THE REVENGE

CAPITULO 10: "¿Quién es él?"

Buenas tarde para todas....

:::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::

El nombre que había sido escrita en la hoja de registro quedó marcado en la mente y ojos del director de la prisión, sus espesas cejas se fruncieron con sospecha. Con solo ver aquel nombre, definitivamente era un hombre quien lo visitaría, pero ¿qué estatus tenía con Jacob? ¿Era su hermano, su novio? En esas y muchas preguntas más se quedó pensando Sila cuando accidentalmente dejó escapar un profundo suspiro desde su garganta como de costumbre, aunque esta vez estaba mezclado con un poco de frustración.

"¡Es hora de tu visita y cuidado con tus palabras no quiero que nadie quede en estado de schok!"

Jacob fue sacado del confinamiento solitario para esperar y poder ver a su familia, de acuerdo con sus derechos como prisionero. Hoy el joven llevaba su habitual uniforme rojo de prisión, pero se veía más delicado, más sonriente y más puro que de costumbre.

'¡Ah! Tienes miedo de que otros vean que detrás de la imagen muy buen director, no eres más que una bestia', pensó Jacob en su corazón, pero aceptó las acciones de la otra persona.

Pronto fue el turno de que Jacob se encontrara con sus familiares. En el momento en que pudo ver el rostro de Martín, en nombre de la persona que había escrito en la hoja de papel, diversos sentimientos en su mente aparecieron de inmediato. El sentimiento de aislamiento en una tierra sin piedad en donde había sido tratado inhumanamente durante semanas, comenzó a desvanecerse gradualmente a medida que las lágrimas comenzaban a fluir por su pequeño rostro. Ya no tenía miedo de Martín por los viejos tiempos, era la alegría y el consuelo de saber que todavía había alguien esperándolo afuera del aterrador lugar en donde estaba viviendo. Incluso si había cometido un delito tan grave, no debía ser tratado de la forma en que actuaba con él, el director de la prisión.

"Sigues tan perezoso como siempre".

Martin, levantó el teléfono de la celda de visitas y comenzó a hablar primero. En esta prisión las personas no podían comunicarse entre si, ni mucho menos pensar en qué podrían tocarse el uno con el otro, era una pequeña celda dividida por un gran vidrio y un teléfono colgado a la barretas del vidrio era la forma de comunicarse entre ambas personas. Después de que Martín hablara una sonrisa apareció en el rostro de Jacob, cuando las lágrimas continuaban fluyendo desde la comisura de sus ojos.

Cuando Martin pudo ver el estado actual de Jacob, inmediatamente se compadeció de este último. A través, de la ventana de vidrio podía ver el estado en que se encontraba y no lo podía creer, porque una persona que era tan hermosa que podía hacer que cualquier persona cayera a sus pies fácilmente, ahora estaba extremadamente delgado, sus ojos eran secos y llevaba un rostro pálido y sobremarcado en los huesos, realmente no podía creer lo que la adicción a las drogas había hecho con él, y también el sufrimiento de llevar encerrado un mes.

"No sé lo que vas a pensar, puede que te molestes, pero ya sabes, te extraño mucho. Pero, estás muy flaco ¿Qué te ha pasado?"