En la Iglesia de Moscú, se encuentra Max Verstappen jurando venganza hacia su amado Daniel, jurando tomar lo mas sagrado para el agente Hamilton, jurando destruirlo tal cual el se encargo de aniquilar su felicidad.
Estuvimos en
1er. Checo Perez
2d...
Camino por el pasillo dirigiéndome al gym. Son las 8am, hoy por primera vez saldré solo a mi empresa, gracias a Dios, Carlos no quebró mi compañía. Max no estaba de acuerdo pero no le quedó mucha opción.
Me tiene algo encantado el saber que en el rango de poder aquí en nuestra casa, somos iguales. Claro no ire solo, Esteban vendrá conmigo, pero lo considero un gran paso en nuestra relación.
Claro por relación me refiero a nuestro pequeño trato de mostrarme que el puede ser digno de estar a mi lado.
Maldita sea! Por los Dioses.
El cuerpo de Max brilla a causa del sudor, su torso desnudó se contrae al movimiento de las pesas en sus brazos. Sus músculos se tensan mostrando sus venas resaltar en su pálida piel.
Esos shorts que trae asfixian sus grandes y largas piernas. Y ni hablar de la pistola que incluye.
Siento el calor subir a mi cara al recordar que yo ya vi su miembro. Maldita sea mi cuerpo se contrae al imaginarme con eso dentro. Me mataría.
-Te gusta lo que ves?- La sonrisa de Max se torna llena de maldad.
-Que dices, no te veía a ti- Le respondo con nervios. Paso a su lado con rumbo a la bicicleta. Mi cuerpo se siente caliente por mis pensamientos.
Veo a Max seguir trabajando a través del gran espejo, por cierto he notado su obsesión por los espejos. Los hay en casi todos lados y en nuestra habitación hay uno enorme encima de la cama. Si hay un temblor moriremos degollados o algo asi.
Siento la mirada de Max sobre mi, asi que conecto nuestras miradas por el gran espejo. Ambos tenemos una mirada de deseo en los ojos.
-Cuanto pesas?- Me pregunta, acaso me llamo gordo?
-75kg. Porque?- Lo veo caminar a la maquina de pesas, donde coloca varias barras y se acuesta sobre el aparato. Comienza a levantarlo y yo sigo con la mirada clavada en el.
-Podría levantarte fácilmente para empotrarte en todos lados.- Siento la sangre bombear en todo mi cuerpo. La cara la siento en llamas.
Bajo de la bicicleta y camino hacia el, paseo mis manos en sus largas y fuertes piernas. Causando que su piel se erice al tacto. Rio para mi.
Los ojos de Max llenos de hambre no me dejan de mirar. Detengo mis dedos al llegar a su entrepierna.
-En tus sueños mas salvajes-Retiro mi mano rápidamente y camino a la salida.
Antes de llegar a la puerta soy empotrado por Max en esta. Sus manos se aferran bajo mi trasero y cuando levanto el rostro su mirada esta oscurecida.
-No tientes al diablo, si no vas a jugar.- Me dice mientras su aliento choca con mis labios. Sujeto mis manos detras de su cuello y lo acerco mas a mi.
La mirada de Max cae sobre mis labios, y yo los entre abro, paseo una de mis manos por su abdomen sintiendo cada músculo bien marcado y trabajado.
-Deja de jugar conmigo Sergio- Max aprieta con fuerza mi trasero, causando que suelte un pequeño gemido, lo que para Max es el permiso para besarme.
Sus labios aprisionan los míos con violencia, mordiendo y probando todo a su paso, aferro mis manos a su cuello y mis piernas se enrollan en su cadera.
Max suelta un gruñido cuando bajo mi mano a su miembro duro. Max abre paso en mi cavidad bucal y su lengua busca probar todo lo que pueda. Muerdo el labio de Max con suficiente fuerza para sacar un poco de sangre, esta gime pero no libero su labio.
El sabor a hierro invade nuestras bocas. Max me baja y se presiona contra mi cuerpo, robándome el aire.
-Déjame mostrarte que puedo ser digno de ti en muchos aspectos- Su voz suena ronca, enviando miles de choques eléctricos a mi cuerpo.
Mi mente no esta razonando nada, todo me da vueltas. Llevo casi 5 meses sin sexo.
Mis manos tocan sin pudor el torso desnudo de Max, mientras este besa y muerde mi cuello, lo hace tan fuerte que me dejaras marcas visibles.
Max mete su mano en mi short, liberando la dolorosa ereccion, mi pene golpea mi cuerpo. La mano de Max baja y sube acariciando mi glande con su dedo. Causando que me vuelva un manojo de gemidos y nervios.
La velocidad de Max aumenta sobre mi, sus besos se vuelven mas dominantes mas salvajes. Muerde mi labio inferior. Mis pulmones queman en busca de oxígeno, pero se siente malditamente bien que es lo ultimo que necesito.
Necesito mas, mas de el.
-Córrete para mi- Susurra en mi oído, su voz ronca y su aliento golpeando en mi, siento el calor arremolinarse en mi vientre.
Mis testiculos se contraen, corriéndome. Mi cuerpo flaquea por la intensidad del orgasmo, pero Max me mantiene firme. Mientras su boca sigue recorriendo mi cuello.
-Mierda,Sergio- Antes de poder responder, la puerta suena detras de nosotros. Pierre es quien habla pero mi mente solo enfoca al hombre frente a mi.
Se que Max a respondido por mi, pero todo en mi está nublado. Soy un maldito desastre, veo como Max levanta su mano y parte de mi semen cayó en ella. Siento pena por eso.
Pero Max solo lo lame, con su mirada fija en mi, causando que me ponga duro una vez mas.
-Sabes tan bien- Es todo lo que dice, siento como si mi cuerpo estuviera en llamas. No logro articular ni una sola palabra. - Pierre espera por ti, ve y date una ducha, tu trabajo espera por ti.
Max me libera y antes de salir por la puerta, me nalguea. Es fuerte.
Hamilton.
Camino por la empresa de Sergio, como leon encerrado. Carlos me negó que viniera por aqui, pero su secretaria me confirmó que mi Sergio vendría hoy por la mañana. Son las 9am ya tiene una hora de retraso el jamas llega tarde.
Si Sergio viene a trabajar quiere decir que no esta con Emilian. Puedo recuperarlo, se que hice mal en escoger a mis padres sobre el. Pero no tuve opción.
La puerta se abre mostrando a la secretaria de mi Sergio.
-El señor Perez a llegado, se encuentra en la sala de juntar con el Señor Sainz.- Agradezco y salgo rápido para ir con el.
Abro la puerta sin tocar, veo a Sainz parado y logro divisar a Sergio en el sillón, luciendo desarreglado. Lleva una camisa negra abierta, el pelo mas largo que de costumbre, y una ligera barba que lo hace ver mayor. A su otro lado se encuentra un hombre que desconozco.
-Tenemos que hablar le digo.- Llevándome la mirada de los 3 hombres a la vez.
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Cortito porque acabo de llegar de pasear! Y me inspire en el camino. Las amo mucho. Por cierto en verdad me encanta leer sus comentarios!
