rápido y efectivo, pero, si lo hago, será cuando descubra algo sobre su Técnica Maldita, no antes. Si la contrarresto con facilidad, con un ego como el suyo, sentirá más la diferencia de poder. Además, él no tiene idea de que esa habilidad debe usarse exclusivamente al final. Podrá creer que, en el peor de los casos, lo atacaría con ella al menos una vez más, y orillarlo a darse por vencido. Aunque eso sería una apuesta.

—Entonces, ¿intentarás enfrentarme? —le pregunté, con una sonrisa amenazante surcando mis labios—. Si no quieres acabar peor de lo que estabas, deberías huir ahora que tienes la oportunidad. El solo tocarme, hará que se te derrita la piel.

Su sonrisa se ensanchó al escucharme, con sus ojos de zorro más afilados y brillosos que nunca.

Definitivamente, está loco.

Pero, al fin y al cabo, todos los hechiceros lo estamos.

—Como mujer, deberías conocer tu lugar... tres pasos atrás de un hombre. Además, todavía no encontré a Megumi.

La cara de Yuta era todo un poema. Y la mía también.

Al menos, ahora sé que Yuta no es machista. Desde que coordinamos tan bien nuestras habilidades actorales, cada vez me agrada más.

Wait.

¡¿Megumi?!

Arrugué las cejas en fastidio.

—¿Y por qué buscas a Megumi?

—Quiero que me escriba un papelito antes de morir.

Me quedé en shock.

¿Antes de morir?

En verdad... ¡¿está tan grave?!

—Tsk... —no perdí un segundo más y armé mi posición de combate—. Acabemos con esto rápido.

Mientras antes, mejor, así podré ir a curarlo. Debe estar en la Escuela si está en estado crítico, recibiendo atención médica de Shoko, ¿no?

Contrario a lo que estuve haciendo todo este tiempo, liberé mi poder sobrecargado, dejando que las llamas crezcan a mi alrededor.

—La velocidad es justo mi área, lindura. —Sonrió con arrogancia, como si no hubiera estado al borde de la muerte hace unos minutos.

—La mía también, estúpido.

El fuego no es el mejor arma contra él si su especialidad es la velocidad. Extinguí las llamas a mi alrededor enseguida, rodeándome de viento en su lugar.

En ese caso, la Técnica de Viento es mi mejor opción. Una velocidad comparable a la que alcancé al contrarrestar la Gravedad de Geto falso debería ser suficiente, supongo.

Sin perder un segundo más, Naoya se disparó hacia mí como un misil, y apenas pude ver lo que me hizo. Me embistió con su puño extremadamente veloz y acabé estampada contra una pared, que se desmoronó al impactarme. La espalda comenzó a dolerme.

—Tu área, eh. —sonrió.

Es un desgraciado machista, pero sus ojos afilados son hermosos. Es una pena, no hay lugar en mí para imbéciles como él.

Además, soy pura y exclusivamente de Satoru.

Una sonrisa boba se formó en mis labios de solo recordarlo.