THE REVENGE

CAPITULO ESPECIAL 1: "Un pastel para un amigo"

Ya que todas terminaron con una catarsis de emociones... y la misma escritora me pidió que tradujeron los capítulos... aquí vamos...

En Tailandia no mucha lectoras leyeron estos capítulos y ella quiere que ustedes si lo hagan...

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"Tan linda, se parece a ti Jake".

El hombre mestizo de buen temperamento dijo con una voz sin una pizca de ironía, mientras usaba las yemas de sus dedos para acariciar las mejillas de una pequeña niña de tres meses. Jacob mantenía a su pequeña hijas entre sus brazos mientras recibía la visita de su amigo más cercano con una alegre sonrisa.

"Su carita se parece a la mía, es linda, ¿verdad? Gracias". Respondió Jacob con una voz ligeramente débil y sin atreverse a mirar al hombre frente a él.

Martin al ver el tímido rostro de su amigo, solo sonrió como siempre y llevó sus manos para acariciar suavemente su cabello, como si tuviera miedo de que su propia fuerza lastimara al amigo al que le había dado su corazón.

"Estas haciendo un rostro como ese otra vez, ¿Quieres ser un llorón para competir con tu hija? Jake." Jacob sonrió y sorbió la nariz para tratar de respirar, luego se volvió para mirar a su amigo con una brillante sonrisa, a esa persona tan importante para él y que aún permanecía en su corazón.

"Ya no voy a llorar, prometo que se acabara todo mi drama. Se me olvido decirte que he preparado la receta de un nuevo postre, quiero que pruebes su sabor. Toma a la niña por un momento." Jacob se giró y le entrego a la pequeña niña a Martin, para luego bajar a la planta baja la que era la pastelería que el padre de su hija le había prometido realizar para él.

Martin con la niña en sus brazos, se acercó hasta la habitación para dejarla sobre la cama y pensando que esta hermosa bebé inocente solo había conocido este mundo por la cruel venganza de su padre.

'Tal vez si no hubiera nacidos, en este momento, tal vez....'

El joven mestizo inmediatamente se sacudió su cabeza para eliminar los pensamientos que lo invadían, Sinhee no era culpable de nada, ella era solo una que no había pedido nacer y él no podía culparla porque la culpa era de sus padres que habían tenido una historia tan complicada pero en algún momento de sus vidas debían reconocer sus errores por difícil que fueran.

El sonido de la pesada respiración pesada del hombre mestizo volvió a sonar, para desechar todos los pensamientos del pasado, porque pensaba que Sila ya había recibido la retribución de por todas su acciones.

Sila estaba recibiendo su karma al tener que soportar mirar todos los días a alguien que amaba pero que no le entregaba su corazón a él y que ya no tenía nada que ofrecer, excepto la palabra "deber" porque Jacob solo permitía que permaneciera a su lado por el deber familiar. Sus pesados suspiros arrastraron que Martin volviera a sus sentidos de los recuerdos del pasado y a la realidad del momento.

El joven mestizo solo pudo sonreír y con su gran mano acariciar el suave y cálido rostro de la pequeña niña, esto hizo que Martin comenzara a reír suavemente, pero no pudo evitar arrepentirse de no poder su padre.

"Aquí estás, ¿Te he dejado esperando por mucho tiempo?" No mucho después de irse, Jacob regresó con una gran sonrisa y en su pequeña mano sosteniendo una pequeña y llamativa caja de pastelitos.