Sepulcro

Capitulo XXXV

La fiesta de Anastasia transcurre de manera tranquila y exitosa, me mantengo muy profesional evitando cualquier intercambio con Maximiliam, tengo que actuar tranquila, lo pensé mucho y llegué a la decisión de que esta noche llegaré al siguiente nivel con él.

Mientras paso por las mesas de los invitados la señora Margot quien está disfrazada con un traje egipcio que la hace lucir preciosa me detiene.

–Hola Fiorella, te ves muy linda– sonrío por su halago– Quería agradecerte a ti también, ya lo hice con Jennifer, solo faltas tú, mi marido y yo estamos muy felices con el resultado de la fiesta, nuestras hija está sonriendo como nunca hoy– observa a la pequeña Ana que está junto a Maxi y a... Charlotte, paciencia, hoy solo importa Anastasia– Ella te tiene mucho cariño, siempre habla de su mejor amiga Fio.

–El sentimiento es mutuo– respondo– Ella es una niña increíble– le digo, observamos como el señor Dominic le hace señas para que vaya.

–Tengo que irme.

–Adiós– ¿En serio ningún hombre adulto se disfrazó? Ni siquiera el papá de la cumpleañera lo hizo, negando con la cabeza me giro para buscar algún bocadillo, cargar este vestido me tiene hambrienta, al hacerlo me topo con un traje negro y un aroma a menta, el hombre frente a mí me toma de los hombros para estabilizarme.

–Cuidado princesa– dice la voz de Nicholas, levanto la cabeza al oírlo, desde que me contó lo de la señorita Charlotte no hemos vuelto a hablar, quiero creer que él no sabía realmente la verdadera situación entre Maxi y ella, porque si de hecho ya sabía de eso, no creo poder confiar en él de nuevo.

–Oh, Hola Nicholas – sonrío algo tensa, desde hace un tiempo que tengo que hablar con él.

–Te ves...– me observa de arriba a abajo– Como una auténtica Principessa– dice en un italiano perfecto, en otra ocasión igualmente lo he escuchado decir lo mismo.

–¿Hablas italiano?– pregunto confundida.

–Podríamos decir que sí– dice, lo observo y él también va sin disfraz y en traje.

–¿Qué tienen los hombres contra los disfraces?– digo.

–Supongo que preferimos los trajes– dice con una pequeña sonrisa. Es ahora Fiorella, tengo que aclarar todo con él, si Maxi lo hizo con Charlotte yo también lo tengo que hacer con su hermano.

–Oye Nicholas– digo, él me presta toda su atención– Sobre el otro día yo...– no puedo continuar, porque soy interrumpida por Ana.

–Fio vamos– dice la pequeña tomándome de la mano– Le dije a mis amigos que mi mejor amiga fue la que me hizo mi pastel y quieren conocerte– veo la urgencia de Anastasia y decido dejar mi conversación con su primo para después.

–Esta bien, vamos– observo a Nicholas– Tengo que irme, nos vemos luego– él solo asiente. Mientras me dejo guiar por Ana, veo que a un lado de los niños que supongo son los amigos de Ana están Jennifer, el grandote y Maxi, quien tiene una sonrisa victoriosa en su rostro, ese hombre, así que fue obra suya.

El ambiente en el jardín está más tranquilo, la señora Margot, su hermana y el señor Dominic están por un lado conversando, mientras que Lucrecia vestida de vampiro está junto al señor Sergei, curiosa observo como este parece estar atento a las palabras de Lucrecia, pero sin dejar de observar a lo lejos al señor Dominic, ¿Acaso él..?, no lo creo, son solo imaginaciones mías.

Cuando llegamos hasta un grupo de cinco niños muy bonitos, Ana toma mi mano y me coloca frente a ellos.

–Chicos, ella es Fiorella, mi mejor amiga y la mejor chef del mundo– siento mis mejillas arder por las palabras de Ana.