doce

188 25 8
                                    

Al ser martes, Juliet tenía sus clases de piano, y la semana pasada Barbara le había explicado geografía a TaeHyung, por lo que esta semana lo haría de nuevo, más cuando la próxima semana tendrían un examen, en ese momento, Kim detestó entrar a mitad de año, porque a tan poco tiempo de haber ingresado a la escuela ya tenía exámenes, trabajos prácticos, exposiciones, y más cosas que solo le generaban más estrés del que ya tenía. Habían decidido ir a la casa de ella, ya que había unas enormes nubes en el cielo que predecían una lluvia veraniega, a pesar del calor que hacía no era bueno estar debajo de la lluvia, mucho menos estudiando, así que después de avisarle a su padre, TaeHyung se estaba dirigiendo a casa de Barbara en autobús, no habían ido juntos desde la escuela porque ella tenía el curso de ingreso a medicina y no pensaba dejar a un extraño (porque a fin de cuentas lo seguía siendo) solo en su casa.

Kim bufó cuando sintió unas gotitas cayendo sobre su rostro, el autobús lo dejó bastante lejos de la casa porque la rubia vive en un barrio privado, obviamente no esperaba menos. Después de decirle al hombre de seguridad que iría a ver a Barbara Jokeey, y él se haya tomado todo el tiempo del mundo en llamar a la casa de la chica para confirmar la presencia de TaeHyung, él se estaba mojando debajo de la lluvia. Las rejas se abrieron, ingresó a paso apresurado después de que el de seguridad le diga el número de la casa, la cual era 222. Se dirigió hasta la misma, no quedándose mucho tiempo viéndola desde afuera porque no quería enfermarse, pero de entrada vió que dentro del barrio habían muchas casas, tanto que se podía calificar como un pueblo pequeño. La enorme casa en la que la rubia vive es de color blanca por fuera, con un lindo jardín por la parte delantera y de dos pisos, con ventanales hermosos que seguramente iluminaban de una manera preciosa con el sol de verano. La chica estaba con la puerta abierta, esperando a que él ingrese, y rápidamente lo hizo, subiendo los tres escalones para entrar por esa puerta que le doblaba la altura.

⎯ Estas empapado.⎯ comentó mientras iba a buscar una toalla, TaeHyung notó que la chica llevaba un corto pijama de seda color rojo, junto a una bata del mismo color que se traslucía, llegando casi a sus talones, no la juzgaba, estaba en todo su derecho de usar pijama en su propia casa.

Le dió una vista a la sala; unos enormes sillones negros de gamuza con exquisito olor, en el medio una mesa de vidrio que debajo tenía una pequeña repisa con revistas de moda, y en el frente un televisor gris con el reproductor DVD debajo, en la misma mesa. Las paredes eran blancas, adornadas con fotografías de Barbara en todas sus edades, de la familia en sí, títulos universitarios de un tal "Kit Jokeey" que asumía que era su padre, y la cinta que decía en grande "Miss Universo" en distintos cuadros, también colgadas en la pared. La casa gritaba talento puro, además de dinero, y que todos ahí parecían ser una familia feliz, murió de ternura cuando vio una foto de Barbara sonriendo con los dos primeros dientes de leche caídos, no parecía ser esa chica mala que todos dicen que es, la que todos recomiendan que se aleje de ella antes de que sea tarde.

Escuchó pasos y miró en la dirección que se fue, las pantuflas afelpadas en sus pies se veían calentitas, y traía unas con ella junto a una muda de ropa que le intrigaba mucho saber a quién le pertenecía, pero no iba a ser tan imprudente para preguntar. Ella le entregó la toalla con una sonrisa, se quedó con la ropa en la mano por obvias razones de que TaeHyung no podía cambiarse delante de ella, además de que estaba mojado y si tocaba la ropa seca también terminaría en el mismo estado. Él volvió a mirar las paredes, esta vez con la vista de ella encima, y se atrevió a preguntar cuando nuevamente vió el título de juez.

⎯ Wow...¿Tu padre...?⎯ dejó la pregunta en el aire, Barbara miró en el mismo lugar que él y asintió sonriente, le encantaba hablar de sus padres, presumirlos y mostrar lo orgullosa que estaba.

⎯ Sí, es juez.⎯ afirmó mientras iba a sentarse en uno de los sillones, doblando sus piernas al estilo 'indio'. ⎯ Encerró a Jeffrey Dahmer en 1991, ¿Puedes creerlo?⎯ soltó sorprendida, recordó cuando su padre tuvo que viajar para dar la sentencia de cadenas perpetuas a ese asesino tan psicótico, temió por su padre, ella tenía 9 años y no quería que le suceda nada.⎯ Mi abuelo también es juez, encerró a Ted Bundy.

Heartbreaker| kth. ✓Where stories live. Discover now